Por Jacinto Chiclana.-
En estos últimos días hemos escuchado a diferentes personajes del mundo de la política, periodistas, intelectuales, opinólogos diversos y lenguaraces consuetudinarios, realizando el escrache verbal e ideológico a los escraches propinados por gente ignota y de a pie, que eligieron de manera espontánea y como blanco de oportunidad a conspicuos personajes del singular mundo de la política y también a otros que, sin pertenecer del todo a esa corporación o con escaso currículum en esa “profesión” siempre ventajosa, se templaban al generoso calor de la llama del poder, hasta no hace mucho.
Obligados ahora, por imperio de las casquivanas circunstancias, a moverse en el llano y mixturarse con gente a la que antes ignoraban, ya que poseedores de una gran dosis de soberbia, o sobrevolaban a cientos de metros sobre sus cabezas o viajaban de incógnito en lujosos Audis con los cristales más oscuros que callejón del infierno, deben ahora trasladarse casi como cualquier hijo de vecino, aunque aun en clase especial casi siempre, gracias a los pingües negocitos que se mandaron durante sus reinados caprichosos.
Antes, privilegiados pasajeros de la abusada flota aérea presidencial, no les queda otro remedio que moverse en aviones de líneas comerciales, rozándose irremediablemente con muchos de los otrora bautizados “de zapatos lustrados”.
¿Quién se hubiese animado hace tan sólo seis meses a abuchear a Zannini en la cancha de Boca?
¿Quién hubiese tenido el valor de increparlo a viva voz a bordo de un avión de línea con rumbo a extranjía?
Hoy, gracias al filoso margen de nuestros votos y como resultado de nuestra paciencia agotada, ya no detentan aquel poder omnímodo y, habiendo perimido el derecho de pernada que ostentaban, se encuentran en el llano, para nuestro regocijo y su desgracia.
El refranero popular abunda en sentencias encontradas y contrapuestas.
Al “ojo por ojo y diente por diente” se le opone el “no hagas a otros lo que no quieres que te hagan a ti”.
Lo cierto es que sesudas explicaciones y contemporizadoras teorías de la tolerancia condenan la cultura del escrache, quizás con bastante más vehemencia que cuando los muchachos de la agrupación del Tío colocaron hermosas fotografías de varios personajes, supuestamente pertenecientes a la “corpo” para que los niños, colmados de encendidas inocencias fogoneadas por los mayores, les encajaran el gargajo más voluminoso que les permitieran sus infantiles gargantas.
Los “correctos” periodistas que antes se mostraban indignados por los escraches kirchneristas, se flagelan hoy por los reclamos a Zannini, olvidando aquel furibundo puñetazo del gangoso violento, rompiéndole la mandíbula a un manifestante inofensivo, que simplemente se expresaba sin violencia contra la terrible corrupción e inoperancia de muchos de los integrantes de la banda que asolo a nuestra república hasta anteayer.
Queriendo ser más papistas que el Papa, se quejan tibiamente del maltrato a una periodista, que osó meterse en medio de una manifestación de apoyo a una eventual delincuente, recibiendo violencia y manoseos indignos que los muestran como son.
Minimizan los abusos del ex Secretario de Comercio Interior y sus bravuconadas, sobre todo cuando el blanco eran mujeres, pero abundan en axiomas plenos de bondad cuando algunos pocos de aquel pueblo menospreciado y ninguneado, expresan su bronca ante personajes nefastos que se manejaron con absoluta impunidad durante largos años de reinado absolutista.
Ahora me pregunto: si durante doce largos años hicieron lo que se les cantaban las mollejas, dijeron las barbaridades mas inverosímiles y taradeces más rebuscadas que se nos puedan imaginar, desde que la diabetes es enfermedad de ricos, hasta que estamos mejor que Alemania, y cada vez que nos manifestábamos indignados, nos insultaban tildándonos de asquerosos oligarcas o enviaban a sus huestes con sus caras tapadas al mejor estilo intifada a repartir palos a derecha e izquierda, ¿cómo esperan que reaccione la gente cuando se encuentra con alguno de aquellos ex capitostes?
Lejos de propiciar ningún tipo de violencia, creo que cualquiera tiene derecho a expresar su bronca y, sin necesidad de proferir insultos, decirles en la cara a estos monjes indeseables lo que pensamos de ellos.
Decirles, en lo posible sin gritar y evitando que se nos revienten las arterias cerebrales, que son una basura abyecta que se enriqueció vilmente con nuestros dineros, que son unos sinvergüenzas sin medida y cuasi ladrones de conventillo…!!
Y todo lo que se nos ocurra, porque toda nuestra imaginación no alcanza para tipificarlos en su inmoral medida.
Sobre todo ahora, que parece ser que sus tropelías exceden lo que imaginábamos y todas las pruebas apuntan a establecer que nos vienen robando desde antes del principio de esta oprobiosa década infame con yapa.
Por eso, quiero decirlo con todas las letras:
Yo… ¡Yo no pongo la otra mejilla….!!
02/05/2016 a las 2:21 PM
La Justicia (con mayúsculas) ha resuelto que no es una calumnia llamar «ladrón» a un ladrón pues solamente expresa una realidad.
Cuando lo llaman HdP, será preciso investigar las actividades de la madre antes de horrorizarse y creer que es un insulto. La Asociación de Meretrices no lo consideraría estigmatizante.
Y de la misma forma habría que proceder respecto de los diferentes epitetos que les digan a tales personajes.
Lo que parece singular es que algunos se horroricen de tales actitudes lo cual lleva a pensar que no tienen la ropa interior muy limpia y que tienen miedo que algun día les toque a ellos ser el blanco de los agravios.
02/05/2016 a las 4:41 PM
La calumnia es la falsa imputación de un delito de acción pública (el robo es un delito de acción pública), pero se convierte en calumnia cuando es falsa; por eso si se le dice ladrón a quien verdaderamente lo es , no es un delito sino una verdad a voces.
02/05/2016 a las 3:04 PM
Lo dice muy bien el Nicolás Márquez en Prensa Republicana y por razones de brevedad a él me remito cuando dice:
«(…) Asimismo vale la siguiente aclaración: esto que estoy elogiando y además proponiendo para acontecimientos actuales y futuros no es técnicamente un “escrache”, dado que simplemente se trata de reacciones espontáneas no en función de la ideología del repudiado sino como consecuencia de su inmoral y delictual participación en la función pública. Este tipo de manifestaciones no sólo son legítimas sino necesarias.»
Es indispensable que cada funcionario kirchnerista sienta el desprecio social en todos los rincones. Que advierta pánico al salir a la calle. Que se reconozca como un paria en su propia Patria y que no sólo le tenga miedo a la justicia sino también al vecino.»
«Que tenga en claro que adonde quiera que vaya, correrá el riesgo de que la parte sana de la sociedad lo desprecie, lo destrate verbalmente y le vaya decir todo cuanto no ha podido expresarle durante 12 años de censura, monólogo y autoritarismo:»
«¿qué menos se merece un miserable como el turista trasnacional de Zannini que un epíteto catártico de todos quienes en calidad de ciudadanos fueron sus víctimas? (…)».
En lo que hace a mí accionar, seguiré como lo he hecho hasta ahora, (desde el 2002) sin cambiar un ápice y cada vez que vea a estos «patoreros de cadena nacional» le recordaré sus dichos y le pediré que me lo repitan en la cara.
02/05/2016 a las 5:25 PM
a estod hijos de un vagon de remil putas habria que colgarlos de las pelotas
02/05/2016 a las 6:07 PM
EL FALSO MORALISMO DE ALGUNOS FAMOSOS PERIODISTAS…SINCERAMENTE ME HACE VOMITAR !!!!
RESULTA QUE AHORA NOS PIDEN QUE RESPETEMOS A QUIENES NOS HAN ROBADO -MENOSPRECIADO- INSTRUMENTALIZADO- PERSEGUIDO- NINGUNEADO, ETC.ETC CON EL EL SOLO FIN DE ENRIQUECIMIENTO PERSONAL, SIN IMPORTARLES LAS CONSECUENCIAS DEL RESTO DE LA GENTE Y DEL PAIS TODO. REALMENTE ES INDIGNANTE. Y PERSONALMENTE SI LOS LLEGO A TENER A TIRO, A ALGUNOS DE ESTOS DELINCUENTES, SIN GRITARLES Y MIRANDOLOS A LOS OJOS, NO PODRE HACER A MENOS QUE DECIRLES QUE SON UNOS REVERENDOS HDP.
02/05/2016 a las 7:42 PM
HORACIO, BRILLANTE IDEA LA DE TRANSCRIBIR A NICOLÀS MÀRQUEZ. ESE JÒVEN TIENE UNO DE LOS MÀS DESTACADOS CEREBROS DE LA AQCTUALIDAD.
GRACIAS.
03/05/2016 a las 11:35 AM
gorilamaguila
Apoyo tu idea pero le falta algo, colgarlos y que se sequen al sol, hasta que les brillen los huesos.
Lo de cantarles la verdad en público está más que bien, ellos sin decir nada nos dejaron así: como el Gral Tarija, con una mano en el culo y otra adelante.
Al judío ministro de economía le gritaron de todo cuando volvía en Buquebus con la familia desde Uruguay;
A este maoista empedernido le dijeron de todo menos bonito en el aeroplano del otro día
PERO
NO HUBO, EN AMBOS CASOS, UN PATRIOTA QUE LOS REVENTARA BIEN A TROMPADAS, QUE LOS DEJARA PARA EL HOSPITAL.
Seguimos siendo muy malos de palabra, somos los más malos del mundo pero a la hora de los bifes no pasa nada; brota el educado que no se quiere comer al caníbal para no ser uno de ellos, el culto y fino que no le pega ni a una mosca y quiere arreglar todo con charla.
ASÍ ESTAMOS DESPUÉS DE 32 AÑOS, 4 MESES Y 23 DÍAS DE CHARLA
Mientras tanto, nos siguen cerrando el cerco y preparándose para el golpe final; no olvidar que coparon BERNARDO DE IRIGOYEN en Santa Fé para llevarse $200.000 y las armas de la comisaría.
Así empezaron los adoradores de la patria socialista cuando coparon Garín y La Calera, sus orgas siguen entrenando con parte de las 12.000.000 de municiones que se robaron junto con armas de varios lugares; mientras nosotros seguimos con el discurso fino y culto.
Después, a no agarrarse la cabeza, VA A SER TARDE.
Lancero del «2» de Caballería