Por Guillermo Cherashny.-

No es nueva la denuncia de Daniel Scioli contra los ataques que recibió en Facebook y principalmente en Twitter, ya que desde diciembre Sergio Massa fue víctima de una campaña similar en las redes sociales que tuvo un gran éxito, ya que ayudó a que bajara del primero al tercer puesto, pero en realidad más que esos ataques en las redes, cayó al tercer lugar porque el electorado vio a Mauricio Macri, Elisa Carrió y la UCR como los que podían derrotar al kirchnerismo. Sin embargo, tanto Macri como Carrió confundieron antikirchnerismo con antiperonismo y así fue que el 9 de agosto Scioli ganó por 8,5% sobre CAMBIEMOS.

Otra campaña «sucia» originada en Jaime Durán Barba se produjo en las últimas dos semanas contra Martín Lousteau con el objetivo de que se bajara entre la primera y segunda vuelta sobre la base de que no podía juntar más votos que el 25,5%. Y así se lo sometió a un ataque por la resolución 125, redactada por el candidato de ECO en el 2008. De allí hasta cuestiones intimas como un romance con Juanita Viale, que estaba embarazada. El caso es que finalmente Lousteau obtuvo el 48,5% contra el 52,5% de Horacio Rodríguez Larreta.

El caso Scioli

En el tema de la campaña contra Scioli por las inundaciones, que efectivamente existieron y que son su responsabilidad por falta de previsión, es evidente que él debió haberse plantado ante el gobierno nacional, porque el presupuesto de la provincia sólo alcanza para pagar sueldos. Y hubo además imprevisión ante la posibilidad de fuertes lluvias por el cambio climático y más teniendo en cuenta que, como contraejemplo, Macri solucionó el drama de las inundaciones en la Capital Federal. Encima Scioli se fue a descansar a Italia cuando las aguas todavía estaban altas y no consultó sobre la posible sudestada que finalmente ocurrió. Es cierto que le trucaron una foto vieja como nueva y que no estuvo en Cerdeña como se dijo, porque debió volver rápidamente. Ante la denuncia del gobernador contra los tuiteros PRO, éstos le contestaron hábilmente que busca identificar a los tuiteros del PRO y Carrió y no se ocupa de los inundados, aunque es muy probable para el 25 de octubre este asunto será olvidado. Pero hoy por hoy, la disputa se profundizó y puede seguir hasta límites desconocidos. Claro que al mismo tiempo se vuelve a polarizar la elección entre Scioli y Macri y esto puede servirles a los dos, ya que la gente se olvidaría de UNA.

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