Sres. Jueces de la SCJN, el STJ de Entre Ríos les dejó un mensaje

Por Juan José de Guzmán.-

Esperaron a la Feria Judicial para ordenar la liberación del exgobernador Urribarri en la misma provincia donde, en mayo de 2022, fue destituida por mal desempeño por el tribunal de aquella provincia la Fiscal Goyeneche, que tras su recurrencia ante la SCJN logró la anulación de tan arbitrario fallo.

De esta provincia, donde el olor putrefacto que despiden los ámbitos judiciales se ha tornado insoportable, están detenidos en Paraguay el Senador Kueider y su secretaria Iara Guinsel, oriunda de Concordia como él, tras haber sido descubiertos con más de 210.000 dólares, más de 600.000 pesos y 3,8 millones en guaraníes sin declarar, pretendiendo pasarlos subrepticiamente por la Aduana, en horas de madrugada.

El argumento de los jueces Leonardo Portela y Germán Carlomagno (que actuaron en Feria Judicial) para la liberación de Urribarri fue que la sentencia no estaba firme y la prisión efectiva era una medida desproporcionada. Entonces la pregunta que salta a la vista es: ¿quién es el tribunal u organismo que debe dejar firme esta condena?

Todo parecería tener una similitud llamativa con el famoso cuento del gran bonete (a quien se le hubo perdido un pajarito y trata de acercarse a la verdad preguntando a los actores del juego)… “Yo Señor, Sí, Señor… No, Señor, pues entonces, ¿quién lo tiene? …el Tribunal Superior de Justicia de Entre Ríos, la SCJN, el Gran Bonete?”

Les doy la respuesta, para que decidan hoy mismo: son los Jueces de la Suprema Corte de Justicia de la Nación quienes deben dejar firme la condena.

Señores Jueces, Doctores Rosatti, Lorenzetti y Rosenkrantz, tienen la palabra… pero apúrense, antes de que el “dormidor de causas” sea designado por decreto a la Corte que ustedes integran.

Desde ya, gracias por la premura que le sepan dar a este asunto.

Firmado; un ciudadano que tras la irrupción del Dr. Luciani volvió a creer que algún día, la dama de los ojos vendados volvería a instalarse en los tribunales de Justicia de la Argentina, de donde nunca debió haberse marchado.