Por Sergio Antonio Graziano.-

La infraestructura de rutas del país está destruida. Es peligroso transitar.

Es letal transitar con autos de familia.

Los pozos semejan cráteres y su profundidad y bordes verticales y filosos son una trampa mortal para cualquier automóvil.

Miles de personas se accidentan y mueren en las rutas del país a causa de estos pozos, de los lomos en el medio de la ruta y las profundas canaletas que cuando llueve se transforman en profundos ríos que desvían la trayectoria de los automóviles.

Las camionetas superan estas trampas mortales pero también se desvían y cuando lo hacen, de frente vienen los enormes camiones brasileños, chilenos y nacionales lanzando cegadoras cortinas de agua con una violencia tal que fácilmente puede asustar a los conductores, barriendo a los automóviles fuera de la ruta y haciendo que una familia pueda matarse.

Alguien debe bajar la velocidad de los grandes camiones en las rutas.

Lo que mata es el estado desastroso de las rutas y la velocidad.

Nadie se mata a baja velocidad.

El gobierno nacional debería realizar tareas de bacheo en las rutas nacionales hasta que tengamos autopistas y de alguna manera obligar a las provincias a invertir en la reparación y bacheo de las rutas provinciales.

Mientras se realiza esto, que es urgente, hay que buscar la manera de atraer empresas que construyan autopistas por peaje y obligar a los supercamiones extranjeros a pagar fuertes sumas para usar nuestras rutas.

Estas autopistas y rutas nuevas a construir deberán cumplir las especificaciones de compactación del terreno y espesor de las capas para que no se vuelvan a hundir y requieran otra vez de reparación y repavimentación, lo cual parece ser un negocio generado con propósito deliberado.

Se debe acabar la coima para que sean aprobadas obras terminadas que no cumplen con las especificaciones técnicas. Se debería llamar a Ingenieros a constituir equipos de monitoreo de las obras ad honorem, con solo los gastos pagos.

Milei, no hay tiempo.

La gente se mata.

Ocúpese de los problemas de infraestructura y hágalo rápido.

Haga obra, traiga capitales, termine con la coima.

Usted debe crear puestos de trabajo.

Traiga empresas extranjeras que no coimean.

Milei, ocúpese o fracasará tristemente como uno que todos conocemos.

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