Por Raúl Mario Ermoli Galluppi.-

Otro asesinato mafioso en Rosario de Santa Fe. (¿Cuántos más?) Hoy, le tocó, como a tantos ya, a un joven padre de familia, que deja una familia, su esposa, su hijito y muchos amigos y vecinos. Es que venía recibiendo amenazas mafiosas hace tiempo, de que abandonara su vivienda. Por ello contaba con una custodia, pero que era muy relativa, o «irregular», por eso, en cuanto ésta se retiró, lo asesinaron. Las amenazas eran conocimiento de la Fiscalía, y si eran para que dejara su casa, en cuanto metodología habitual de la mafia cuando seleccionan una casa para convertirla generalmente en un «bunker», «kiosco», o depósito de drogas, hechos que ya han realizado en muchas oportunidades. A esta familia le habían baleado la casa, dos veces, y en la segunda incluso el intendente de la ciudad Pablo Jabkin estaba al tanto, pero todo fue inútil. En suma, todo indica que ni la policía, ni la justicia, ni la política por lo visto pueden hacer nada para poner coto al accionar mafioso que tiene a la ciudad en sus manos hace ya muchos años; como así mismo tampoco ceden los robos, las entraderas, los arrebatos y demás actos delictivos… Sabemos que el Gobierno Nacional quiere hacer grandes cambios, especialmente en el área de la economía, pero la Razón nos dice que ANTES que las cuestiones económicas por importantes que sean, con sus múltiples tribulaciones monetarias, sin duda está la VIDA de cada uno de nosotros.

Y si las policías provinciales y demás autoridades no saben, no pueden o no quieren, solucionarlo, es hora que las Fuerzas Federales tomen carta en el asunto pero de manera efectiva, porque los rosarinos, si bien vivimos en una provincia, también somos ciudadanos de la Nación, y tenemos derecho a que las fuerzas nacionales nos asistan frente a un accionar que ya resulta insoportable. Gracias y saludos a todos.

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