Por Hugo López Carribero.-

En una reciente resolución, la Cámara Federal de Casación validó escuchas en la causa “Skanska” y solicitó celeridad en el trámite de la investigación, a los efectos de avanzar con la pesquisa judicial y evitar la posible prescripción de algunas acciones delictivas allí investigadas.

La Cámara expresó: “Estamos otra vez frente a una investigación hundida en el tiempo, en el fárrago del “trámite”, donde en la confusión de roles que el actual Código Procesal Penal de la Nación permite, se generaron disidencias entre acusadores: el juez de instrucción, que no utilizó la prueba y advierte que no se han dado los presupuestos procesales para excluirla, ello más allá del acierto o no de las objeciones de las defensas, cuyo tratamiento eventualmente sólo puede darse si aquella sentare las bases de una decisión jurisdiccional”.

De esta manera, la Sala IV anuló una decisión que había excluido como medio de prueba una grabación secuestrada en un allanamiento a la sede de la empresa.

Aquella grabación habría registrado la conversación que también habría sido mantenida entre el auditor de la empresa con otra persona, que sería uno de sus gerentes, en la que se sugeriría el pago de comisiones indebidas en ocasión de varias obras públicas.

La decisión judicial se vio empañada por los acontecimientos públicos y televisivos de esta semana en el edificio de Comodoro Py, en el marco de las audiencias establecidas por la revisión de la administración pública nacional pasada.

Pero sin embargo, puertas adentro de los Tribunales el fallo generó tensión e incertidumbre por los pasos sucesivos e inminentes que la Justicia Federal deberá tomar en tan delicada causa.

De conformidad a fuentes judiciales no se descartan posibles detenciones, también en esta causa, juntamente con una serie prolongada de declaraciones indagatorias.

Por su parte, el Ministerio de Justicia de la Nación, ha seguido muy de cerca el trámite de la causa desde que la misma ingresara a la Cámara de Casación, tal vez mucho mas que los propios sospechosos y abogados defensores.

La causa judicial ofrece un abanico de hipótesis investigativas que no se agota en aquello que se hizo hasta ahora, y que por el contrario hay personas no mencionas aún que también se sienten amenazadas por la espada de la Justicia.

En este marco, se puede establecer que hay implicados aún ni siquiera han sido notificados de la formación de la causa en su contra, ni de las acusaciones de las que podrían ser imputados. Pero como la conciencia individual no puede ser ajena del ser humano, todos ellos pueden ir buscando a sus respectivas defensas técnicas. Y deben recordar que el abogado hay que contarle siempre toda la verdad, luego él se encargará de acomodar las cosas de la mejor manera posible.

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