El dólar tuvo una nueva escalada acumulando un aumento del 60% respecto a diciembre del 2017. La aguda inestabilidad de la divisa llevó al desplazamiento del presidente del Banco Central. Resulta muy contradictorio que a horas de haber establecido enfáticamente en el acuerdo con FMI el compromiso de darle independencia al Banco Central se desplace a su titular para ser reemplazado por quién venía ocupando el Ministerio de Finanzas.
¿Cambiar de presidente del Banco Central puede traer estabilidad en el dólar? Para explorar una respuesta sirve echar una mirada a un indicador cuyo comportamiento ayuda a entender las causas profundas de las turbulencias financieras, que es, el salario medido en dólares. Cuando el salario medido en divisa extranjera se desfasa respecto a los niveles de productividad local se producen presiones al alza en la cotización del dólar para tender a corregir el desfase.
En noviembre del 2015, antes de que asumiera la actual gestión, el salario en dólares era de U$S 1.280. Este nivel no era sustentable como lo demuestra el hecho de que, aun con “cepo cambiario”, el gobierno se vio obligado a vender masivamente dólares a futuro. A partir de que asume la actual gestión, el salario medido en dólares tuvo la siguiente evolución:
- En el 1° trimestre del 2016 bajó a U$S 897 debido a la devaluación provocada por la salida del “cepo cambiario”.
- En el 4° trimestre del 2017 el salario en dólares volvió a subir hasta los U$S 1.203.
- Entre mayo y junio del 2018 el salario en dólares volvió a caer a los U$S 904 producto del intenso proceso devaluatorio por el que se está atravesando.
Estos datos muestran que al inicio de la actual gestión se sinceró el artificial nivel del salario medido en dólares que mantenía el gobierno anterior. Pero desde aquel momento hasta finales del año pasado el salario medido en dólares volvió a subir a niveles similares a los de finales del 2015. Como semejante incremento (más del 30%) no estuvo acompañado en mejoras de similar magnitud en la productividad se fue haciendo cada vez más difícil exportar y más rentable importar. La devaluación es la que viene a imponer los ajustes a la baja del salario en dólares para tender a corregir este desequilibrio externo.
El déficit fiscal financiado con deuda externa es el que provoca el desequilibrio del sector externo. Esto se explica porque la abundancia de divisas que trajo aparejado el endeudamiento externo al que se apeló para cubrir el déficit fiscal produjo atraso cambiario que es lo que generó la mejora de las remuneraciones medidas en dólares. Como no se acompañó con aumentos de la productividad laboral de análogas magnitudes, el resultado fue un vertiginoso incremento de las importaciones y viajes al exterior en paralelo con el deterioro de la capacidad exportadora, incluyendo el turismo receptivo.
En este contexto, las fuertes devaluaciones que se produjeron en las últimas semanas no son consecuencia de decisiones tomadas por el Banco Central. Son las reacciones propias generadas por la percepción de que la estrategia de corregir gradualmente el déficit fiscal con endeudamiento externo no es sustentable. Se trata de un problema estructural sobre el cual poco pueden hacer las nuevas autoridades del Banco Central. En el mejor de los casos, podrán atemperar las turbulencias transitoriamente, pero no existe alquimia financiera que evite las presiones tendientes a sincerar el poder de compra de las remuneraciones al magro desempeño productivo del que adolece la Argentina.
La agenda para mejorar la productividad es amplia y compleja, pero empieza por reducir el déficit fiscal. Con esto se evita el atraso cambiario que produce el ingreso de dólares por mayor deuda externa y brinda el espacio fiscal para reducir impuestos distorsivos y generar condiciones para que el sector productivo acceda a créditos a plazos y tasas similares a las que prevalecen en el resto del mundo. En paralelo, es fundamental profesionalizar las estructuras del Estado para que las empresas y los ciudadanos reciban servicios públicos de mayor calidad y así puedan elevar su productividad. (IDESA)
18/06/2018 a las 3:18 PM
La realidad creada por la inoperancia, fue desde un principio disfrazada, por la efectividad del RELATO.
Durán Barba estudió con detenimiento y quizá admiración a J. Goebbels que asesoró al Adolf. Hoy escuchamos, en el reportaje que le hace al hijo del padre, Victor Hugo lanata, que culpa de todo lo mal que ejecutaron la administración, a los opositores. Jamás los llamaron a participar con su opiniones ni menos a colaborar con sus acciones. Al principio lo forrearon a nivel internacional y luego lo exterminaron entre el principal y la “luz de sus ojos” 1, 2 y tres. Colaboraron en tener la “óptica válida” de la realidad los “ellos son yo”, con sus diarios del lunes, de un país de fantasía. Las consecuencias del tiempo que perdimos no los aqueja ni por asomo, sólo a nosotros …los que queríamos una alternativa basada en una plataforma de “mentiras”.
Goebbels opinaba que “hay que hacer creer al pueblo que el hambre, la sed, la escasez y las enfermedades son culpa de NUESTROS OPOSITORES y HACER que nuestros SIMPATIZANTES se lo repitan en todo momento”, Toda propaganda debe ser POPULAR, adaptando SU NIVEL al MENOS INTELIGENTE de los individuos a los que va dirigida. Así más pequeño ha de ser el esfuerzo mental a realizar por los componentes de su tropa propagandista (trolls).
El equeco indio ecuatoriano piensa: “El electorado está compuesto por simios con sueños racionales que se movilizan emocionalmente. Las elecciones se ganan polarizando, sembrando el odio hacia el candidato ajeno”. La CREACIÓN del enemigo es fundamental. Todo mal LE DEBE ser atribuido; es más, es necesario que exista UN solo enemigo.El hijo del padre, en este reportaje, lo obedece a rajatabla. Y, cumple también con la regla: “Lanzar información para intentar que varios actores la recojan. Si SOMOS varios los que DECIMOS lo mismo, esto le da verosimilitud. También se pueden usar informaciones fragmentadas para FIJAR el aspecto que queremos marcar en la gente”.
Otra regla es el OPORTUNO SILENCIO, cuando no se tienen argumentos y deben disimular las noticias que favorecen al adversario, y lo hacen con la bajada de línea a los medios de comunicación fieles por las pautas oficiales. No se editan primeras planas con las cuentas en paraísos fiscales de los que cumplen con tener offshore para integrar el equipo de lujo y ni siquiera se publicó un allanamiento verificado en Casa de Gobierno por otro caso, que rebotó aún en cadenas internacionales. Y así creen que “afuera”no saben lo que aquí pasa. Si bien las denuncias de corrupción contra funcionarios del actual gobierno son casi diarias, suavizadas por la O.A., siempre las tapas de los grandes medios se refieren a las que afectan a integrantes de la gestión anterior. Todas son advertencias sobre “el regreso de Cristina”, o “el populismo a la venezolana”. Si el Gobierno sufre algún traspié, es parte de “la herencia recibida”. Es importante que el ciudadano de más baja cultura pueda repetir el mensaje, esa que dice que no es K y apoya excusándose de ser idiota útil de éstos, porque “adelante no tenemos otra cosa que se nos ofrezca”.
Y continúa las lecciones del equeco Tiñol Lóreal barba: “hay que estudiar a la gente sencilla, esa que dice que no le interesa la política. El PAPEL de los medios es fundamental, NO HAY que educar a la gente. El reality show venció a la realidad”.
El desastre económico de Cambiemos que debe acudir al FMI como último recurso es presentado como un ACIERTO político. Para qué darles “explicaciones complejas” a la gente.
Lo fundamental es repetir que se trata de un éxito, que todo está bajo control. Al tiempo se reiteran promesas de un mundo feliz en el futuro. Mientras el hijo del Padre insiste (sin ningún asidero en la realidad) en que “tenemos las tarifas más baratas del mundo”, de la mano de ESTE RELATO se produce una verdadera transferencia de recursos desde los usuarios a los empresarios amigos dueños de las empresas energéticas del país.
Lo cierto es que menosprecian a Goebbels pero su discípulo Tiñol LÓreal Barba les hizo aplicar una propaganda que generó sueños y fantasías a sus estafados votantes que despertarán a la realidad producto de la más temible pesadilla.
Uno puede ignorar la realidad, pero lo que no puede es ignorar las consecuencias de ignorar la realidad.
25/06/2018 a las 2:01 PM
NO SE PUEDEN HACER AUDITORIAS CONTABLES A LAS EMPRESAS Y SABER EL COSTO REAL Y EL PRECIO QUE SE DEBE PAGAR
20/07/2019 a las 9:05 AM
Estimado creo que se equivoco de BOLETA. Destila veneno hacia Duran Barba pero los tips que ud señala para SELECCIONAR a la hora de diseñar los spots de campaña son lo que hemos visto durante todo el RELATO. Solo un par de ejemplos : para que publicar datos de pobreza si eso podia estigmatizar.? que importancia puede tener realizar obra cloacal o saneamientol o generar agua potable si eso NO SE VE y el basural es una fuente de reciclaje? . Hoy la obra esta en plena realizacion y se apunta a calidad de vida de TODOS TODAS Y TODES. No confunda al electorado. Si ud busca errores sea justo y mencione los sapos que nos tuvimos que tragar la ultima decada y muchos años hacia atras. Al fin y al cabo, si la propuesta de CAMBIEMOS ahora JUNTOS POR EL CAMBIO LO VA A INCLUIR COMO A TODO CIUDADANO . PIENSELO, A QUIEN BENEFICIA DEL MODO QUE HA ELEGIDO PORQUE QUIERO SUPONER QUELO HACE DE BUENA FE. Tenga ud un buen dia y un pais pujante y feliz
20/06/2018 a las 6:34 AM
Es notable como los medios , incluidos el I.P. adhieren a las mismas causales cuando de opinar sobre la inflación se trata.
Parece verdad indiscutible cuando se afirma que el déficit fiscal sería la causa primera de éste flagelo que azota a nuestro país.
Cabe recordar que los primeros indicios de transformar a nuestra economía en eternamente inflacionaria
comienzan con el GRAN CANALLA, allá por 1945-50. Hasta esos años, Argentina tenía altos niveles de déficit fiscaL, una economía muy poco diversificada y principalmente agroexportadora, con una incipiente industrialización, producto de la misma necesidad generada por la segunda guerra mundial y la escases de insumos, generada por la dificultad de la comercialización ultramar o la demanda establecida por los países beligerantes, pero sin inflación. Aclarado esto, es difícil entender cómo más allá de causas estruturales, no se habla en los medios, a los que hoy acceden “importantes” economistas, de lo que considero la causa primera de la inflación, que es la falta de crédito, abundante y barato, para producir. Si se analiza desde 1945 en adelante paralelamente a una evolución creciente de la inflación, comienza el crecimiento tumoral de un sistema financiero y un deterioro del sistema productivo, quedando visiblemente demostrado que los roles se invierten, es decir , en lugar de desarrollarse un sistema financiero para apoyar y hacer crecer el aparato productivo ocurre exactamente lo contrario, un sistema financiero que crece y “PRACTICAMENTE FAGOCITA” a un aparato productivo que decrece. Junto a estas variables se pueden analizar la evolución del crédito en disminución y sus tasas en significativo crecimiento. Todos estos razonamientos, los explica muy bien el Dr. en economía Don Walter Beveraggi Allende en sus diversas obras y en uno de sus últimos fascículos, EL SIDA FINANCIERO.
Es muy razonable pensar y preguntarse, si EEUU tuvo en 2017 un déficit fiscal de U$S 600.000 millones, porqué no tiene inflación?. También deberiamos preguntar a nuestros “iluminados economistas”, piensan salir de la inflación sin crédito abundante y barato para el sector productivo? ó creen que se va a salir de ésta dramática situación con UN INMORAL ENDEUDAMIENTO ó un alegre juego de DÓLAR, TASAS, BONOS Y UN ALEGRE IR Y VENIR POR MANIOBRAS FINANCIERAS, EN LAS QUE SABEMOS QUIENES SON LOS POCOS Y SEGUROS GANADORES Y LOS MUCHOS Y SIEMPRE PERDEDORES.
Será que debemos rezar y esperar que “en éstas tierras venga un criollo a mandar” y que sea capaz de quebrar el espinazo a ese monstruo que ha puesto sus garras sobre la economía y vida de nuestra Nación.
Nota: no quiero decir en esta nota que el déficit fiscal no sea una de las variables causales de inflación, sino que en primer lugar no es la más importante y que la forma de reducirlo es justamente un crédito abundante y accesible, a tasas razonables para desarrollar el aparato productivo que apreciaría nuestra moneda y generaría trabajo genuino, mejorando de ésta manera, todas las variables e índices, no solo económicos sino tambien los sociales.