Mauricio Macri en la primera aparición pública luego de “vetar” la Ley de Emergencia Tarifaria sancionada por mayoría en el Congreso Nacional.

Por Eduardo Difonso.-

Hemos escuchado en varias oportunidades, al aplicar el Tarifazo y para justificar el VETO a la ley de Emergencia Tarifaria que retrotraía los valores a noviembre del 2016, al Sr Presidente Macri justificar tales medidas con argumentos muy racionales en apariencia como:

-La energía hay que pagarla, porque lo que se regala en el Estado alguien lo está pagando.

-Si no pagamos lo que vale la energía, nos quedaremos sin ella y un país no puede funcionar sin energía.

-Créanme que no encontré otro camino más que el aumento de las tarifas, si lo hubiera habido no aplicaría tales aumentos.

-No tenía otra alternativa que eliminar los subsidios para disminuir el déficit fiscal que significa gastar más de lo que ingresa al Estado.

Pero, luego de estudiar y analizar los datos oficiales y objetivos, vemos que habría un camino u otra alternativa para analizar las políticas públicas a aplicar en el tema energético que no implican recargar el esfuerzo sobre las familias argentinas mientras que si se mantienen subsidios para las prestatarias de los servicios públicos concesionados a empresas multinacionales de Extracción, Transporte y Distribución del Gas Natural por ejemplo.

Si el Sr. Presidente Macri hubiera analizado la mal concebida reducción de subsidios con el criterio de la revisión y auditoría de los contratos de concesión de las Empresas en esta nota mencionadas y de sus rentas extraordinarias, hubiera sido más sencillo reducir dichas ganancias a la mitad de las percibidas por año (U$S 8.250 millones de dólares que significarían U$S 4.125 millones de dólares por año o su equivalente en pesos a un dólar promedio de $ 20 (contemplando valores del 2016 y 2017) significaría un ahorro de $ 82.500 millones de pesos por año) tendríamos $ 165.000 millones de pesos para aplicar a reducir el déficit fiscal. Situación que no se ha logrado a pesar de los tremendos tarifazos aplicados a los usuarios en el caso del servicio de gas.

Al mismo tiempo se podría haber aplicado un incremento tarifario razonable y en función del verdadero valor de gas en boca de pozo (costo argentino) equivalente al 10% del implementado (en gas fue del 1.240%) o sea de casi el 120% para los usuarios, lo que no hubiera significado una desmesurada carga para los hogares y empresas consumidoras de este vital elemento y los argentinos habríamos entendido que este esfuerzo si lo pueden hacer los que tienen ingresos fijos, asalariados, jubilados y pensionados por ejemplo como también las PyMES.

Para ello se debió actuar también partiendo de la base de que todas las concesiones hechas por el Estado a las petroleras, Transportadoras y Distribuidoras para la prestación de estos servicios públicos, como así todas las inversiones realizadas, al final de la concesión deben ser transferidos sin ningún cargo al Estado Nacional porque así lo establecen las leyes y contratos que definieron la correspondiente concesión.

A continuación aportamos información sobre las rentas extraordinarias obtenidas por algunas empresas por administrar la explotación de los recursos no renovables de los argentinos y que, por errores en la fijación de las políticas públicas por parte del estado, y por la falta de seguimiento que debieron hacer los organismos de control, llamados Entes Reguladores, hoy se ha transferido toda esa ineficiencia sobre las espaldas de los consumidores, que no son, ni más ni menos, que los propietarios de dichos recursos naturales.

Basándonos en un trabajo elaborado por el Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (OETE-ID) y tomando como respaldo la exposición del Ministro Marcos Peña, Jefe de Gabinete del gobierno PRO-RADICAL, con motivo de su informe 110 del 23 de mayo del corriente año, dirigido a la Honorable Cámara de Diputados de la Nación, el ministro afirmó que en el año 2017 las Distribuidoras de Gas denunciaron ganancias por $ 4.973 millones de pesos y las Transportistas $ 3.635 millones de pesos.

A esto nosotros creemos conveniente agregar un 30% de incremento aplicado desde el mes de abril del corriente que no está contemplado en dicho informe ministerial como tampoco el aumento que se aplicará a la tarifa de gas en octubre según afirmaciones del ministro de Energía y Minería Juan Aranguren.

Los valores expresados, y las ganancias empresarias, se verán incrementados por una devaluación del 25% respecto de la cotización pactada en los contratos. Además, si consideramos la inflación posible estimada en un piso del 25% a fin de año, tendremos las pautas completas de incrementos y ganancias de las empresas concesionarias.

I- Ganancias de las Transportadoras de Gas

Los datos incluidos en las tablas que siguen, fueron provistos por el Jefe de Gabinete de Ministros en su Informe 110 del 23 de mayo, dirigido a la Honorable Cámara de Diputados de la Nación.

En esta gráfica vemos que Transportadora de Gas del Sur -TGS-(empresa de Marcelo Mindlin) tuvo una ganancia en el año 2016 de $ 931 millones de pesos y en el año 2017 esa ganancia ascendió a $ 2.793 millones de pesos. Y Transportadora de Gas del Norte -TGN- (empresa de Techint) tuvo una ganancia en el año 2016 de $ 259 millones de pesos mientras que en el año 2017 esas ganancias sumaron $ 842millones de pesos. Sumaron en el 2016 $ 1.190millones de pesos y en el 2017 $ 3.635 millones de pesos.

II-Ganancias de las Distribuidoras de Gas

A continuación realizamos el mismo análisis, expresado para las Transportadoras de gas, pero ahora sobre las ganancias de las Distribuidoras de Gas y nos encontramos con la siguiente tabla:

Fuente: Elaboración OETEC-ID en base a datos del Informe 110 del 23 de mayo de 2018, Jefe de Gabinete de Ministros.

En esta última tabla se vuelcan la suma total de las ganancias, libres de impuestos, que percibieron las Transportadoras y Distribuidoras de gas en nuestro país sólo en el año 2017 y su ganancia promedio mensual:

Fuente: Elaboración OETEC-ID en base a datos del Informe 110 del 23 de mayo de 2018, Jefe de Gabinete de Ministros.

La tabla precedente ilustra las ganancias totales del grupo de empresas, y que en 2017 alcanzó los 8.600 millones de pesos. Prorrateado por mes, 717 millones de pesos de ganancia, descontados todos los impuestos. Los dueños de las mismas: Marcelo Mindlin, Nicolás Caputo, Paolo Rocca, Alejandro Macfarlane y Jorge Brito, entre otros.

En realidad al promedio prorrateado de $ 717 millones de pesos por mes debemos sumarle el 30% de aumento aplicados a partir del mes de abril del 2018 con lo que se obtienen $ 932 millones por mes de ganancia (717 + 30%).

Aclaremos que muchas de ellas se encargaron inteligentemente de distribuirlas rápidamente en dividendos y no aplicarlas a inversión en ampliaciones de infraestructura para incorporar más servicios para los argentinos.

III-Ganancias por Extracción de Gas en Boca de Pozo

En relación a las ganancias de las petroleras, el Ministro Jefe de Gabinete, Marcos Peña no informó nada, pero podemos asegurar también que durante estos dos años (2016 y 2017) hemos estado pagando el precio del gas en boca de pozo más caro del mundo a cambio de nulas inversiones y caída de la producción (2016 -sin Vega Pléyade- y 2017).

Todo ello partiendo de la base que en las Audiencias Públicas realizadas para determinar los aumentos de tarifas, el gobierno, no tuvo en cuenta la posición de todos los organismos y representantes empresarios que participaron de las mismas, manifestándose en contra del aumento impulsado desde el ministerio de Energía y Minería de la Nación y tampoco se exigió que las concesionarias presentaran sus estructura de costos por la extracción del gas en boca de pozo para determinar una renta razonable como lo exigía el fallo de la Corte Suprema de Justicia en agosto del 2016.

En base a lo antes expresado concluimos que el Ministerio de Energía como institución responsable de diseñar y ejecutar políticas públicas en beneficio de la ciudadanía, no está cumpliendo con tan importante responsabilidad ya que los tarifazos implementados desde allí han sido el vehículo para la colosal transferencia de recursos desde los usuarios a las empresas por U$S16.500 millones de dólares en dos años -2016/2017-, la mitad de los cuales fue aportado por las familias argentinas (usuarios y consumidores)según datos del Economista Jefe de FIEL (Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericana), Fernando Navajas, tal y como lo expresamos y graficamos en nota de opinión anterior.

Esta idea podría ser tomada como base o borrador de debate y discusión sobre un nuevo plan energético nacional partiendo de la base de que la energía, en toda su constitución, es un bien estratégico y no un bien de cambio mercantilizado.

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