Por Carlos Tortora.-

Cristina Kirchner optó por no incluir el problema electoral en su discurso de ayer. Esta postergación aumenta la dependencia que de ella tienen los distintos precandidatos a presidentes. Siguiendo una receta que viene aplicando desde que fue electa presidenta por primera vez, la vicepresidenta deja las definiciones importantes para el último momento. ¿Cuándo es éste? El próximo 23 de junio, cuando se cumpla el plazo para el cierre de la inscripción de listas. Mientras tanto, el Frente de Todos sigue sufriendo intensamente el deterioro que le causa la situación económica. Una encuesta de Opinaia dada a conocer el martes pasado indica que en los 30 días previos el FdT perdió 3 puntos de intención de voto. El deterioro electoral del oficialismo se acelera en medio de un mar de rumores y de la guerra de acción psicológica entre los presidenciables. Luego de que Eduardo Wado de Pedro quedara encumbrado por la reciente mención de CFK acerca de que es la hora de los hijos de la generación diezmada, inmediatamente comenzó a circular la especie de que el Ministro del interior podría ser candidato a gobernador de Buenos Aires. Fuentes kirchneristas le adjudican a Sergio Massa esta operación de escaso vuelo, ya que Axel Kicillof se resiste a capa y espada a ser candidato a presidente. La tesis que por otra parte sostienen en La Cámpora es que el FdT puede que haga una floja primaria pero que, si Massa baja un par de puntos la inflación, podría estar en condiciones de repuntar para el 22 de octubre y de llegar entonces al ballotage. Pero mucho antes de ello hay otras instancias.

Por ejemplo, Massa lucha por ser el candidato pero una semana antes del cierre de listas se dará a conocer la inflación de mayo, que rondaría los 10 puntos.

Así las cosas, la confusión está dominando el panorama oficialista. A una semana de que Cristina hablara de los hijos de la generación diezmada, De Pedro no estaría repuntando en las mediciones y muchos consultores creen que difícilmente la jefa pueda trasladarle sus votos a. De no modificarse la situación tal cual hoy está planteada, lo más probable es que en la próxima quincena el desconcierto llegue a su punto máximo en el kirchnerismo.

Algunos efectos

La foto de ayer sirve si para despejar algunas incógnitas. Por ejemplo, que Alberto Fernández se muestra solo y desamparado en medio de la interna K y que Massa consigue mantenerse al timón pese al considerable deterioro que sufriera en las últimas semanas. La idea de que habría una PASO con más de un candidato a presidente se va extinguiendo a medida que Cristina prolonga el suspenso sobre su candidato. Cuanto más tarde se sepa el nombre de éste, menos posibilidad hay de que tenga rivales.

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