Por Guillermo Cherashny.-

El domingo se produjo una sorpresa en la provincia de Neuquén, donde ganó Rolando Figueroa, diputado nacional actual del Movimiento Popular Neuquino, al cual derrotó en el día apoyado por su línea interna, más el PRO, sectores peronistas y otros provinciales. El matutino Clarín tituló que un candidato de Macri ganó la elección pero al mediodía el portal de internet del mismo diario señaló que el expresidente le había quitado el apoyo porque Figueroa, como diputado nacional, le daba quórum y apoyó al gobierno nacional. Sin embargo, tuvo el respaldo total de Horacio Rodríguez Larreta, el jefe de gobierno de CABA y cuando Patricia Bullrich se subió al triunfo del vencedor, una diputada provincial del PRO neuquino dijo que los referentes de Bullrich fueron funcionales al oficialismo.

Asimismo, apareció Carrió, acusando a Macri de romper Juntos para asociarse con Milei, lo que armó un lío bárbaro en la coalición opositora que, desde que Larreta anunció las elecciones concurrentes, el armado que viene encabezando los sondeos parece que fuera a romperse; pero es prácticamente imposible que ocurra, porque descuentan su triunfo en octubre; pero está claro que las divisiones en ese espacio político son cada vez más frecuentes.

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