Por Sebastián Sierra.-

Luego del resultado inesperado de las elecciones presidenciales del domingo, muchas son las especulaciones de lo que pasará con el partido de Sergio Massa de cara al ballotage. Negociaciones con el PRO, que tanto Macri como Massa confirmaron públicamente, soslayan la desesperación del ex candidato presidencial por subsistir en la política.

Al parecer, el ex intendente de Tigre sabe que tanto Daniel Scioli como Mauricio Macri están desesperados por su apoyo público, ya que esto los dejaría mejor parados el 22 de noviembre. Esto llevó a Massa a buscar un consenso dentro del Frente Renovador para bajar una línea clara y concisa de cara el ballotage.

Pero, ¿es posible que Sergio Massa logre esto luego de la falta de legitimidad que ha tenido con sus propios dirigentes, de los cuales muchos se han «fugado» al sciolismo? ¿Es el Frente Renovador un partido tan sólido como lo son el FPV y el PRO a la hora de manifestarse públicamente en cuanto a un tema o decisión de sus propios líderes de espacio?

En las últimas horas varios dirigentes massistas se proclamaron de cara a la segunda vuelta, y en algunos casos dejaron en evidencia la falta de liderazgo que tiene Sergio Massa. El ex candidato a gobernador por el FR Adrián Fuertes, anunció que votará a Daniel Scioli en el ballotage. Como si fuera poco, el presidente del bloque del partido y marido de la «fugada» Mónica López, Alberto Roberti, anunció en Twitter su apoyo por el candidato del modelo, entre tantos.

Ahora la incógnita gira en torno a los dirigentes que no se expresaron todavía, como el intendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino, que abandonará su cargo el 10 de diciembre tras perder la elección. Es muy probable que Cariglino apoye a Macri, ya que es de conocimiento público su buena relación con el Jefe de Gobierno y con su partido.

Cabe destacar que el Frente Renovador es un partido con cepa peronista; es por eso que no parecería complicado que se inclinen hacia Scioli, pero tampoco sería imposible que se inclinen hacia Macri, ya que es clara la heterogeneidad que posee el partido y las distintas matices que pueden surgir a contrarreloj en la política argentina.

Facundo Moyano es otro personaje que antes de las elecciones generales se anticipó y expresó que Mauricio Macri era su límite y jamás lo votaría, aunque esto no lo alejó de las filas massistas. Quien sí se alejó y le provocó «un dolor en el alma» a Massa fue Gabriel Katopodis, intendente reelecto de San Martín, que mientras las aguas eran turbulentas decidió jugar seguro volviendo al FPV.

El reelecto intendente de San Miguel, Joaquín De la Torre, ponderó en un programa radial el corte de boleta en la provincia felicitando Vidal por la elección pero reafirmando el triunfo de la fórmula Scioli-Zannini en la provincia. Luego dijo que no quería ajuste, frase usada por el kirchnerismo en alusión a Macri. ¿Será otro apoyo hacia Scioli dentro del massismo?

Otro de los pesos importantes en el massismo es Adrián Pérez -reconocido ex lilito que la acompañó en la fórmula presidencial en el 2011- quien ayer anunció que votará a Mauricio Macri luego de que Lilita Carrió «llorara» y le pidiera que se sume a Cambiemos en el programa de Alejandro Fantino.

Como si no alcanzara con fragmentar la sociedad, el ballotage también habría quebrado al massismo, que tiene posiciones encontradas, y no habría indicios de un posible consenso entre todos los dirigentes y Sergio Massa. ¿Será éste el capítulo final en la historia de la política para el Frente Renovador?

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