Por Guillermo Cherashny.-
La noticia del mediodía del miércoles fue la reunión entre Cristina y Massa y el posterior almuerzo entre el presidente y el titular de la Cámara de Diputados y de inmediato se especuló sobre una mediación para acercar posiciones entre Alberto y Cristina, pero nada más alejado de la realidad, ya que el presidente no quiere hablar con ella y lo mismo desde la vicepresidenta.
Alberto está muy influido por los delirios de Guzmán sobre un crecimiento del 7% para este año, lo cual es imposible por la falta de dólares para importar para darle impulso a la industria. Es más, los analistas económicos coinciden en que en junio la economía se va a ralentizar por la restricción externa. Además, el ministro de economía le dijo al presidente que en su reciente viaje a Washington los delegados europeos hacían cola para pedirle reuniones bilaterales sobre el gas y le propuso la creación de una planta de gas licuado y que en 2027 el país podría exportar gas a Europa.
Está claro que en la Casa Rosada están tan alejados de la realidad que creen en la sarasa de guzmán sobre grandes proyectos a futuro cuando la inflación está desbocada y daría 6,3% el índice de precios de abril. Es tal la desubicación en la Rosada que dicen que no pueden comunicar “la cosas muy buenas que pasan con la economía”, es decir, el crecimiento del 7% anual para el 2022, y no tiene idea cómo hacer bajar la inflación, la principal preocupación de los argentinos.
En conclusión, Massa no quiere mediar, porque el presidente no escucha y por tanto se limita a acordar la agenda parlamentaria.
05/05/2022 a las 3:43 PM
Uno sordo porque no escucha, la otra habla y habla creyéndose una enciclopedia, pero con patas. Ambos son mitómanos por antonomasia. Aquél se autocalificó de profesor de Derecho Penal, cuando apenas hizo algún reemplazo de ayudante de cátedra y lo primero que hizo fue liberar 4500 presos. La otra se definió como abogada exitosa para intentar justificar los bienes malhabidos heredados y obtenidos durante sus dos mandatos. ¡Ambos son incompetentes! y el panqueque Massa lo sabe y no se la juega por ninguno porque sabe que le va a costar la cabeza, aunque todos sabemos que es otro mentiroso.
Y no hablemos de algunos ministros, como Guzmán, por ej. cuyas “sarasas” ya contaminaron los textos más ilustrados de economía.
06/05/2022 a las 7:15 PM
Que trío, madre mía!. Puede la política soportar esta gente?. Sí porque los otros, en su momento, no sacaron de circulación con mejores conductas a los del trío (Politicamente, obvio, y por las dudas). En este momento la sra. está dando “una clase magistral” en una Universidad (cuyo rector lo está buscando la Justicia, según últimas noticias) y leyendo el diccionario, cuando el país poco menos que se incendia. Hay que recordarle que es la Vice-Presidenta y electora de su propio Presidente y tratando de sacar de circulación su responsabilidad que le cabe como parte del poder máximo del Estado. Los dardos subliminales ya no le sirven. Fue, es y será la única responsable de semejante elección para el cargo, que, mal que nos pese, es nuestro Presidente. Ya no caben argumentos, sra. En cada una de las acciones la comunidad la mira y sabe que no hay caminos que la aparten de la responsabilidad (la suya) ; máxime que muchas de las medidas que se toman tienen el sello de su habitual retórica. Esta sra. se está sorprendiendo de lo que ellos mismos han contribuído a fomentar. Así las cosas, las argumentaciones que está sosteniendo en su “magistral” charla quedan destruídas al segundo por los hechos; por una realidad que está llevando a la ruina a un país del que ya lleva gobernando, como presidente y vice, una cantidad de años, que muchos prefieren olvidar. Resulta que ahora, cuando una sombra parece ceñirse sobre su figura, como co-responsable del ejercicio del poder nacional, insinúa querer olvidar su pertenencia partidaria del Frente de Todos, para reflotar o reinaugurar Unidad Ciudadana, bajo cuyo rótulo está hoy dando su clase “magistral”. Oh, sorpresa!!. Qué pasó?. Olvido, desprendimiento, alejamiento?.Lo cierto es que no se entiende demasiado. Terminado el “eterno” discurso de un palabrerío, seguro para muchos, inentendible, quiso dejar la sensación que en el gobierno todo está mejor que nunca, jamás una pelea, jamás un entredicho, jamás una división, jamás una traición, jamás una deslealtad, jamás una “bomba” contra algún ministro o al propio Presidente, jamás nada que no sea Amor y Paz!. Todo lo que se habla es de los medios “hegemónicos”, del periodismo, de la gente mal pensada, de los que quieren que no triunfen,etc,etc, nunca una culpa propia. En fin; guarden los discursos. Pónganse las pilas. Gobiernen como Dios manda y si de paso les queda bien………piensen en los que confiaron en el Frente de Todos (original), en los que no confiaron, pero tenían esperanzas y en definitiva en Uds. mismos, sobre los que la Historia está esperando para juzgarlos definitivamente. Y si no es ésta el de arriba está siempre dispuesto a poner las cosas en su lugar, mal que nos pese a cada uno de los argentinos,por acción u omisión.