Por Hernán Martínez.-

Finalmente la familia no presidencial mostró su esencia poco democrática de intimar a un comunicador social por una información que no tiene por qué dejar de ser conocida o pública. Nos gustaría saber sobre ese contrato, la facturación emitida por el joven, y los impuestos pagados en nuestro país, amén de un CV que seguramente será admirable, si habla fluido inglés, o qué carrera universitaria estudia y dónde, ya que, como investigaron a todo el mundo y tienen todos los datos, ¿por qué no saberlo nosotros, los ciudadanos comunes, que pagamos impuestos para que ellos hagan propaganda y quién sabe qué más? ¿Por qué no dejar al periodismo su libre expresión? Nos gustaría saber cómo se compraron todos los souvenirs de campaña, como la pava de la pava, los carteles, los afiches, y cuáles fueron sus fuentes de real financiamiento. Ojalá se abra una investigación para saber de dónde sacaron tanto dinero. Bueno también sería saber cómo se pagaron los pasajes a Qatar, ver el sellado del contrato, el alojamiento y demás gastos de estadía. La muestra más antidemocrática puesta en escena con tan malos actores que seguramente llevan en sí el sello de su antepasado. Deben aprender a hacerse cargo de sus errores y de sus horrores antidemocráticos y dejar de generar venganza. ¿Será porque perdieron pese a todo? ¿Será porque no toleran dejar de ser privilegiados? Sí, ¡perdieron!, en la Nación y en el Tigre. ¡Dios nos libre y nos guarde si hubiesen sido electos! Como diría un periodista (no lo nombro a ver si lo intiman desde Angola, o desde la Siberia rusa) son tan antidemocráticos que quienes no piensan como ellos son perseguidos y declarados enemigos. ¡Un ejemplo de civilidad! Sería bueno investigar AySA desde el 2019 en adelante y ver el análisis de precios por la compra de los móviles, los ploteos de los mismos, la compuerta y toda compra realizada. ¡Ah!, también el campito que dicen que compraron a través de un testaferro, ¿será cierto? La Justicia debería averiguarlo. No, no se vayan a EEUU, quédense a vivir el pos desastre que dejaron y a rendir cuentas sin fueros que queremos saber también si son candidatos a la condena de la Justicia, porque la condena social ya la tienen.

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