Por Hugo Tellechea.-

Sr. Director:

En estos días es noticia el posible pedido de desafuero del diputado Julio De Vido por una de las más de 100 causas de corrupción que tiene en curso. Primero, entra en tela de juicio si el juez Rodríguez pedirá dicha medida ante la Cámara, en línea con la solicitud del fiscal Stornelli. Lo cual no es ninguna certeza ya que, como todos sabemos, si hay algo que no ha hecho la justicia desde el advenimiento de la democracia es combatir la corrupción. Por encubrirla, por complicidad o prohijarla ha logrado el fenómeno de su multiplicación gobierno a gobierno, con el consiguiente deterioro institucional a ojos vista. Más aún si, como en este caso, está la excusa de la supuesta inmunidad que otorgan los fueros para delinquir. La figura del delincuente Menem disfrazado de senador y decidiendo con su voto los destinos del país, es elocuente. Sin embargo, un dato más que se suma a la corrupción del poder judicial es la incompetencia y falta de idoneidad. La ley de fueros 25.320 es marcadamente inconstitucional, desde que autoriza a los legisladores a delinquir con impunidad, toda vez que no existan en la Cámara los dos tercios necesarios para quitarle la inmunidad. A pesar de estar hace 17 años en vigencia el Poder Judicial no ha dicho ni pío al respecto. ¿Será porque se acomoda a su inoperancia?”

Lo saludo atentamente.

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