Por Mario Cadenas Madariaga.-

Los temas centrales de la nueva política.

Teniendo en cuenta la concepción pragmática de la política que sustenta Mauricio Macri, las tres áreas fundamentales de su gobierno estarán representadas por el Ministerio de Hacienda y Finanzas, el de Seguridad interior y el Ministerio de Relaciones Exteriores.

Bajo la responsabilidad del primero estará determinar la tasa de crecimiento que se establezca como meta, la política monetaria o anti inflacionaria, la política presupuestaria, la eliminación de los impuestos distorsivos, la reforma del sistema de coparticipación, los subsidios económicos y sociales, la política crediticia, la deuda pública, la inversión publica y la reducción de la participación del Estado en la economía.

En un momento en que la situación de la economía es crítica en todas esas áreas, su solución es la llave maestra para resolver los demás problemas, sin perjuicio de que a través de la vigilancia de la eficiencia del gasto público, puede ejercer una influencia determinante en áreas como educación, seguridad, defensa nacional o desarrollo tecnológico, aparentemente muy alejadas de su función.

Existe otra razón para destacar la importancia de la cartera de Hacienda y es que en ella la política a seguir no está definida, salvo como una tendencia muy general. Por el contrario en el orden internacional Mauricio Macri definió con claridad la nueva dirección en el MERCOSUR, con la aplicación de la cláusula democrática para Venezuela, y la apertura de esta alianza a negociaciones con Europa y el Pacífico, además de recuperar una excelente relación con los EEUU, sumado a la derogación del Pacto con Irán.

Asimismo, en el orden de la Seguridad Interior, hay una política clara compartida con el Frente Renovador, de luchar contra la criminalidad creciente, el narcotráfico y la corrupción, que se ejecutará sin oposición.

La política de Defensa Nacional es otra de las áreas críticas, pero al respecto pensamos que se comenzará por la despolitización de las FFAA, con el acuerdo de todo el arco político no kirchneristas, como un perfeccionamiento institucional básico. Y el equipamiento de las FFAA será una tarea progresiva que se demorará. Por su parte los juicios de lesa humanidad los resolverá la Corte Penal Internacional.

Así se destaca la importancia del Ministerio de Hacienda y Finanzas.

Según ha trascendido y lo confirma la modificación del nombre de la cartera de referencia, la nueva ley de ministerios evitará la relevancia que en los últimos años tuvo el Ministerio de Economía. Pero por un problema de competencias, las materias propias de la Hacienda le darán una relevancia natural sobre las demás. Y es bueno que así sea por una razón de orden y porque además la capacitación y responsabilidades de los otros ministerios del gabinete económico, no los habilitan para opinar sobre la economía general, agregado a la falta de especialización de sus titulares.

La importancia de la macroeconomía, en este momento que su situación es tan crítica, va a predominar sobre las economías sectoriales, regionales o más reducidas. La experiencia del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, servirá de muy poco, porque en esta jurisdicción nunca hubo problemas económicos, por la amplitud los recursos de la economía local.

Además el conjunto de los ex directivos empresarios que forman parte del gobierno electo, deben saber que cualquiera sea su capacidad de dirección, nunca podrán suplir errores en la política macro económica. Por lo que este grupo no se opondrá al predominio del Ministerio de Hacienda.

¿Existe un plan económico ya elaborado?

Todo hace presumir que no. En primer término porque el responsable de la cartera ha sido recientemente designado. En segundo término porque Mauricio Macri ha dicho que es necesario esperar a que se cuenten con las cifras exactas, provenientes de fuente oficial y CFK le ha cerrado el acceso a esas fuentes.

Pero a partir de hoy Alfonso Prat Gay tiene 12 días para preparar ese plan. Es suficiente porque un economista dedicado al estudio de la macroeconomía de su país, debe estar en condiciones de hacerlo en ese tiempo, aún con la insuficiencia actual de las cifras oficiales, sujeto a los ajustes necesarios posteriores. Esto será infinitamente mejor a que el 10 de Diciembre no se proporcionen las informaciones sobre las líneas esenciales del nuevo gobierno. Se puede decir que será una condición de seguridad, normalidad y paz en el inicio del gobierno.

Los siete principios básicos de un nuevo plan económico.

El 10 de diciembre se deberían anunciar en el orden económico las siete decisiones que despejarían los principales problemas de la economía argentina.

1) La estabilidad monetaria, con la decisión de ajustar la emisión a la evolución del PBI.

2) El equilibrio presupuestario con la reducción de las subvenciones económicas, la reducción de las compras de bienes y servicios por efecto de la estabilidad y el pronto pago, el incremento del ingreso fiscal por efecto del crecimiento; la disminución del costo de la deuda pública por intereses. La eliminación de las retenciones y del impuesto al cheque, este último en forma gradual deben contemplarse.

3) Negociación de la deuda en default. En estos12 días se deberían hacer los progresos necesarios.

4) Liberación cambiaria y de las exportaciones. La fijación del valor del dólar será fijado por el mercado, el cual si está negociada la deuda externa será muy razonable.

5) Liberación del crédito interno. Se suprimen las llamadas neutralización por aumento de liquidez, que realiza el Banco Central. Esto permitirá el financiamiento de todas las actividades.

6) Aumento de la inversión pública. Se deberá lograr con ahorros del presupuesto, y/o financiación externa.

7) Aumento compensatorio de salarios y jubilaciones por efecto de las medidas anteriores. Se pagarán con parte del aumento de la productividad producido por las mismas medidas. Las paritarias se deben postergar para abril del 2016, cuando la economía se haya estabilizado.

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