Por Manuel Carpintero (Carta Financiera).-

La agencia de riesgos Standard & Poor’s elevó ayer la calificación crediticia de Argentina desde “B-“ a “B”, asignándole al país un panorama estable, sustentado en algunas variables macroeconómicas y las políticas aplicadas por el gobierno actual.

S&P situó su previsión de inflación para Argentina en 20% para 2017 y un crecimiento del PBI del 3% anual para los próximos 3 años. Sin embargo, también aclaró que el escenario político aún está polarizado, lo cual podría afectar la capacidad del Gobierno para concretar su agenda económica.

«La acción de calificación refleja los avances logrados en la política económica en general para resolver importantes desequilibrios económicos y restaurar la credibilidad de las políticas del país», afirmó la calificadora.

Los factores positivos que destacó S&P fueron los siguientes:

Mejoría en la liquidez externa.

Acceso al financiamiento.

Ajuste en las tarifas de servicios públicos.

Medidas para contener la inflación.

Finalmente, la calificadora mencionó que el factor que más incidirá en la expansión de la actividad será la reactivación de la obra pública.

Por otra parte, hoy se dieron a conocer los resultados del Relevamiento de Expectativas de Mercados (REM) que elabora mensualmente el BCRA: En contraposición a las perspectivas expuestas por Standard & Poor’s, el REM registró una baja en las expectativas de crecimiento para 2017 a 2.8%, respecto del 3% que había mostrado en febrero. Por su parte, los números correspondientes a 2018 y 2019 se mantuvieron sin cambios en 3.2% y 3.5% respectivamente.

Respecto de la inflación, el REM mostró un incremento en las expectativas para 2017, de 20.8% a 21.2%. Para 2018, también se han incrementado las expectativas de inflación hasta 15%, y para 2019 hasta 10.3%.

Más allá de las previsiones, la realidad es que Argentina ha avanzado un escalón en su calificación crediticia acercándose al promedio de la región, alcanzando igual rating que países como Ecuador. Sin embargo, aún tiene peor nota que Brasil, Bolivia y Paraguay (Con calificación BB) o Colombia, Chile, Perú o Uruguay (Que ya son catalogados con notas BBB o superior, considerados como “Inversiones Estables”).

Esta noticia ha tenido un impacto positivo en el corto plazo en bonos locales, que en parte se venía descontando hace algunos días, también empujados por el ajuste en la tasa de 10 años. Casos como el Discount 2033 (DICA) ha reducido en 30 puntos básicos su tasa de retorno en algo más de una semana, lo cual representa una ganancia de capital de 2.3% en dólares en 6 jornadas.

Por último, cabe mostrar cómo han rendido los bonos argentinos en relación a los brasileños la última vez que el país gozó de calificación “B” bajo la escala de S&P: Fue en Septiembre 2010, cuando el spread entre ambos países era algo mayor al actual (670 puntos básicos), frente a los actuales 450 puntos básicos.

Share