Por Guillermo Cherashny.-

Martín Lousteau, el embajador argentino en Washington, ya decidió venir a competir el año que viene en las legislativas de la Capital Federal con su alianza ECO y se enfrentaría al PRO de Horacio Rodríguez Larreta, aunque es una incógnita si Elisa Carrió propondrá a su ladero Fernando Sánchez, que fue su candidato a jefe de gobierno. Pero es difícil que la diputada decida enfrentar al gobierno.

No se sabe a quién propondrá la canciller Susana Malcorra, que se mantiene firme en su cargo por el apoyo incondicional que le da el presidente, aunque fue muy criticada por el tweet donde lamentó que Hillary Clinton perdiera la elección. Pero ese apoyo era la política del gobierno, que había logrado una agenda común con Barack Obama en cuanto al deshielo con Cuba y la aprobación de la paz del gobierno colombiano con las FARC y, además, la cooperación en materia de terrorismo, seguridad y narcotráfico, de ahí el apoyo a la continuidad expresada por Hillary Clinton. Pero ahora hay que replantear el acercamiento a Donald Trump y la nominación del futuro embajador en los Estados Unidos puede ser la oportunidad para hacerlo. Entre los candidatos se menciona a un político, como es Ramón Puerta, el embajador argentino en Madrid, que es íntimo amigo del presidente y dijo a quien quisiera escucharlo que ganaba Trump. Si se opta por un diplomático de carrera surge el nombre de Luis Kreckler, actual embajador en Alemania, quien ya fue cónsul de Los Angeles en el gobierno de Carlos Menem y que tiene un cercano contacto con el lobby cubano exiliado en Miami, la Florida, y encaja perfectamente con un acercamiento al partido republicano.

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