Por Guillermo Cherashny.-

Después que trascendiera la respuesta negativa de la fiscal Viviana Fein al pedido de las querellas de que la causa por la muerte del fiscal Nisman pase a la Justicia Federal por tratarse de un magnicidio, la causa la tomó la jueza Viviana Palmaghini, quedando la fiscal Fein en el trámite pero ahora dirigida por la magistrada, quien varias veces se negó a los requerimientos de las querellas porque, según fuentes tribunalicias, por las consultas que Palmaghini hacía a su superior el camarista de la Sala VI, Mario Filosof quien integraba la sala que confirmaba todo lo hecho por Fein avalada por la jueza citada.

Está claro que el cambio de gobierno y su decisión de desistir el recurso de apelación de la declaración de inconstitucionalidad del memorándum con Irán por el ministro Germán Garavano impactó en Filosof y su ex secretaria letrada, ahora jueza, Viviana Palmaghini. Cabe recordar que medios de comunicación oficialistas mostraron un video donde el camarista Filosof estaba bebiendo en un sauna con mujeres desprovistas de ropa, para condicionarlo en el futuro, y ese disciplinamiento de Mario Filosof sirvió parta avalar el accionar de Fein y su tesis del suicidio ordenada por su superior Alejandra Gils Carbó y el Secretario de Seguridad Sergio Berni. Pero ahora que Garavano mostró una firme actitud ante el memorándum con Irán y la elevación a Secretaría de Estado de la unidad AMIA, ocupada por el ex senador radical Mario Cimadevilla, se demuestra que el Gobierno está decidido a una investigación en serio de la muerte violenta de Alberto Nisman. Esto hizo cambiar de parecer a Filosof y Palmaghini, quien ordenó once medidas, entre ellas citar a indagatoria a Jaime Stiuso, averiguar si Lagomarsino pertenece a algún servicio de inteligencia, pedirle copias al juez federal Daniel Rafecas de la denuncia archivada del fiscal Nisman sobre el presunto encubrimiento de la ex presidente y, al mismo tiempo, requerir del juez federal Rodríguez sobre amenazas anteriores al fiscal Nisman y a sus hijas, que se tramitan ante ese juzgado, y otras medidas demuestran que la jueza, después de casi un año perdido, decidió meterle a fondo con la investigación de esa muerte que los abogados de Arroyo Salgado calificaron como un magnicidio negado por la fiscal Viviana Fein.

Esta decisión significa que la investigación, a casi un año de la muerte del fiscal federal, toma un nuevo impulso y también puede tener consecuencias sobre la archivada denuncia de encubrimiento que promovió en su momento el fiscal Alberto Nisman.

Share