Por José M. García Rozado.-

Hernán Hirsch, director ejecutivo de FyE Consult, advirtió: «Llamarán a una audiencia pública en octubre para avanzar en el proceso de normalización de la adecuación tarifaria del servicio de gas, producto de la necesidad de encontrar una solución (si o si) a este problema (y antes de 2017). La necesidad de una normalización de las tarifas de los servicios públicos, es crucial para el Gobierno. Es la medida que le permite financiar la reducción de las retenciones a las exportaciones, la suba del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias y el Plan de Reparación Histórica para los Jubilados.» Para completar el problema macroeconómico, la inflación de junio habría sido mayor a 3%, superior a la del mercado (2.5%), pero inferior a la de mayo (5%). Entonces, «Si la inflación esperada para el último trimestre del año se elevara por encima de 1.5% mensual, el mercado estaría descontando el incumpliendo de la primera meta de inflación del Programa monetario del BCRA.» El ministro de Hacienda y Finanzas reconoció que el objetivo previsto del 25% para 2016 recién podría concretarse en el año móvil que se inició en marzo. Trató de restarle dramatismo al cambio de previsiones al pedir «mirar la película» en caso de que las metas no se cumplan dentro de los períodos anunciados.

El ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, insinuó este martes que no se cumplirá la meta prevista de 25% de inflación en el lapso diciembre 2015-diciembre 2016, pero que ese objetivo podría alcanzarse en el año móvil a partir de marzo de este año. Además, trató de restarle dramatismo al cambio de previsiones al pedir «mirar la película» en caso de que las metas no se cumplan dentro de los períodos anunciados. «Lo que hay que ver no es un año sino 4 años. Hay que ver 16 trimestres. Faltan casi 6 meses para que termine el segundo semestre», argumentó a la hora de pedir comprensión. El ministro también se refirió al tarifazo en el gas. «Cuando anunciamos la meta del déficit del 4,8% del PBI, no preveíamos aumentos de tarifa de gas superiores al 400%», dijo Prat Gay. Sin embargo, dijo que esa imprevisión no modifica la meta fiscal para este año. De acuerdo a un relevamiento de FocusEconomics entre consultoras y bancos, el promedio de la suba de precios para este año está estimado en un 38,4%, 2,8 puntos superior al último relevamiento, de junio. «Sostenemos el 25% en el marco de la inflación que va a ir decreciendo. Quizás no lo logremos entre diciembre (de 2015) y diciembre (de 2016), pero lo alcanzaremos entre marzo del año que viene y marzo de este año», señaló el ministro en una conferencia de prensa en Casa de Gobierno.

Al respecto, Prat-Gay recomendó que «si llegamos tarde en algún trimestre, miremos la película», en referencia a que las metas, aseguró, son «dinámicas, no se agotan en un año». «Nuestra estrategia fue la de ir reduciendo el déficit y la inflación de manera gradual. Llevar la inflación del 30% que recibimos al 5% en 2019″, apuntó. «Creemos que la inflación ya está bajando, lo van a ver cuándo se publiquen los números en los próximos días. Todo indica que ya en junio ha habido una caída importante de la inflación. Todos los analistas ven que hacía septiembre la inflación va a estar en orden del 2% mensual», continuó el funcionario. «Hacia fin de año entre el 1,5% y el 2%. Para este año dijimos 25%, y lo sostenemos en el marco de la inflación que va a ir decreciendo», añadió Prat Gay. «Lo que hay que ver no es un año sino 4 años. Hay que ver 16 trimestres. Faltan casi 6 meses para que termine el segundo semestre», argumentó. El ministro de Hacienda afirmó confiar «en tres fuentes de crecimiento para este segundo semestre como son la obra pública, la baja de la inflación y los estímulos al campo». El jefe del Palacio de Hacienda destacó que «el esfuerzo de la obra pública, la baja de la inflación que va a liberar recursos para mejorar el poder adquisitivo de la gente, y las medidas que benefician a sectores como el campo y la agroindustria».

La conferencia de prensa se produjo con motivo de la aprobación por parte del Banco Mundial de 3 préstamos por US$845 millones. Junto a Prat-Gay estuvo Sri Mulyani Indrawati, directora Gerente del organismo. Los acuerdos incluyen: a. US$ 600 millones para el Proyecto Red Integral de Protección de Niños y Jóvenes, cuyo objetivo es mejorar las condiciones de vida de niños en situación de vulnerabilidad. Este programa prevé ampliar la cobertura de la Asignación por Hijo a aproximadamente 1,4 millones de niños de todo el territorio nacional. b. US$200 millones tienen como fin el manejo de riesgos de inundaciones en la cuenca del Arroyo Vega en la ciudad de Buenos Aires. Este préstamo incluye obras de infraestructura en las cuencas de los arroyos Cildañez, Maldonado y Vegas. Alfonso Prat-Gay expresó que se trata del «primer proyecto de infraestructura que aprueba el Banco Mundial en cinco años». Y c. US$45 millones para la promoción de innovación productiva en pequeñas y medianas empresas. Es el ministro del gabinete de Mauricio Macri que más odios genera hoy en día en las familias que deben afrontar abultadas facturas de luz y gas. Sin embargo, Juan José Aranguren parece tener asegurado su cargo. O al menos, no se especula en ámbitos políticos con su salida en el corto plazo. No son pocos los que piden la renuncia del ministro de Energía, responsable de la conflictiva aplicación de los aumentos tarifarios. Jorge Lanata, por ejemplo, reclamó ante su enorme audiencia radial que puede pasar un error, tal vez 2, pero ante un 3ro el Gobierno debe remover gente.

Pero entre quienes exigen el apartamiento de Aranguren no se encuentra el Presidente de la Nación. «No pensé en renunciar, ni me pidieron que lo haga», reveló el ministro este martes en diálogo con Radio Nacional. Aranguren dijo que “las renuncias no se evalúan, se producen», y en todo caso si alguien debe hacerlo, será el Presidente «quien va a evaluar si yo le sirvo en el cargo”. Por el momento, Macri no prescindiría de Aranguren, menos si es verdad lo que dicen algunos: el exShell es el «ministro favorito» del Presidente, ¿por algo será, verdad? En ese caso, Macri podría hacer suyas las palabras de Federico Pinedo, presidente provisional del Senado y espada política del gobierno de Cambiemos. «Es uno de los mejores ministros que hay (?)», dijo Pinedo, quien le reconoció a Aranguren que tiene la «tarea más dura y desagradable», que es emprolijar la maraña que el cristikirchnerismo dejó en el sector energético, a juicio del hombre del PRO, «el desequilibrio más grave que tomó la Argentina desde que asumió el nuevo Gobierno». En diálogo con Radio La Red, el senador nacional elogió al el ex-CEO de Shell al asegurar que tiene «una honestidad y un conocimiento de la materia indiscutibles», a la vez que señaló que «es un técnico y a él le piden “hacé algo para que la Argentina no colapse y se quede sin gas”». «Él tiene que ver cuáles son los distintos caminos y él da distintos caminos. Obviamente debe haber tenido algunos errores de evaluación de impacto (social) de algunos puntos específicos», subrayó Pinedo, aunque insistió en que «en su materia es excepcional y es de los mejores ministros, sin dudas».

Macri estimaría en la misma dimensión a su ministro de Energía. A pesar de las idas y vueltas, el ensayo y error; y el enorme costo político que paga el Presidente, hoy en la Casa Rosada no estaría en duda la continuidad de Aranguren al frente de la cartera que asumió el 10/12, aunque dentro del palacio del gobierno también tenga detractores. «Macri defendió la política más resistida de su gobierno en pleno bicentenario. ¿Te parece que va a cambiar de ministro en el medio de esto? Este muchacho, por ahora, no se va», asegura un radical que integra Cambiemos, según publica este martes el portal Letrap.com.ar. El discurso –muy cuestionado por lo de las “patas”- de promoción del uso eficiente de la energía se volvió una obsesión para el Presidente (él mismo lo dice). Mientras lo sostenga, se leerá también allí un respaldo a Aranguren. Pero para FyE Consult La información fiscal adelantada es consistente con nuestra visión de que el Gobierno se encuentra lanzado de cara al 2017. En efecto, los datos más recientes de ejecución presupuestaria de la Administración Nacional muestran: 1. Una fuertísima aceleración en el ritmo de ejecución del gasto público primario devengado, pasando de un ritmo del 9.6% a uno del 56% a/a interanual, entre enero-abril y mayo-julio, tal como se puede observar en el gráfico adjunto.

!cid_image003_jpg@01D1DC85

Este mayor ritmo de ejecución del gasto está obedeciendo a mayores transferencias a las provincias y al sector privado (se aceleró de 8.0% a 68.0% a/a), a la decisión de reactivar la obra pública (4.5% a 30.5% a/a), y a una paulatina normalización de las erogaciones de consumo (-9.4% a -1.1% a/a). 3. El gasto caja está acelerándose como consecuencia del mayor ritmo de ejecución del gasto devengado, que pasó de crecer del 21.4% al 33.7% a/a en el mismo período. 4. Al igual que el gasto devengado, el gasto caja se aceleró por las mayores erogaciones en transferencias a provincias y sector privado (de 23.0% a 36.1% a/a), bienes de consumo (que pasó de -15.5% a 8.3% a/a) y a obra pública (de 0.7% a 17.6% a/a). Con esta expansión del gasto público, las medidas anunciadas por el Gobierno que implicaron mayores erogaciones en lo que va del año y una recaudación tributaria que creció un 23.6% a/a en los últimos 2 meses, nuestra impresión es que: A. La dinámica de deterioro fiscal se mantendrá en el presente año, con un déficit primario que se estará elevando de 4.0% a 4.7% del PBI entre 2015 y 2016, siendo inferior a la meta fiscal original (4.8% del PBI), pero superior a la meta oficial revisada por el nuevo PBI nominal (4.5% del PBI, no formalizada). B. Dados los elevados vencimientos de deuda en pesos y la decisión de no financiarse en moneda local, la necesidad de pesos del Tesoro será muy significativa. Esta elevada necesidad de pesos llevará al Tesoro a seguir vendiendo divisas al Banco Central contra pesos, lo cual generará una expansión de la oferta monetaria que obligará al BCRA a colocar más Lebacs, que terminará provocando un déficit cuasifiscal mayor.

La persistencia de un desequilibrio fiscal continuará generando problemas de competitividad cambiaria (tipo de cambio real apreciado), que junto a la suba de las tarifas de los servicios públicos provocará efecto no deseados sobre el entramado productivo local. También las implicancias de las marchas y contramarchas en la suba de la tarifa de gas generaron: Dado que la estrategia fiscal y financiera y de crecimiento económico del Gobierno está basada en una reducción (paulatina) de los subsidios de las tarifas públicas, nuestra impresión es que las autoridades: 1. Harán todo lo necesario para que el tarifazo “no se caiga”. El tope anunciado ayer (11/07) aplicado a las facturas del 400% va en esa dirección. Esto es, de forzar algún pago de facturas del público (Ministro Garavano: “El Gobierno tomó nota de esta situación con las tarifas, que se van a corregir y quedarán para adelante los problemas legales para que se vayan ordenando”). Por ende, esta política de “parche tras parche” se mantendrá. 2. Llamarán a una audiencia pública en octubre para avanzar en el proceso de normalización de la adecuación tarifaria del servicio de gas, producto de la necesidad de encontrar una solución (sí o sí) a este problema (y antes de 2017).

La necesidad de una normalización de las tarifas de los servicios públicos, entendemos es crucial para el Gobierno. Es la medida que le permite financiar la reducción de las retenciones a las exportaciones, la suba del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias y del resto de las medidas ya anunciadas y por anunciar o implementar por la actual administración, las cuales ya tienen un costo fiscal importante. En particular, el Plan de Reparación Histórica para los Jubilados. Aún si el Gobierno lograra normalizar las tarifas de gas (lo cual hoy no queda claro), el frenazo del tarifazo de gas entendemos que revela: 1. Problemas de gestión o mala estrategia de implementación de medidas. El llamado a audiencias públicas era un paso legal casi ineludible. No preverlo conllevaba estos riesgos. 2. Ausencia de previsión fiscal. Impulsar una reducción de impuestos sin haber asegurado su financiamiento partiendo de una situación fiscal deficitaria no luce como la mejor opción (más en Argentina). Además, teniendo en cuenta el costo fiscal que tendrá el Plan de Reparación Histórica para los Jubilados. 3. Falta de coordinación en el área macroeconómica, lo cual le hace perder consistencia a la política económica del Gobierno. Esta falta de coordinación genera problemas de consistencia en la política macroeconómica, restando efectividad a las medidas anunciadas. Por ejemplo, más allá del éxito que pudiera tener el blanqueo, no luce consistente el blanqueo con un escenario de déficit fiscal y un Gobierno y una clase dirigente con escasa voluntad de recortar el gasto público.

Continuidad de la estrategia de “parche tras parche” en este tema y en otros similares, lo cual está generando un costo fiscal incremental “hormiga” no deseado, que lentamente está erosionando las cuentas fiscales. Esta medida implicará un costo fiscal de $11.800 millones (0.1% del PBI). Nota metodológica fiscal: El Gobierno realizó modificaciones en metodología de las cuentas fiscales “base caja” anual incluyendo la deuda flotante. Al respecto, el rubro “deuda flotante” siempre existe al final de un ejercicio fiscal “base caja” y lo que debieron incluir las autoridades es el incremento de la “deuda flotante” y no su nivel, por lo que su magnitud se reduce considerablemente. La meta oficial de déficit fiscal primario de 2015 de la presentación oficial de principios de año de 5.4% se reduce a 5.0% del PBI como consecuencia de la publicación de los nuevos datos de

PBI nominal. Misma suerte ocurre con nuestras estimaciones fiscales y las metas de recomposición fiscal oficiales. Los dilemas para el Banco Central por suba de precios y apreciación cambiaria: Siguiendo la lógica reciente, el Banco Central debería disponer una nueva reducción de la tasa de interés de Lebacs de 35 días, ya que: 1. El rendimiento de las Lebacs en el mercado secundario se ubicó por debajo de las de corte de la última licitación. 2. La información privada adelantada de precios minoristas continuó mostrando signos de moderación. En tanto, no se divulgaron datos oficiales adicionales. 3. Las expectativas de inflación se muestran contenidas, permitiendo una reducción adicional de la tasa de interés del BCRA. Sin embargo, tal como publicamos, trascendidos periodísticos que merecen nuestra consideración (Ismael Bermúdez, del oficialista matutino Clarín), mostrarían que los datos oficiales registrarán un aumento de las presiones inflacionarias en junio. Según datos de precios CABA: 1. La inflación habría sido mayor a 3%, superior a la del mercado (2.5%), pero inferior a la de mayo (5%). 2. La inflación núcleo, excluye precios regulados y estacionales, arrojaría aprox. 3.5%, valor que implicaría un aumento respecto de mayo (3.3%) y abril (2.8%), mostrando valores elevados y una tendencia alcista imprevista por el BCRA y el mercado.

!cid_image004_jpg@01D1DC85

Según datos de precios del INdEC: 1. La inflación de Capital y los 24 partidos del GBA sería de alrededor del 4.0%, mayor al 2.5% del mercado, pero inferior a mayo (4.2%). 2. La inflación núcleo se situaría entre 3.5/4%, nivel relativamente elevado. Este aumento de la tasa de inflación de junio respondería a las subas de medicina prepaga (15%), alimentos (lácteos, frutas y verduras, etc.), cable, expensas, vivienda, telefonía, alquileres, internet y correo. De ser ciertos éstos datos, es probable que se produzca un aumento de la tasa de inflación esperada por el mercado. Bajo este escenario, cualquier Banco Central del mundo que siguiera un esquema de metas de inflación, muy probablemente optaría por subir las tasas de interés. En este punto, al Banco Central se le plantean 2 dilemas importantes: Dilema I: definir los índices a utilizar: ** La aparición de señales claras de inflación en los índices oficiales le impondrá a las autoridades del BCRA definir si continúa basando sus decisiones de política monetaria en datos privados o bien prioriza la información oficial. ** Dada la adopción de un esquema de metas de inflación, las implicancias de política monetaria son muy diferentes dependiendo de la decisión que adopte el BCRA. Si basara sus decisiones utilizando los datos oficiales, la tasa de interés debería ser mayor a la actual.

Dilema II: inflación o dólar + actividad: ** Si el Banco Central optara por utilizar los índices oficiales, la dinámica de apreciación cambiaria (con un peso ya caro) y de incremento de la tasa de inflación, le impondrá decidir entre: 1. Priorizar el objetivo inflacionario, para lo cual debería elevar la tasa de interés a riesgo de agravar el problema cambiario. 2. Priorizar el objetivo cambiario y/o actividad económica, para lo cual debería reducir la tasa de interés a riesgo de agravar el problema inflacionario. ** Dada la decisión del BCRA de adoptar un esquema de metas de inflación y habiendo aumentado la probabilidad de una revisión alcista de las expectativas de inflación para el resto del año, nuestra impresión es que el margen que tendrá el Banco Central para mantener su política monetaria de reducción de las tasas de interés será más escaso. ** La decisión que adopte el Banco Central una vez conocidos los datos de inflación (y el cómo la explique) dará una idea de que objetivo está priorizando.

La Corte Suprema le pidió al Poder ejecutivo hoy que, en un plazo de 10 días, informe sobre las razones del aumento de la tarifa del gas, para luego resolver los planteos contra los fallos que suspendieron los incrementos en las facturas de gas. El máximo tribunal, en un fallo firmado por los jueces Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco, Juan Carlos Maqueda y Horacio Rosatti, eludió tratar inmediatamente los planteos contra el tarifazo. A la Corte sólo llegó un pedido de per saltum por una causa judicial con un fallo contrario al aumento de tarifas en Mendoza, pero que tiene injerencia sólo en esa jurisdicción del oeste del país. Los dos (2) únicos fallos que podrían ser extensivos a todo el país fueron dictados en Córdoba y La Plata y aún no han llegado a la Corte Suprema de Justicia de la Nación, por lo que este tribunal no tiene un caso concreto sobre el cual pueda decidir sobre el aumento de tarifas en todo el país. De acuerdo al fallo que publicó el Centro de Información Judicial, entre otras cuestiones, la Corte pidió al Gobierno que detalle «cómo ha sido la evolución de las tarifas de gas» y «los parámetros tenidos en cuenta para arribar a los aumentos de precios y tarifas». «Especifique fundadamente la existencia o inexistencia de la ponderación de los principios de gradualidad y progresividad para la determinación del cuadro tarifario en análisis”, reclamó el máximo tribunal. Además solicitó que se den precisiones sobre el impacto de las resoluciones que establecieron el tarifazo y los parámetros tenidos en cuenta para la tarifa social y «si la aplicación de la nueva normativa implica modificar la cantidad de beneficiarios de dicha tarifa». El fallo reclama también que se informe si se consideró establecer «bandas tarifarias o segmentaciones según los ingresos del usuario y, en su caso, de los demás miembros del grupo familiar con el que cohabita.»

Los cuadros del macrismo parecen no comprender lo impopular que está resultando su intención de imponer un tarifazo de los servicios públicos. Ya con la mayoría del abanico opositor (y algunos aliados como Sergio Massa a la cabeza) en abierta manifestación contra la medida, los dirigentes macristas siguen con su defensa a ultranza de los aumentos, con declaraciones a veces imprudentes. «Pasar de pagar 70 pesos a pagar 300 pesos no es demasiado aumento, es una salida a cenar (?)», dijo esta vez el diputado nacional Eduardo Amadeo. El diputado nacional por Cambiemos, Eduardo Amadeo se sumó a la serie de declaraciones impopulares sobre los aumentos de tarifas. Ya fueron varios los cuadros del macrismo que se han expresado de manera infortunada como mínimo, por no decir grotesca y hasta ofensiva, sobre los aumentos, incluso el presidente Mauricio Macri llamó a ahorrar energía y pidió estar «abrigados en casa» y no «en remera o en patas» En este caso, en declaraciones a AM 950 Belgrano, Amadeo expresó: «Pasar de pagar 70 pesos a pagar 300 pesos no es demasiado aumento, es una salida a cenar.» Y agregó: «Si una persona paga 700 pesos de cable puede pagar 300 pesos de luz o de gas». «Nosotros heredamos un sistema al límite, hace dos semanas el gobierno tuvo que parar el gas a las empresas y a los taxis porque no tenemos más gas para calefaccionar a la familias», aseguró.

En este sentido, afirmó: «El país no puede seguir gastando lo que gasta, no hay más dólares, los gasoductos están al límite y no tenemos más gas. Este es el resultado de la década ganada.» «Hay 3.200.000 personas que tienen tarifa social. Los muy pobres no pagan estos aumentos, pagamos los de clase media para arriba», explicó Amadeo. En tanto, criticó: «El kirchnerismo nos hizo creer que uno puede vivir en un país sin pagar la luz, el gas o el agua. Nos dejaron una economía sin información.» Y contrapuso: «Este gobierno reconoce sus errores y los modifica.» «En el mundo, la gente paga muchísimo más que nosotros. Sin ir más lejos, acá pagamos $70 y los cordobeses pagan $900 hace 5 años», indicó el diputado. A su vez, manifestó: «Los que pagamos $70 estamos jodiendo al resto del país». Se refería, por supuesto, a los usuarios de Capital Federal y AMBA. «Si hacemos el aumento gradual vamos a tener una inflación imparable todos los meses», adelantó. «Si seguimos así vamos a tener que elegir entre trabajar o calefaccionarnos. No hay una solución fácil para este tema porque los Kirchner nos dejaron en economía de guerra», concluyó. No parece muy seria esta apreciación, como que el ministro de Energía, Juan José Aranguren, se ha transformó en el depositario de todas las criticas tras los descomunales aumento de tarifas. Ayudado por su “parquedad y falta de sensibilidad a la hora de declarar”, el ex CEO de Shell fue el apuntado por la oposición y hasta por miembros del gobierno. Pero Aranguren no sería más que “el brazo ejecutor de las ideas del presidente Mauricio Macri”.

Todos nos preguntamos porque el presidente defiende tanto, con grandilocuentes palabras y gestos, a un ministro como Juan José Aranguren, que solo muestra indiferencia e insensibilidad cada vez que habla. Alguien a quien no parece importarle en lo más mínimo las necesidades de la gente. La respuesta a esta pregunta sería más sencilla de lo que parece, en el programa “La Mirada” de Roberto García, el analista Rosendo Fraga aseguró que el ministro solo hace lo que le manda a hacer Mauricio Macri. El presidente estaba convencido que había que aplicar los tarifazos sin anestesia, que eso iba hacer que la gente tome conciencia, que así iba a pagar menos costo político y como extra, terminarían repudiando a Cristina Kirchner y a todo su gobierno. Si esto es cierto, más allá que si uno repasa ciertas declaraciones, algo de verdad debe haber, se prueba su falta de olfato político y social. Viendo entonces como el presidente defiende a Aranguren, casi de forma corporativa, parece claro que el ministro solo cumple órdenes, que son de su agrado por su puesto.

¡Grave que el presidente no quiera entender lo que Francisco y hasta la titular del BM le aclaran permanentemente: “hay que mirar a los más pobres”, y dejar de hacerlo con los ricos o los CEOS que lo acompañan!

Share