Por Hernán Andrés Kruse.-

En su edición del 14 de enero, Página/12 publicó un artículo de Alfredo Zaiat titulado “Más tarifas y más cortes”. Escribió el autor: “En estos primeros días del nuevo año con elevadas temperaturas llegó a haber más de 120 mil usuarios simultáneos sin servicio de electricidad en las áreas de concesión de Edenor y Edesur. En diciembre pasado, hubo más cortes de luz en Capital y en los principales partidos del Gran Buenos Aires respecto al mismo mes de 2016. Hubo un aumento promedio de 66 por ciento de usuarios afectados, reconocido por Mauricio Bezzeccheri, country manager para la Argentina de Enel, firma dueña de Edesur, durante el programa Terapia de noticias de LN+. En esos doce meses, el gobierno definió la revisión tarifaria integral con una impresionante suba para el presupuesto de los hogares y comercios, sendero alcista que continuará en este año. Desde diciembre de 2015, la tarifa de luz subió en promedio 1400 por ciento, que en febrero trepará a 1700 por ciento y en el segundo semestre de este año habrá otro ajuste. Con más tarifas para Edenor y Edesur, que se reflejó en sus respectivos balances en un fuerte crecimiento de ingresos por la prestación del servicio, los cortes de luz no disminuyeron, sino que aumentaron” (…) “Este resultado en dos años de administración Macri está poniendo en cuestionamiento el criterio de más tarifas implicará más inversiones y, por lo tanto, habrá menos cortes de luz. Lo que sí ha cambiado es la cobertura que dedica la mayoría de los medios al calvario diario de miles de personas con el servicio eléctrico. Ahora es marginal la atención a la situación de los barrios afectados por cortes, ya sin el zócalo invasivo en la pantalla de televisión alertando acerca de la “crisis energética” y un contador en vivo de la cantidad de usuarios sin luz, mientras que el Ministerio de Energía directamente se desentendió del tema” (…) “Los comercios que pierden toda la mercadería perecedera de las heladeras por cortes prolongados, familias que no tienen agua potable, personas mayores que quedan atrapadas en departamentos de pisos altos por la imposibilidad de utilizar el ascensor, entre otras penurias que están padeciendo miles de usuarios de Edenor y Edesur. No es una situación diferente a la que prevaleció con tarifas congeladas durante los gobiernos kirchneristas. La diferencia es que en esos años las tarifas eran bajas y ahora son altas y serán todavía más altas” (…) “El Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (Oetec) elaboró un revelador informe, en base a datos provistos por el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) que son publicados por La Nación en una producción digital con actualización diaria en su portal de noticias, que precisa cuántos usuarios de Edenor y Edesur tuvieron interrupción del suministro en diciembre de 2016 y de 2017” (…) “Los investigadores de Oetec, Federico Bernal y Belén Annis, preguntan qué fue lo que sucedió en las redes de Edenor y Edesur en lo que va de la gestión Macri, para responderse que no hubo inversiones de envergadura que permitan disminuir la cantidad de afectados por la interrupción del servicio y que “se jugaron a que la menor demanda redujera sensiblemente los cortes de luz, amortiguando los efectos de las altas temperaturas previstas para esta época del año”. Esta apuesta fue fallida” (…) “El reporte de Oetec destaca que, al comparar diciembre de 2017 respecto del mismo mes de 2016, “la calidad del servicio de las empresas Edenor y Edesur se deterioró marcadamente”. Ese comportamiento se produjo a pesar de una menor temperatura promedio: 30,1 grados en diciembre de 2016 contra 29,0 grados en diciembre de 2017” (…) “La empresa bajo el control del grupo energético liderado por Marcelo Mindlin tiene la concesión del área norte de la región metropolitana, abarcando la mitad de Capital y 20 partidos del conurbano, con 2,9 millones de clientes. Mindlin es el empresario que compró en una operación opaca la constructora Iecsa, de la familia Macri. El informe de Oetec detalla que a pesar de una menor temperatura, esta distribuidora y comercializadora de electricidad registró un aumento del 57 por ciento en la cantidad de usuarios totales afectados en diciembre de 2017 respecto de diciembre de 2016” (…) “En un mensaje a sus accionistas, Edenor reitera que el aumento de tarifas ha permitido en primer lugar mejorar el cuadro de resultado económico. En el balance trimestral a septiembre pasado queda reflejada esa mejora, al contabilizar en nueve meses una ganancia de 677,6 millones de pesos que contrasta con la pérdida de 1842 millones de igual período de 2016” (…) “La firma bajo control de los italianos Enel y con participación del fondo de inversión de capitales argentino Sadesa, entre los que se encuentra como socio minoritario el “hermano del alma” del Presidente Macri, Nicolás Caputo, abastece de energía a unos 2,5 millones de clientes del área sur de la Capital y 12 partidos del Gran Buenos Aires” (…) El informe de Oetec repite el análisis con Edesur alcanzando la misma conclusión que con Edenor, aunque con cifras más elevadas para el concesionario del servicio de la zona sur. Afirma que a pesar de una menor temperatura, Edesur registró un aumento del 63 por ciento en la cantidad de usuarios totales afectados en diciembre de 2017 respecto del mismo mes de 2016” (…) “En el ejercicio de nueve meses del año pasado, Edesur contabilizó quebrantos a diferencia de su hermana Edenor. El balance presentado en la bolsa registra números negativos más abultados que en el mismo período de 2016, al anotar pérdidas de 883 millones de pesos contra 169 millones de pesos” (…) “El consenso de especialistas afirmaba que las tarifas bajas no incentivaban la inversión de Edenor y Edesur. Decían entonces que subirlas era la solución para resolver la situación crítica en la distribución eléctrica. El gobierno de Macri lo hizo. Desde diciembre de 2015 la tarifa de luz acumulará un extraordinario aumento de 1700 por ciento incluyendo el próximo ajuste de febrero. Pero los cortes de luz no disminuyeron y siguen habiendo miles de períodos críticos” (…) “Las compañías evalúan que no es rentable invertir para sostener una estructura de distribución del sistema eléctrico para esos días de máximas y mínimas temperaturas, cuando la demanda alcanza picos extraordinarios. Esa decisión tiene su lógica desde el punto de vista de la tasa de retorno de una inversión en el ámbito del sector privado, pero no desde el punto del bienestar social. Para las empresas no es rentable destinar varias decenas de millones de dólares en ampliar la capacidad de transporte (cables) y estaciones transformadoras para atender la demanda excepcional de unos pocos días al año. Así los cortes de estos días no fueron por imprevisión, sino por un esquema de negocios con lógica de rentabilidad privada. El camino elegido por las empresas privadas es el de exprimir al máximo las instalaciones, sólo actuar cuando los equipos y cables se rompen y, como trasmitieron a sus accionistas en los respectivos balances presentados en la Bolsa, mejorar primordialmente la ecuación económica financiera con el tarifazo otorgado por el gobierno de Macri”.

En su edición del 13 de enero, Página/12 publicó artículos de Miguel Jorquera (“Normas gemelas para planes económicos gemelos”), Luis Bruschtein (“El pus”) y David Cufré (“Lo peor ya pasó”).

Escribió Jorquera: “El presidente Mauricio Macri utilizó el copyright de un decreto de Carlos Menem de 1991 para fundamentar su propio mega Decreto de Necesidad y Urgencia de 192 artículos, que deroga 19 leyes y modifica el texto de otras 140, que según el criterio presidencial “constituye un factor de atraso y de entorpecimiento del desarrollo nacional”. Esta norma ya comenzó a cosechar rechazos. “Vamos a oponernos al DNU ómnibus por inconstitucional e inválido, por las formas y porque regula sobre competencias atribuidas constitucionalmente al Congreso sin que exista situación de extrema necesidad que ponga en riesgo las funciones esenciales o la continuidad del Estado”, sostuvo el jefe del bloque de diputados del FPV-PJ, Agustín Rossi. El constitucionalista Eduardo Barcesat lo calificó como “un golpe de Estado institucional hecho por el Gobierno”; la Asociación de Abogados Laboralistas se pronunció en contra y hasta la ONG armada por la ex diputada Margarita Stolbizer debutará en la justicia con una demanda de “inconstitucionalidad” del DNU por “abuso de poder” (…) “El megadecreto que firmaron Macri y sus ministros con el objetivo de “desburocratizar el estado” habilita-entre muchas otras cosas-al fondo de Garantías de Sustentabilidad (FGS) de la Anses a operar en el mercado financiero; faculta a la Unidad de Investigación Financiera (UIF) a saltearse la competencia judicial de los fiscales; reduce las multas de infracciones laborales a las empresas; y facilita embargos comerciales de la cuenta sueldos de los trabajadores” (…) “Que habiendo iniciado la Nación una nueva fase de su historia política y económica, caracterizada por el afianzamiento de los principios constitucionales en todos los planos y la instauración de una economía popular de mercado, la permanencia de normas dictadas en otro contexto constituye un factor de atraso y entorpecimiento del desarrollo nacional”, dice en sus considerandos el decreto 2284/91 del 31 de octubre de 1991 con el que Menem y Domingo Cavallo desregularon el comercio interior y exterior” (…) “Que habiendo iniciado la Nación una nueva fase de su historia política y económica, caracterizada por el afianzamiento de los principios constitucionales en todos los planos y la instauración de una economía pujante, competitiva y transparente, la permanencia de normas dictadas en otros contextos constituye un factor de atraso y de entorpecimiento del desarrollo nacional”, sostiene el DNU 27/18 del 11 de enero de 2018 con el que Macri modifica y deroga cientos de leyes en áreas de ocho ministerios. La única diferencia es que en vez de “economía popular de mercado”, el PRO presenta una “economía pujante, competitiva y transparente” (…) “El Presidente Macri, otra vez, atravesó la esfera de la división de poderes, se extralimitó en sus facultades y avanzó ilegítimamente sobre atribuciones del Congreso porque no hay razones, ni necesidad ni urgencia para disponer modificaciones sustanciales sobre las materias reguladas”, señaló Rossi y anticipó la resistencia a su implementación: “vamos a proponerle a todos los bloques opositores la realización de una sesión especial para derogar el DNU, que, vale recordar, deroga 19 leyes y modifica 140, consta de 22 capítulos y 192 artículos de indiscutible naturaleza legislativa” (…) “Habilita que el fondo con que se financia el sistema previsional realice inversiones financieras y no sólo como hasta ahora, en proyectos productivos que generen empleo, que es la forma con la que se sustenta el sistema. Ahora, como en los tiempos de las AFJP, el fondo podrá jugar a la timba financiera con la plata de todos los trabajadores argentinos”, sentenció el diputado. “Avanza-continuó Rossi-sobre la intangibilidad de la cuenta sueldo de los trabajadores por su condición alimentaria para favorecer a los sectores bancarios y financieros, al tiempo que rebaja las multas a las empresas con infracciones laborales. Reduce a cinco la cantidad de días para publicar en el Boletín Oficial antes de lanzar una licitación, para achicar los oferentes, donde la discrecionalidad favorece a los amigos del poder, donde la información previa vale muchísimo” (…) “Un golpe de Estado institucional hecho por el Gobierno”. Así definió el constitucionalista Barcesat el DNU presidencial. “Desafiando la institucionalidad, el Gobierno Nacional acaba de avasallar las compuertas de la división de poderes mediante el dictado, inmediata publicación y entrada en vigencia del Decreto 27/2018, groseramente denominado “Desburocratización y Simplificación”, afirmó en un texto que difundió” (…) “Los abogados laboralistas también salieron a cuestionar al DNU. “Las cuentas sueldo eran inembargables. El mega DNU de Macri que pretende “simplificar trámites”, mete por la ventana una modificación del artículo 147 de la Ley de Contrato de Trabajo y ahora podrá embargarse una parte. Otro beneficio para las financieras”, sostuvo su presidente Matías Cremonte. “Decretazo de Macri con nuevos guiños al empresariado: reduce el plazo de permanencia en el registro de empresas con trabajadores en negro. Modifica normativas en transporte, lavado de activos, patentes, bienes del Estado, licitaciones, energía y seguros”, posteó luego Cremonte en las redes sociales. Así las cosas, al megadecreto le falta un camino por recorrer, tanto en Tribunales como en el Congreso”.

Escribió Bruschtein: “Pedazo de h de p!! Deberías morirte como un perro. Traidor a la Patria!! Si no te gusta que te atiendan los médicos argentinos, reventá, es lo menos que merecés. Lakra inmunda!!”. Otro: “Esas caras de Moisés que están en la foto, dan asco!! Cuánta razón tienen cuando les llaman raza inferior…”. Otro cuelga en su FB el himno de las SS hitlerianas y su colega, cuando un amigo le pregunta a qué se dedica, responde: “mato terroristas villeros” (…) “Las dos primeras circularon por Factbook y fueron leídas en los comentarios de la nota que publicó Clarín esta semana sobre la prohibición a Héctor Timerman cuando debía viajar a Estados Unidos para continuar su tratamiento contra el cáncer” (…) “Son más que locos sueltos. Son más que expresiones aisladas. Son el síntoma, la fiebre, el pus de un proceso de infección que afecta a todo el cuerpo social. Es más que la disputa entre dos fuerzas políticas, entre el macrismo y el kirchnerismo, es más que parte de una campaña política” (…) “Esos escritos y esos textos están hablando de procesos subterráneos que buscan hacer raíz y convertirse en pilar de un nuevo porvenir” (…) “Las expresiones de Eduardo Feinmann, Fernando Iglesias y Federico Andahazi fueron más conocidas. Pero son personas que trabajan para provocar, es su capacidad, con eso obtienen la repercusión que buscan y que no logran como periodista, legislador, ni escritor” (…) “Igual de denigrantes pero aún más inquietantes son las que se reprodujeron en las redes, a las que el diario más influyente del país les da entidad cuando las admite, y las expresiones públicas, abiertamente intolerantes y racistas, de agentes policiales. Se pueden publicar, se pueden difundir, lo que da cuenta de una razón que ya es aceptada como parte sana de un sentido común que busca ser el que ordene a esta sociedad” (…) “Esas expresiones que se han naturalizado y hasta estimulado, que se aceptan con tanta parsimonia, han llevado a la humanidad a la cima de sus peores tragedias. Es la esencia del pensamiento racista y autoritario, es un policía de la ciudad que difunde el himno de las SS. Muchos lo minimizarán hasta que sean arrastrados por el mismo odio convertido en sentido común y se convertirán en odiados u odiadores, en agresores o víctimas, en el jubilado que camina solo y en el policía acorazado que pasa por allí, se baja de su moto y le rocía la cara con gas pimienta, por que sí, porque se le da la gana y porque puede” (…) “Este gobierno introdujo la novedad de espiar el Facebook de los trabajadores estatales para investigar sus posiciones políticas, detectar a los disidentes y despedirlos si fuera necesario. Hay un servicio de inteligencia que se dedica a espiar en las redes” (…) “Nadie nace escuchando himnos nazis o deseando matar villeros y se mete a la policía para hacerlo. Es lógico pensar que eso está siendo inculcado en los integrantes de las fuerzas de seguridad. En vez de un ideario democrático, de servicio ciudadano, se les baja un discurso de supremacía, autoritario, y de impunidad, donde el disidente es presentado como un ignorante que no merece expresarse o como un traidor a la patria que merece ser exterminado. Y al final…se convierten en matones” (…) “La esencia de esas reacciones, tan preocupantes como el antisemitismo, es la insensibilidad y el odio, el desprecio por la vida. Personas que escriben deseándole la muerte a otra. Los familiares de los desaparecidos y torturados…nunca tuvieron siquiera una expresión parecida” (…) “Nunca se escucharon esas expresiones que ahora explotaron como una pústula madura que fue creciendo bajo la piel” (…) “Ninguna fuerza política, ningún gobierno, tiene derecho a inculcar el odio y la violencia para confrontar con sus adversarios o disidentes”.

Escribió Cufré: “El poder adquisitivo del salario se ubicará en marzo en su punto más bajo en siete años. El gobierno sólo podría evitarlo si la inflación del primer trimestre fuera inferior a un promedio de 1,5 por ciento mensual. Con los aumentos anunciados de electricidad, gas, transporte, telefonía celular, medicina prepaga, educación privada y combustibles, entre otros, las estimaciones más conservadoras anticipan un alza de precios durante el verano de no menos de 2 puntos en promedio por mes. La Fundación de Investigaciones para el Desarrollo (FIDE) indicó que en ese caso “el salario real alcanzaría en marzo un nivel que, en comparación al mismo mes de cada año, sería el más bajo desde 2011, situación que se producirá ya con un incremento del IPC de 1,5 por ciento mensual” (…) “La respuesta del Gobierno frente a ese deterioro es pretender un techo a las paritarias del 15 por ciento. Los despidos a granel en la administración pública y la identificación del sindicalismo con la corrupción que las autoridades nacionales pusieron en el primer plano de la agenda mediática son funcionales a ese objetivo. Más allá de que consiga o no fijar el techo del 15 por ciento, claramente la estrategia oficial descarta una recuperación del salario como fuente de estímulo para el crecimiento económico este año” (…) “La política económica no logró contener la inflación, está hundiendo el consumo de los trabajadores y regaló rentabilidades extraordinarias al capital financiero con las altas tasas de interés. El fracaso de ese modelo para las mayorías populares no produjo sin embargo una corrección en el rumbo, que por el contrario volverá a aplicarse con mayor intensidad en los próximos meses. El resultado, con las mismas decisiones, será el mismo fracaso” (…) “¿Lo mejor ya pasó?”, se pregunta el último informe de FIDE al analizar el panorama para 2018. Lo “mejor” fue el rebote del segundo y el tercer trimestre de 2017 en comparación con la aguda recesión de 2016. Ya la última parte del año pasado empezó a marcar una desaceleración del crecimiento según surge de datos oficiales y estimaciones privadas. La razón es que los principales factores que permitieron una recuperación del PIB que solo alcanzó para compensar la pérdida del primer año de mandato de Cambiemos…han empezado a desvanecerse” (…) “La mejora del salario real y la inversión pública que se produjeron en el segundo y tercer trimestre de 2017 perdieron impulso”, destaca el documento de la Fundación que conduce la ex presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont. “La inflación anual superó todas las previsiones y se ubicó en 24,8 por ciento, al tiempo que el incremento del PIB difícilmente supere en 2017 el 2,8 por ciento acumulado hasta octubre”, agrega. “Esta lentificación de los niveles de actividad y consumo se proyecta inercialmente para 2018. El gobierno maneja una hipótesis de aumento del PIB de 3,5 por ciento, pero no hay ningún dato objetivo que habilite a pensar que este año será mejor que el anterior. Ya no será el efecto “rebote” que predominó en 2017 y, de acuerdo a los datos presupuestarios, el estímulo fiscal por la vía de la inversión pública se reducirá. En lo que hace a la inversión privada, siguen sin aparecer señales ni condiciones que auguren un rol más dinámico de esta variable. Por su parte, el recorte de subsidios económicos con su contracara en término de aumento de tarifas promete repetir el impacto negativo sobre el ingreso disponible del sector privado. Por el lado de la demanda externa tampoco se advierten razones para esperar una recuperación de las exportaciones. No ayuda el retraso cambiario acumulado, pero menos aún las condiciones de la economía internacional, donde se espera un crecimiento moderado del comercio global y regional y un estancamiento en las cotizaciones de los productos agrícolas”, completa la descripción del escenario para los próximos meses. La conclusión en base a ese diagnóstico es que “la inercia de la actual situación conduce a una lentificación del crecimiento, no a una intensificación como proyecta el oficialismo”.

En su edición del 13 de enero, La Nación publicó artículos de Eduardo Fidanza (“La decadencia peronista y el laberinto de Macri”) y Francisco Olivera (“El síndrome del sindicato vacío”).

Escribió Fidanza: “La Argentina que el calor agobia, profundiza el desconcierto político y repite antiguas limitaciones económicas. Como ocurrió tantas veces, el triunfo en una elección le otorgó al ganador un éxito efímero. Apenas terminaron los festejos, comenzaron los problemas. La aprobación de un paquete de leyes…generó protestas sociales significativas al cabo de las cuales el gobierno perdió la popularidad que había recuperado con la victoria. De acuerdo a los sondeos, la sociedad volvió a dividirse en dos a la hora de juzgar a Cambiemos y las expectativas de mejora descendieron” (…) “Por eso, los motivos que explicarían el retroceso del oficialismo deben buscarse en el manejo de la crisis que provocaron las reformas. Sin embargo, el déficit político de Macri posee un límite, también político: la desastrosa situación del peronismo, que no es alternativa” (…) “Si la coalición gobernante atraviesa dificultades, el peronismo enfrenta un desaguisado de proporciones aún inestimables. La tragedia no es electoral, sino política y sociológica” (…) “En primer lugar, debe analizarse el significado del kirchnerismo tardío, que lejos de declinar se encamina a convertirse en actor político relevante. Pero hay otras razones menos evidentes, aunque quizás decisivas: la fractura social de la base de votantes, la deficiente respuesta intelectual al cambio de época, la deriva sindical, el desplome del mito de la eficacia para gobernar, y las cada vez menos aceptadas prácticas de corrupción” (…) “El kirchnerismo crepuscular supone un enigma sin precedentes para los peronistas. Cabe aquí una hipótesis: si se lo analiza a la luz de “Las 20 verdades”, el peronismo tuvo tres grandes desviaciones en su historia, después del 55: el montonerismo, el neoliberalismo de Menem y la interpretación radicalizada de la democracia de Cristina Kirchner. Los montoneros y Menem fueron abatidos por dos tragedias: la dictadura militar y la crisis de principio de siglo. Eso permitió a Cafiero y luego a Duhalde…regresar a la ortodoxia y promover los cambios necesarios. Por así decirlo, el requisito de la renovación fue la destrucción de los descarriados. Esta vez, es distinto: la desviación de Cristina se está institucionalizando con un fuerte liderazgo personal, 3 millones y medio de votos, casi 10 senadores y más de 60 diputados. No hay en los manuales del peronismo histórico instrucciones para lidiar con este fenómeno novedoso” (…) “Por una parte, existen pruebas de una escisión sociológica en su base electoral. Por otra, ocurre un hecho menos advertido: el justicialismo carece de respuesta intelectual a la revolución de las costumbres provocada por la tecnología y tampoco pudo sostener su reputación de administrador eficaz. A eso debe sumarse la crisis del sindicalismo, que se ha convertido en una organización dislocada e ingenua” (…) “Con estos claros signos de decadencia, el peronismo estaría en riesgo de desaparecer si no fuera porque su principal rival se encuentra a su vez en un laberinto. A Macri lo abruman los dilemas. La reelección no parece compatible con enderezar en poco tiempo la economía nacional que heredó. La disyuntiva es cuánto hay que ajustar para no perder y cuánto habrá que perder por no ajustar. El conflicto entre las políticas monetaria y fiscal expresa esta contradicción no resuelta, que acaso anide en la cabeza del Presidente. Los combates de diciembre le mostraron con dramatismo la asfixia del desfiladero, que el triunfo electoral no pudo ensanchar”.

Escribió Olivera: “Cada tanto, algunos funcionarios del Gobierno se toman el atrevimiento de darles consejos a los líderes sindicales. Les dicen, por ejemplo, que por el bien de todos es hora de que el sector gremial cambie cuestiones al menos estéticas, que los más experimentados les den paso a los jóvenes, que alienten la presentación de declaraciones juradas de sus delegados y que adopten normas de transparencia. Son pedidos difíciles para una generación ostentosa de poder real y poco propensa a abandonarlo” (…) “La relación con la Casa Rosada es tensa. Macri, por ejemplo, no habla con el líder camionero hace por lo menos seis meses” (…) “Lo más probable es que, más que por buena voluntad, y si ocurre, el encuadramiento venga del lado más clásico: el temor que los dirigentes gremiales le tienen a la Justicia. Es una jugada vieja. Sin ir tan lejos, el kirchnerismo aprovechó para negociar con ellos varios fallos de la Corte Suprema que terminaron con ciertos privilegios de las agrupaciones más grandes” (…) “Fueron guiños a la izquierda sindical. Pero Macri es empresario y desprecia esas cosmovisiones. “El sindicalismo ortodoxo se sostiene por la izquierda estúpida”, razonan cerca del Presidente. Esta lógica se basa en un antiguo prejuicio empresarial: un delegado del PJ podrá ser más costoso, pero en definitiva lo que busca es mantenerse en el cargo y que los empleados estén mejor; el de izquierda, en cambio, jamás pedirá una coima, pero sustenta su militancia en el conflicto eterno o, en el mejor de los casos, sueña con hacer de cualquier planta fabril una cooperativa” (…) “Es cierto que ambas concepciones de la vida son antagónicas. Basta con leer el texto con que la izquierda cubrió anteayer la detención de la cúpula de la Uocra de Bahía Blanca” (…) “La crítica da en el centro de una perturbación que empieza a cundir en algunas industrias. La pérdida de credibilidad gremial podrá ser preexistente a las detenciones de Juan Manuel “Pata” Medina, Omar “Caballo” Suárez o Marcelo Balcedo, pero sin dudas se intensificó con ellas y expone al sistema a un vaciamiento de legitimidad que, dicen en las corporaciones, no conviene a nadie. O sí, en realidad: al Gobierno, que ha puesto en las paritarias las esperanzas de cumplir una meta de inflación, 15% en 2018, que ya se asoma difícil de alcanzar. Pero no parece lo más alentador al hombre de negocios argentino que, por ejemplo, en el corredor de la ruta 9…pueda cobrar vuelo la izquierda” (…) “El general Perón dividía a la sociedad argentina entre los “idealistas”, que calculaba en un 10%, y los “materialistas”, que fijaba en el 90%. El idealista, decía, es como el perro: actúa por instinto cuando se siente atacado; el materialista, en cambio, se parece al gato y reacciona por desesperación: ataca solo si se siente acorralado. El idealismo no abunda en el universo sindical: cualquier peronista sabe que la única verdad es la realidad”.

En su edición del 12 de enero, Página/12 publicó artículos de Javier Lewkowicz (“Los precios arden en cualquier estación”), Jorge Alemán (“Terrorismo y hermanos”) y Juan Funes (“Una implosión de solo 40 milisegundos”).

Escribió Lewkowicz: “La inflación a nivel nacional se ubicó en diciembre en 3,1 por ciento, con lo cual el alza anual de precios terminó en el 24,8 por ciento, según el Indec. El incremento de diciembre fue el más alto de 2017 y estuvo motorizado por las subas de los servicios públicos, combustibles y prepagas. El nuevo capítulo del tarifazo hizo que la inflación mensual en el Gran Buenos Aires fuera del 3,4 por ciento, por encima de las demás regiones. La inflación oficial terminó el año 7,8 puntos porcentuales por encima del techo previsto por la meta del Banco Central, del 17%. De esta forma, en dos años la autoridad monetaria que dirige Federico Sturzenegger acumula un desvío entre su previsión y los hechos de 24 puntos porcentuales. Ese antecedente junto a la seguidilla de aumentos en los primeros meses de 2018 deslegitiman la nueva meta del 15 por ciento” (…) “En diciembre, la suba de precios estuvo traccionada por los “precios regulados”, que subieron 9,1 por ciento mensual. En tanto, el llamado “IPC núcleo” se aceleró con respecto a los últimos meses hasta un 1,7 por ciento. En el año, los regulados crecieron un 38,7 por ciento, con los servicios públicos a la cabeza. La inflación núcleo en 2017 se ubicó en el 21,1 por ciento, también por encima de la meta oficial del 12-17 por ciento. La suba de precios en 2017 estuvo en línea con las estimaciones más pesimistas respecto de la situación durante el gobierno anterior” (…) “Es decir que la política económica del macrismo no implicó un cambio a la baja en la trayectoria inflacionaria aunque sí en materia de poder adquisitivo: los salarios de los registrados están unos 4 puntos por debajo de 2015 y 2018 se perfila como un período complicado por el techo de 15 puntos que pretende imponer el gobierno en las paritarias” (…) “A nivel nacional, la inflación del 3,1 por ciento en diciembre estuvo impulsada por el avance del 17,8 por ciento en vivienda, agua, electricidad y gas. La quita de subsidios a los servicios públicos recobró vigor luego de las elecciones parlamentarias. En el caso del área en donde prestan servicio Edenor y Edesur, el 90 por ciento de las boletas de electricidad subieron un 39 por ciento y el 10 por ciento restante, hasta un 47 por ciento” (…) “En el gas, una parte de los aumentos de julio-agosto (período en el que se concentra la mayor demanda de gas) fueron pospuestos a pedido del gobierno con fines electorales y tuvieron impacto de bolsillo en diciembre” (…) “A lo largo del año, el rubro de vivienda y servicios públicos subió a nivel nacional un 55,6 por ciento” (…) “Un capítulo con fuerte peso en la inflación es alimentos y bebidas, la base de canasta de consumo masivo. La suba de diciembre fue del 0,7 por ciento a nivel nacional y en doce meses alcanzó el 20,4 por ciento” (…) “Transporte subió un 3,2 por ciento en diciembre y acumuló en el año un avance del 20,6 por ciento” (…) “El rubro salud subió 2,4 por ciento en diciembre a nivel nacional y acumuló en doce meses un alza del 27,8 por ciento” (…) “Comunicación subió 1,7 en diciembre a nivel nacional y 2,3 en GBA. En doce meses, el alza en el país alcanza el 34,1 por ciento” (…) “Educación subió 31,5 por ciento en el año por el incremento de las cuotas de los colegios privados; recreación y cultura, un 22,8; y restaurantes y hoteles, un 22,1 por ciento”.

Escribió Alemán: “El atentado de las Torres Gemelas supuso un antes y un después para el mundo y en el análisis del fenómeno terrorista” (…) “En primer lugar, se planteaba en 2001 que el Capital y la Técnica y sus operaciones globalizadoras e ilimitadas son capaces de conectar incluso las acciones más extremas y heterogéneas como el acto de Terror. En segundo lugar, ni la llamada “lucha de clases”, ni la “lucha anticolonial” ni el retorno a un fanatismo premoderno y bárbaro permiten dar cuenta del fenómeno terrorista en su nueva expresión como interpretación asesina del Islam” (…) “Asimismo, la globalización de los mercados ha destruido la categoría moderna de “universalidad” y, en su lugar, ha generado un mundo acéfalo de operaciones financieras que se expanden a gran velocidad por el mundo virtual” (…) “De hecho, el surgimiento del terrorismo actual es un índice claro del impase en que se encuentra un proyecto de emancipación popular a escala internacional protagonizado por los distintos fragmentos sin articular (excluidos, desempleados, trabajadores precarios, refugiados, sin papeles, etc.)” (…) “Heidegger analizaba la Técnica como aquello que nos emplaza a todos a habitar el mundo conminados a transformar únicamente nuestro habitar en la existencia, sin realizar una verdadera experiencia existencial de la verdad y la relación de la misma con el “olvido del ser”. Por su parte, Lacan describe el “Discurso capitalista” como el discurso que borra de la faz del orden simbólico que nos constituye la metáfora que permitía insertar nuestro cuerpo vivo en el aparato de la lengua” (…) “En definitiva, el Capitalismo y la Técnica nos han llevado a los códigos de evaluación, de diagnósticos funcionales del vivir, de espectacularización de las vidas o de las prácticas de “goce” estandarizadas que se agrupan en grupos de WhatsApp” (…) “En este contexto, la guerra del terror se extiende sin centro, sin necesidad de un marco mínimo regulatorio, a diferencia de lo que ocurría durante el siglo XX, en el que podíamos encontrar presente el marco regulatorio, aún de un modo frágil, en las guerras, incluso las civiles, insurreccionales o guerrilleras” (…) “La guerra actual no se declara formalmente por medio de instituciones, no tiene centro preciso de localización, ni comienzo, duración o final posible. La misma se enmarca en la circularidad del tecnocapital que construye el mundo y las subjetividades que los soportan” (…) “En su excelente ensayo filosófico “Una guerra civil global”, Donatella Di Cesare…señala la reiterada presencia de los “hermanos de sangre” en las distintas células” (…) “Mientras en Freud, los hermanos mataban a un Padre mítico que gozaba sin límites de todo y acaparaba sin medida el goce de las mujeres, una ensoñación espectral muy eficaz según Freud, confirmaba que el Malestar de la Cultura está atravesado por un fantasma de apropiación indebida que se desplaza según los puntos cruciales de cada coyuntura. Siempre hay alguien que roba todo, aquél al que se lo financia innecesariamente en su goce, que se queda con el esfuerzo de los otros, que es subvencionado en su pereza ancestral. Todos argumentos de los actuales mecanismos de segregación contemporáneos” (…) “Podemos extraer del libro de Di Cesare la idea de que el terrorista del ISIS se autoriza a sí mismo como una mónada que no tiene que dar cuentas a nada ni a nadie. No siente Culpa, su trabajo es con la Expiación” (…) “En su guerra cualquiera que pertenezca a la multitud desarticulada que circula en el mundo, es susceptible de ser matado porque se trata de generar un comienzo absoluto a partir de un acontecimiento imprevisible de “dar la muerte matándose”. Este dar la muerte matándose es un equivalente absoluto del trayecto de la “pulsión de muerte” (…) “Mientras en el habitante convencional del Capital, la pulsión de muerte trabaja alrededor de objetos que se ofrecen a un goce siempre insatisfecho por definición y que, por tanto, debe continuar su búsqueda indefinida, el terrorista dando muerte y matándose la realiza en su ofrenda a un Dios oscuro de un modo absolutamente puro” (…) “El acto nunca es fallido porque está dispuesto a morir. No se trata de fanatismo premoderno ni de atraso bárbaro, es un modo totalmente contemporáneo de encarnar de un modo singular la dimensión más pura de la pulsión de muerte”.

Escribió Funes: “Un informe elaborado por un experto de la Inteligencia Naval de los Estados Unidos sostiene que el submarino Ara San Juan implosionó el 15 de noviembre a unos 388 metros de profundidad, lo cual provocó la “muerte instantánea” de los 44 tripulantes y la destrucción total de la nave, que luego “se hundió verticalmente a una velocidad estimada de entre 10 y 13 nudos”. El reporte fue publicado por el diario francés Le Monde y se realizó en base al análisis de la información recolectada por los micrófonos hidroacústicos de la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (Ctbto)” (…) “El informe del analista acústico de la Oficina de Inteligencia Naval de los Estados Unidos, Bruce Rule, señala que “el análisis de la información publicada por el Ctbto sobre la señal acústica asociada a la desaparición del submarino ARA San Juan confirma lo siguiente: la señal acústica originada cerca de las coordenadas 46.10 grados latitud sur y 59.42 grados longitud oeste a las 13.58 GMT del 15 de noviembre de 2017 fue producida por el colapso (implosión) del casco de presión del ARA San Juan a una profundidad de 1275 pies. La presión del mar al momento del colapso era de 570 PSU (libra-fuerza por pulgada cuadrada)” (…) “La descripción de la implosión coincide con lo anunciado por el vocero oficial de la Armada, Enrique Balbi, durante el primer parte de prensa del 23 de noviembre, cuando apuntó que se había registrado “un evento anómalo, singular, corto, violento y no nuclear consistente con una explosión”. En la misma línea, el informe de Rule especifica que “la energía liberada por el colapso fue equivalente a una explosión de 12500 libras (unos 5700 kilos) de TNT” (…) “Otro dato significativo del informe del analista acústico es la profundidad a la que habría colapsado el submarino. Consultado por Página/12, un ex miembro de Tandanor que participó de la obra de media vida del submarino, recordó que durante las pruebas la nave fue llevada a 400 metros de profundidad, lo cual había sido “más exigente que las pruebas que se realizaron en el astillero de Río de Janeiro, Brasil, con el submarino ARA Salta, que llegó a una inmersión de 200 metros”. El ex miembro de Tandanor indicó que estos submarinos no navegan a una profundidad de 400 metros; se lo había llevado a esa profundidad sólo a modo de prueba. De este dato se deduce que si el submarino colapsó a 388 metros, no estaba navegando a la profundidad habitual, de modo que ya venía con problemas antes de la explosión” (…) “En relación a la muerte de los 44 submarinistas, el informe detalla que “no se ahogaron ni sintieron dolor alguno. La muerte fue instantánea”. “La tripulación pudo haberse dado cuenta de que un colapso era inminente, pero nunca se dieron cuenta de que estaba ocurriendo”, dado que “el casco de presión fue completamente destruido (fragmentado/compactado) en alrededor de 40 milisegundos (0.040 segundos)” y “la duración de la fase de compresión fue la mitad del mínimo del tiempo requerido para el reconocimiento cognitivo de un evento”, describe” (…) “La Armada no hizo alusión al informe de Rule en su parte de ayer…pero anunció que la búsqueda del submarino continuaba “con el buque oceanográfico Yantar de la Federación Rusa y la corbeta ARA Spiro”).

En su edición del 12 de enero, La Nación publicó artículos de Fernando Laborda (“La pregunta del millón: ¿vendrá el turno del clan Moyano?”) y Enrique Aguilar (“Los límites del consenso político”).

Escribió Laborda: “La pregunta del millón que circula en estos días entre dirigentes políticos y empresarios es si el gobierno de Mauricio Macri y la Justicia irán a fondo contra el clan Moyano. Hasta dónde llegará el “mani pulite” sindical en la Argentina es un interrogante que arroja variadas respuestas, pero lo cierto es que, en más de tres décadas de democracia, nunca hubo tantos gremialistas presos o investigados” (…) “El Gobierno le ha declarado la guerra al Estado que obstruye con el fin de reducir el costo argentino y facilitar inversiones…Macri es consciente de que, además de las enormes trabas burocráticas y papeleos que hasta hoy son necesarios para crear empresas o llevar a cabo un negocio legal, existen obstáculos que generan gremialistas que han vivido en todos estos años de privilegios corporativos y de la extorsión a las empresas” (…) “Pero se sabe que el pez más gordo es Hugo Moyano” (…) “Alrededor del sindicato camionero no faltan denuncias por aprietes, empresas allegadas a familiares del líder sindical y armadas para prestar con exclusividad servicios millonarios al gremio y la obra social sindical, investigaciones por irregularidades en la administración de recursos y negocios con barrabravas” (…) “Las dudas pasan, por un lado, por las relaciones que unen a no pocos hombres de la política y del propio oficialismo con Moyano. En segundo lugar, por la posibilidad de que el Gobierno esté aplicando la misma estrategia a la que acostumbra recurrir el sindicalismo argentino: apretar para negociar. ¿Podría ser la ofensiva contra determinados jefes gremiales una simple presión para que aprueben una reforma laboral y garanticen la paz social?” (…) “Por si todo eso fuera en serio, Luis Barrionuevo lanzó una advertencia, que algunos interpretaron como un aviso mafioso y otros como parte del juego político: “Dejen de pisarle la cola al león”.

Escribió Aguilar: “¿Existe en nuestro país una real predisposición al diálogo? ¿Pueden verse como una señal alentadora las distintas negociaciones mantenidas por el Gobierno con sectores de la oposición, o el pacto fiscal suscripto con los gobernadores? ¿Debería este diálogo incipiente aportar algo a la tan mentada unión de los argentinos?” (…) “La aceptación de las discrepancias, mientras no quebranten aquel acuerdo (básico en torno a las reglas que garanticen nuestros derechos y la resolución pacífica de los conflictos) ni degeneren en violencia, contribuye a sostener la convivencia democrática al conspirar contra el surgimiento de cualquier proyecto mayoritario que pretenda adueñarse de todo y decidir unilateralmente todo” (…) “En efecto, desde Maquiavelo sabemos que la desunión en el seno de una República, en lugar de ser causa de ruina, puede tener consecuencias beneficiosas para su estabilidad en la medida en que los “humores” de las partes, encauzados institucionalmente, pongan freno al deseo de dominación salvaguardando la libertad. Por eso, Bobbio habló de “la fecundidad del antagonismo”, en alusión a una línea argumentativa que supo ver en la contraposición entre opiniones adversas la razón de ser, no solo del equilibrio social y político, sino también del progreso del conocimiento” (…) “Sin embargo, la defensa de un disenso razonable como remedio al afán de homogeneidad puede convertir el diálogo en un asunto de necesidad pero no de elección. Me siento obligado a negociar, porque no cuento con el respaldo suficiente para imponerme. Disfrazo mi intransigencia permitiendo a mi oponente expresarse, pero sin abrirme a sus razonamientos ni a mi eventual rectificación” (…) “Otra cosa, por consiguiente, sería promover el diálogo como una opción personal y como motivo de reconocimiento entre perspectivas diferentes y hasta potencialmente contradictorias que, al conversar, se enriquecen sin asimilarse” (…) “De ahí que el consenso nacido de la común observancia a las reglas legales no parezca, en rigor, suficiente, aun cuando este consenso, como diría Sartori, proporcione “la moderación que convierte el conflicto en menos que conflicto”. Sobre todo en sociedades que, al no poder superar viejos enconos, se encuentran de alguna manera inhibidas de abrirse esperanzadamente al porvenir” (…) “Siendo así, ¿qué concesiones recíprocas, qué acervo común de valores y hábitos de conducta podrían cimentar esa deseable convivencia ciudadana?” (…) “Tal vez en el propio diálogo civilizado logremos descifrar qué grado de discordia es compatible con la democracia y qué nivel de consenso, más allá del procedimental, puede servir, como “condición coadyuvante” pero no necesaria, a nuestra existencia ciudadana. Hablaríamos entonces, para seguir con Sartori, de una “democracia lograda” cuyos protagonistas pueden discutir sin odios y sin segregarse, canalizando sus desacuerdos, pero unidos por el anhelo de continuar la vida juntos. De todas maneras, si no admitimos que el conflicto es, hasta cierto punto, consustancial a toda sociedad que se diga abierta y plural, el derecho a manifestar nuestro disenso y la sana convivencia entre mayorías y minorías se verán siempre amenazados”.

En su edición del 11 de enero, Página/12 publicó artículos de Carlos Rozanski (“Estado y terror”), Horacio González (“Timerman reivindicado”) y Washington Uranga (“Que escuche el que quiera escuchar”).

Escribió Rozanski: “La formación académica de quienes hoy están provocando el mayor desastre humanitario del nuevo siglo tuvo su origen en la década de los 50 en la célebre Facultad de Economía de la Universidad de Chicago. El líder de la denominada Escuela de Chicago fue Milton Friedman, quien años después sería contratado por Augusto Pinochet en Chile para concretar en nuestra región el plan criminal de transferencia de recursos que la prestigiosa escritora canadiense Naomi Klein denomina “Doctrina del Shock”. La misma consiste en aprovechar crisis-reales o percibidas-para lograr cambios profundos en las políticas económicas existentes y que esas nuevas alternativas “…permanezcan vivas y activas hasta que lo políticamente imposible se vuelve políticamente inevitable”. Con esas palabras Friedman sintetizaba su fórmula siniestra de transformar lo imposible en inevitable. En su obra “La Doctrina del Shock”, la autora citada señala que las principales características del modelo actualmente en marcha consisten en “…una gran transferencia de riqueza pública hacia la propiedad privada-a menudo acompañada de un creciente endeudamiento-, el incremento de las distancias entre los inmensamente ricos y los pobres descartables y un nacionalismo agresivo que justifique un cheque en blanco en gastos de defensa y seguridad”” (…) “El modelo económico de Friedman puede imponerse en democracia, pero para poder llevar a cabo su verdadera visión necesita “condiciones políticas autoritarias”. Pero, en países como el nuestro, donde durante más de una década-del 2003 al 2015-, la economía creció con condiciones opuestas a las de los Chicago Boys…aplicar la receta de Friedman se complica. Obviamente una complicación no va a detener las ambiciones de quienes, a pesar de poseer inmensas fortunas, sólo desean acrecentarlas. Es ahí donde necesitan generar una crisis que permita, como decía Friedman, que lo políticamente imposible se vuelva inevitable. Y entonces, se inventan enemigos. Se demonizan pueblos originarios a quienes se les atribuyen características violentas y planes de apoderarse de una parte de nuestra geografía. Se generan situaciones de desaparición forzada de ciudadanos o se los asesina por la espalda. Se infiltran manifestaciones pacíficas para provocar reacciones que justifiquen inéditas violencias represivas. Se agreden deliberadamente legisladores representantes del pueblo y luego se los denuncia penalmente. Se hiere con gas pimienta a jubilados inmovilizados en la calle y se los golpea” (…) “Mediante esos simples relatos relatados, el régimen actual supera lo políticamente imposible y reduce el ingreso a los jubilados, beneficiarios de asignaciones universales y demás grupos vulnerables. Baste recordar la reflexión del diputado Pablo Tonelli, al respecto, en cuanto a que “los jubilados van a perder plata, pero no poder adquisitivo…”. Ese es el instante en que lo imposible se vuelve inevitable. Que la afirmación no tenga sentido no importa” (…) “El escenario de lo imposible ya fue montado” (…) “Y cuando la macabra danza con globos de colores, festejando triunfos y hasta ocultando derrotas, finaliza y las luces se apagan, el escenario real emerge con su carga implacable de dolor, horror y sufrimiento” (…) “Y en ese marco, los libros de los abogados de los obreros, militantes y perseguidos políticos no sirven. Porque en situaciones de terror, donde el estado, en lugar de proteger, lastima y persigue, la ley no rige. Y la justicia no es sólo cómplice. Es la columna vertebral del régimen, es la garantía del modelo económico” (…) “Y ante semejante panorama la unidad de millones de argentinos es la única herramienta que puede generar una justicia que, en lugar de garantizar impunidad, garantice derechos, e impida que los mercenarios del mercado, continúen lastimando y empobreciendo a nuestra gente”.

Escribió González: “Héctor Timerman va a ser reivindicado. Cuando las puertas de la sensatez hoy cerradas vuelvan a abrirse. Cuando las trabas de la sinrazón hoy dominantes sean apartadas. Cuando los inhumanos impedimentos de abstractos protocolos dejen paso otra vez al sentido de humanidad. Timerman fue un digno canciller del país. Como a todos los hombres, le tocó una época difícil para actuar. Lo hizo con profunda pertinencia y delicadeza en un mundo trastocado y al borde del abismo. Hubiera sido fácil conciliar con los oscuros hilos que manejan como un turbio vendaval, las opiniones hoy dominantes. Son las que claman por civilización y exudan barbarie. Pero mantuvo la soberanía argumental del país en un momento en que era fácil plegarse a los autores de cualquier conspiración de utilería” (…) “Timerman está ahora en el centro de los cables de alta tensión que ha instalado el gobierno para hacer pasar el flujo diario de sus reprobables insensibilidades. Héctor Timerman va a ser reivindicado. Hay mentes insensatas que subordinan todo a ese bólido arrasador que encarna el actual gobierno. En una tímida fisura, alguien por fin le otorga libre tránsito para su tratamiento en Nueva York. Saludamos esta pequeña rendija, pero no se puede ignorar que los fundamentos últimos de una sociedad implican que esto sea lo habitual y no una excepción arrancada por las reacciones de miles de hombres y mujeres íntegros” (…) “¿Habrá ahora otra aduana adicional que exhiba las banderas de la enajenación de lo humano?”

Escribió Uranga: “El comunicado emitido por la Comisión Ejecutiva del episcopado católico argentino si bien mantiene la formalidad institucional de una declaración, es de una dureza poco común en manifestaciones de este tipo. Habla sobre “lamentables tergiversaciones” de la figura del Papa y de sus palabras, denunciando incluso que se ha llegado “a la injuria y la difamación”. Si bien nadie lo expresó de esta manera, ni lo dirá seguramente nunca, lo que puede colegirse es que a los obispos se les agotó la paciencia frente a la manipulación política y mediática que se está haciendo de Francisco en la Argentina. Y decidieron salir al cruce para advertir y, en la medida de las posibilidades, para ponerle límite a la situación” (…) “Pero al hacerlo los obispos no bajan las banderas ni resignan el principal perfil de la enseñanza de Francisco desde que se hizo cargo de la jefatura de la Iglesia. “Acompañar a los movimientos populares en su lucha por la tierra, techo y trabajo es una tarea que la Iglesia ha realizado siempre y que el propio Papa promueve abiertamente, invitándonos a prestar nuestras voces a las causas de los más débiles y excluidos”, afirman en el mismo texto” (…) “Y para entender lo que Francisco piensa de la Argentina la Comisión Ejecutiva remite a los documentos y al magisterio pontificio. “Su aporte a la realidad de nuestro país hay que encontrarlo en el magisterio y en sus actitudes como pastor, no en interpretaciones tendenciosas y parciales que sólo agrandan la división entre los argentinos” (…) “Para quienes quieran entenderlo en el párrafo anterior”, expresa Uranga, “radica el principal argumento para que el Papa siga demorando su visita a la Argentina: no quiere convertirse en rehén de la disputa entre argentinos. De allí también el título del comunicado: “Francisco, el Papa de todos”. “Que escuche el que quiere escuchar” (Ezequiel 3:27), podría decirse parafraseando el lenguaje bíblico. Si bien nadie fue referido en forma particular, el mensaje tiene destinatarios directos. “Que nadie se haga el distraído” sería una buena traducción en lenguaje popular”.

En las últimas horas, el abogado constitucionalista Eduardo Barcesat dio a conocer un texto titulado “Un golpe de estado institucional perpetrado por el gobierno”.

Escribió el autor: “Desafiando la institucionalidad, el Gobierno Nacional acaba de avasallar las compuertas de la división de poderes mediante el dictado, inmediata publicación y entrada en vigencia del Decreto 27/2018 (B.0. 11-01-2018), groseramente denominado “Desburocratización y Simplificación”. Se trata, cuando no, de un decreto nominado como de “necesidad y urgencia”, que invoca, pero no cumplimenta los recaudos establecidos por el art. 99, inc. 3 de la C. N. Recordemos el texto de esta norma, en cuanto aquí concierne: “…El Poder Ejecutivo no podrá en ningún caso bajo pena de nulidad absoluta e insanable, emitir disposiciones de carácter legislativo. Solamente cuando circunstancias excepcionales hicieran imposible seguir los trámites ordinarios previstos por esta Constitución para la sanción de las leyes, y no se trate de normas que regulen materia penal, electoral o el régimen de los partidos políticos, podrá dictar decretos por razones de necesidad y urgencia, los que serán decididos en acuerdo general de ministros que deberán refrendarlo, conjuntamente con el jefe gabinete de ministros…” Ahora bien, con un Congreso de la Nación convocado a sesiones extraordinarias por el propio PEN, ¿qué es lo que impide que ambas cámaras del congreso de la Nación se avoquen al tratamiento de un proyecto de ley que modifica-y derrumba-la estructura institucional del Estado de Derecho, cuyo pilar basal es la división de poderes? La respuesta es sencilla: no hay ninguna necesidad y urgencia; simplemente que es más efectivo, brutalmente efectivo, apropiar la potestad legisferante conferida al Congreso de la Nación que, valga recordarlo, es el primero de los tres poderes que regula la Constitución Nacional, y que es el que mejor expresa, por la representación proporcional, el mapa de la voluntad de la República Argentina y el principio de la soberanía del pueblo” (…) “El art. 36 de la C.N., una de las incorporaciones más señeras de la Reforma Constitucional de 1994, establece el deber de obediencia a la supremacía de la Constitución Nacional, condenando de la forma más severa posible en el ordenamiento jurídico, los golpes de estado. Y si bien es claro cuando la usurpación del poder político se comete desde fuera de los tres poderes que conforman el Gobierno Federal bien cabe, en la interpretación constitucional, examinar cuál es la situación del deber de obediencia a la supremacía de la Constitución Nacional, cuando el quiebre del respeto y resguardo de las incumbencias de los poderes que integran el Gobierno de la Nación, es cometido desde un Poder Ejecutivo que transgrede, franca y abiertamente, los límites de sus incumbencias constitucionales, para apropiar, usurpar, las que les competen a los otros poderes; en el caso, las del Poder Legislativo de la Nación” (…) “Es un grotesco institucional la justificación que se ensaya en el DNU 27/2018: “…que encontrándose en receso el HONORABLE CONGRESO DE LA NACIÓN, el transcurso del tiempo que inevitablemente insume el trámite legislativo implicaría un importante retraso en el dictado de las normas en cuestión, lo que obstaría al cumplimiento efectivo de los objetivos presentes del Decreto…” Pareciera que la desmemoria del conjunto integrado por el Presidente de la Nación Argentina, el Jefe de Gabinete de ministros, y el conjunto de los ministros que, necesariamente, deben refrendar la firma del Presidente, lleva a que olviden que el Congreso de la Nación se encuentra en sesiones extraordinarias por lo que no existe urgencia alguna para “puentear” el trámite de debate y sanción de las leyes. Ni mucho menos habilitar que un simple decreto postergue o suspenda la vigencia de la Constitución Nacional” (…) “Además, de una primera lectura del extenso DNU, surge evidente que introduce modificaciones en normativa penal, procesal penal y tributaria, que le están expresamente vedadas al Poder Ejecutivo Nacional, bajo sanción de nulidad absoluta e insanable (art. 99, inc. 3, C.N.)” (…) “Estamos, indudablemente, ante un golpe de estado institucional, perpetrado en el momento más lábil para las instituciones de la república, y cuando el Gobierno Nacional acusa el impacto de su creciente descrédito por el debate sobre la reforma previsional, la represión ejercida sobre el pueblo de la nación, y el ineluctable fracaso del proyecto económico” (…) “Recordemos, finalmente, que el propio art. 36 de la C. N. reconoce a todos los ciudadanos el derecho de resistencia cuando se avasalla la supremacía de la Constitución Nacional”.

En su edición del 11 de enero, La Nación publicó artículos de Carlos Pagni (“Macri necesita de una alianza sindical”) y Loris Zanatta (“Nada autoriza a pisotear la ley”).

Escribió Pagni: “Este año los sindicatos tienen asegurado un gran protagonismo. No solo porque la espiral inflacionaria siempre estimula el conflicto laboral. Desde que la Casa Rosada impuso un cambio de estrategia al Banco Central, la dirigencia gremial es más determinante. Con una política monetaria menos rigurosa, los acuerdos salariales se vuelven cruciales para desacelerar la carrera de los precios. Es una mutación fundamental: si insiste en derrotar la inflación, Mauricio Macri necesita más que antes de una alianza sindical” (…) “Es una de las razones por la que se postergó a marzo el tratamiento legislativo de la reforma laboral. Pichetto, pero también los representantes del oficialismo, pretenden evitar movilizaciones incendiarias como las que se produjeron durante el debate de la actualización jubilatoria. En consecuencia, que los proyectos laborales se traten durante las sesiones ordinarias, permitiendo que las críticas se canalicen en cada comisión” (…) “De todos modos, si el oficialismo quisiera acelerar su propuesta laboral, no lo conseguiría. Hasta mediados de febrero la sufrida dirigencia sindical seguirá de veraneo. Y, cuando regrese de las vacaciones, le costará alcanzar un acuerdo. El sindicalismo está desarticulado por la desconfianza entre facciones” (…) “A estas dificultades hay que agregar un clima enrarecido. Cuando los jefes gremiales vieron a Juan Pablo “Pata” Medina fumar su exótico narguile mientras le colocaban las esposas, no se sintieron afectados” (…) “En cambio, cuando los mismos capitostes observan lo que ocurre con Marcelo Balcedo, el dirigente de Soeme capturado en Uruguay, se ven en un espejo” (…) “La UIF y la Procuración sobre Lavado de Dinero detectaron transferencias extrañas en el gremio y en la obra social. ¿Quién está a salvo? Además, Balcedo no es un electrón loco” (…) “En la CGT creen ser víctimas de operaciones de espionaje. Sospechan de la controvertida Silvia Majdalani, segunda de la AFI, a quien conocen de ida y vuelta: durante el menemismo fue interventora en la obra social del Correo” (…) “Según fuentes confiables, a comienzos de 2016 la AFI habría puesto en observación a Baradel, Omar “Caballo” Suárez, “Pata” Medina y a Andrés Stangallini, alter ego de Víctor Santa María. Nadie aclara si las investigaciones se debían a una orden judicial o si eran clandestinas” (…) “El contexto de estos sinsabores tal vez no era el mejor para que Hugo Moyano inaugurara, anteayer, su Taj Mahal. Es el nombre de fantasía que recibe entre los gremialistas el opulento Sanatorio Antártida, de Camioneros” (…) “A Moyano le cuesta normalizar su relación con el Gobierno. A pesar de que Macri volvió a ordenar que el Enacom se abstenga de suspender la licencia postal de OCA, que no cuenta con el imprescindible libre deuda de la AFIP. Para conseguirlo, Patricio Farcuh, el presunto testaferro de los Moyano en esa empresa, debería saldar un pasivo de $1200 millones” (…) “En medio de esta partida de póker con el sindicalismo, el Gobierno debe lograr que las paritarias adopten una pauta de actualización del 16%” (…) “La reforma laboral tiene otra lógica porque demanda que un sindicalismo más o menos unificado la respalde”.

Escribió Zanatta: “Hizo mucho ruido en el Vaticano y en otras partes, el caso del cardenal Maradiaga, prelado hondureño cercano colaborador del Papa. Un semanario italiano publicó una investigación según la cual habría recibido grandes sumas de dinero como director de la Universidad Católica de Tegucigalpa. Sumas que habría invertido en Londres, a través de fondos de inversión, sufriendo graves pérdidas” (…) “El Vaticano investigó los hechos por medio de una comisión dirigida por monseñor Casaretto, cuya integridad los argentinos conocen” (…) “Sobre el caso se ha armado un avispero dentro de la Iglesia dividida de nuestros días, donde cunde la sospecha de una guerra entre facciones. Para algunos es la confirmación de la doble moral de la Iglesia Católica, que predica la pobreza mientras maneja dinero; para otros y para el mismo Maradiaga, es una calumnia para desacreditar al Papa” (…) “Como devoto que soy del Estado de Derecho, desconfío de los juicios a través de la prensa y creo solo en las sentencias de los tribunales independientes. Hasta entonces, el acusado es inocente. Por lo tanto, la historia del cardenal Maradiaga…me interesa bajo otro aspecto: el de la relación entre política y moral, poder y dinero, medios y fines; entre los recursos que los ciudadanos confían a la gestión del Estado para el bien común y el uso que el Estado hace de ellos” (…) “Pero los países latinos a menudo tienen con el dinero una relación enferma: sirve, pero lo despreciamos, lo buscamos pero nos avergonzamos; es el estiércol del diablo: el dinero corrompe. De ahí que su posesión y su uso estén usualmente enmascarados por valores morales supremos, ideologías salvadoras y redentoras: hacemos el bien, alimentamos al hambriento” (…) “Así, de hecho, se defiende el cardenal: no es dinero suyo, sino de la universidad, que hoy tiene once campus; un coloso, sin dudas. Yo no encontraría nada malo si realmente hubiera invertido esos fondos en una financiera en Londres, siempre que lo hiciera bien: al menos habrían rendido y sus obras se habrían beneficiado” (…) “El punto es establecer si es correcta, si es el resultado de una elección libre, oportuna y transparente, la enorme financiación que un Estado pobre como el hondureño le brinda a las obras del famoso cardenal; si sus fines tan nobles se han o no servido de medios dudosos: relaciones de poder, presiones morales, peso corporativo de la Iglesia” (…) “Se da así el caso de que, mientras en otros lugares quien abusa del dinero público es considerado un delincuente, en el mundo latino se lo considera un Robin Hood, adorado por la multitud y autorizado a pisotear la ley. La señora de Kirchner invocaba al “pueblo” para compensar la fidelidad de sus fieles con el dinero de todos. Los medios ilegales del gobierno de Lula les parecieron tolerables a muchos por sus altos propósitos morales” (…) “En estos y en otros casos, la nobleza de los fines sólo sirvió para ennoblecer medios innobles. Ojalá Dios o quien sea nos libre de tales guías morales y de sus devotos: no serán los ideales en los que, como Narciso, se reflejan los que aliviarán nuestras plagas sociales. Si de verdad esto es lo que desean, comiencen por respetar la ley: siempre será el mejor medio para lograr un buen fin”.

En su edición del 10 de enero, Página/12 publicó artículos de Federico Kucher (“Desafío de Sturzenegger a la voluntad de Peña”) y Hugo Muleiro (“Banderas y Banderías”).

Escribió Kucher: “El Banco Central decidió reducir ayer en 0,75 puntos la tasa de interés de referencia. De este modo, la ubicó en 28 por ciento anual. La caída no alcanza a compensar la suba de 2 puntos de principio de noviembre. El anuncio de la autoridad monetaria era uno de los elementos más esperados ayer en el mercado. Se descontaba una caída de la tasa pero el gran interrogante era en cuánto. En la city consideraron que la caída no fue importante y frenaron las presiones sobre el dólar, a la vez la evaluación política fue que el titular del BCRA, Federico Sturzenegger, desafió con esa medida al jefe de gabinete, Marcos Peña” (…) “El argumento del BCRA para esa decisión fue que hubo un cambio de las metas de inflación para 2018, que pasó de 10 a 15 por ciento, tras una orden del Poder Ejecutivo que puso en jaque la independencia de la entidad. “En la última semana de 2017 se anunció el diferimiento de la meta de inflación de largo plazo (5 por ciento anual) al año 2020, y nuevas metas intermedias de 15 por ciento para 2018 y 10 por ciento para 2019. Ese sendero es ahora el nuevo objetivo de la política monetaria del Banco Central”, detalló el organismo. Agregó que “naturalmente si se busca una menor velocidad de desinflación que la planeada originalmente, corresponde un sendero de la política monetaria menos contractivo que el que antes se preveía” (…) “En el comunicado, el Central intentó mostrar que conserva cierta independencia. Aseguraron que “la moderación en el sesgo sólo podrá sostenerse en el tiempo en la medida en que la evolución de la desinflación sea compatible con la trayectoria buscada”. El Central fue presionado a bajar la tasa de interés tras haber fallado en su estrategia monetaria para disminuir los precios” (…) “Otro de los puntos es que entre los economistas del Gobierno consideran que seguir presionando en términos reales el dólar, debido a las tasas altas, ya no era sostenible para la economía. Sturzenegger mostró ayer que no coincide con esa interpretación y desafió con una leve baja de la tasa” (…) “Sturzenegger además intentó mostrar fortaleza, indicando en el comunicado que negoció con el tesoro un menor nivel de asistencia financiera para los próximos años. “Las transferencias del Banco Central al sector público se reducen en términos nominales en 2019 a la mitad respecto de lo establecido para 2018. Para los años siguientes está definida una regla automática no vinculada a la tasa de inflación sino al crecimiento real de la demanda de dinero”. Pero es muy difícil explicar la situación del Central, que hasta hace unos días insistía con que la tasa no podía bajar para no afectar las posibilidades de “desinflar” la economía este año. El gap de credibilidad, lo sabe cualquier banquero central del mundo, es complicado de remontar”.

Escribió Muleiro: “Las tensiones que es sencillo anticipar para 2018, dada la regresión profunda que el macrismo está imponiendo en la distribución del ingreso nacional, tendrán su correlato en ámbitos muy diversos. Entre ellos estará la disputa por el uso del espacio público y la forma en que es nombrada y relatada” (…) “Hubo ya un anticipo significativo en diciembre…Quedaron entonces en primer plano las consecuencias del operativo de bloqueo a la sede legislativa, con un despliegue descomunal de fuerzas represivas que el jueves 14 y el lunes 18 cometieron toda clase de vulneraciones a derechos elementales. En parte se sirvieron de una muy calculada hostilidad de aparentes manifestantes que durante horas tuvieron todas las facilidades imaginables para que, a los ojos de las audiencias televisivas, algunos grupos de agentes policiales quedaran como víctimas indefensas de una violencia que dio justificación a la persecución indiscriminada que siguió hasta la noche” (…) “Estos mensajes políticos de primer plano, rotundos, fueron sucedidos por otros menos alevosos, algo más sutiles, pero inscriptos en las mismas tensiones. Así como la imagen de la multitud que se movilizó el lunes 18 fue censurada por el conjunto del sistema mediático que sostiene al macrismo, las protestas que siguieron esa noche, y en jornadas posteriores, expresadas en cacerolazos, fueron llevadas a los márgenes del paquete “informativo”, por la fugacidad de las coberturas y los espacios totalmente secundarios otorgados” (…) “El dispositivo que controla, al servicio del gobierno, gran parte de la información y la opinión que circula en el país, encontraba entonces la dificultad de dar espacio a unas protestas que no podía tachar de violentas, ni atribuirlas a partidos políticos, ni a organizaciones sociales, ni a los tan denostados “piqueteros”. Problema de tanta magnitud que, en su mayor parte, estos medios resolvieron primero ignorar esas manifestaciones y luego, en el mejor de los casos, minimizarlas, así como lo hicieron los diarios oficialistas Clarín y La Nación” (…) “Así, en la noche del 18 y sucesivas, insistieron algunos cronistas en decir: “Aquí hay familias, hay chicos, hay personas mayores, vecinos que vienen sin banderas políticas”. Enunciado sencillo, dicho al paso, tal vez sin pensarlo mucho, en el siempre difícil quehacer del “movilero”, pero que deja a la vista una marca de época, se diría expresión del triunfo de la cultura política del macrismo: la condena implícita a los organizados, a los que participan de estructuras políticas y sociales, a los que exponen banderas con las que exponen orgullosamente su pertenencia y usan su libertad de adoptar una postura ante los asuntos del atribulado país” (…) “Acaso por mera resonancia, por herencia, por haberlo mamado de los discursos imperantes, se filtraba incluso en este discursear la palabra “banderías”, más sospechosa, desviación o degradación sutil de aquella otra que puede tener en ocasiones un uso no criticable, banderas, ya que incluye a las inmaculadas celestes y blancas. Es una derrota. Impera una voz sin rostro visible que va contra el colectivismo, la organización popular, la participación” (…) “Las banderas políticas pueden ser malas u objetables. O mucha gente cree que lo son, porque así lo viene escuchando desde mediados de los 80. Y ni qué decir de banderías”.

En su edición del 10 de enero, La Nación publicó un artículo de Morales Solá titulado “Un favor de Sturzenegger a Macri”. Escribió el autor: “Tal vez Federico Sturzenegger, presidente del Banco Central, haya hecho más de lo que cree por el gobierno de Mauricio Macri. En la disputa ya casi teológica entre metas de inflación y metas de crecimiento que se da dentro de la administración, la autoridad monetaria decidió mantener altas las tasas de interés. Es cierto que teóricamente las altas tasas de interés pueden enfriar la economía, pero la opción era peor: un nuevo salto del precio del dólar hubiera provocado otro aumento de la inflación” (…) “De paso, Sturzenegger dio una prueba de independencia, un gesto que le hacía falta desde que apareció en una conferencia de prensa junto con el jefe de Gabinete y los ministros de Hacienda y Finanzas. Aquella vez, hace doce días, se cambiaron las metas de inflación para 2018 y muchos analistas políticos y económicos entendieron que se había producido un significativo cambio en la política económica” (…) “¿Sucedió realmente un cambio drástico de la política económica? Una dosis de realismo no es un cambio. ¿Quién podía creer que en un año, y con políticas gradualistas, la inflación bajaría 14 puntos, del 24 por ciento real de 2017 al 10 por ciento que preveían para 2018? Nadie” (…) “Cuando las variables económicas son tan frágiles, la decisión más modesta puede empeorar cualquier problema. Una baja abrupta de las tasas de interés, que era lo que preveía el mercado financiero, hubiera transferido muchos pesos a dólares. Una mayor demanda hubiera, a su vez, espoleado el precio del dólar, y el aumento de este habría alentado índices más altos de inflación” (…) “En poco más de diez días, las metas volvieron a ser las de inflación. Pero esto tampoco tiene por qué ser una buena noticia. Una baja pronunciada del dólar…complicaría aún más a las exportaciones de las economías regionales, que registran serios problemas con un dólar subvaluado hasta hace muy poco tiempo” (…) “En el garabato inicial de las nuevas metas de inflación pareció ganar el equipo político y económico sobre la autoridad monetaria. Más precisamente, habían ganado el jefe de Gabinete, Marcos Peña; el vicejefe, Mario Quintana; el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y el Ministro de Finanzas, Luis Caputo. Pero la decisión de ayer de Sturzenegger restablece cierto equilibrio en la relación de fuerzas internas del gobierno” (…) “¿Puede Macri adoptar una política de dura contención del gasto público? Tiene límites muy rígidos, aunque parezca un político que lo puede todo después del triunfo electoral de octubre” (…) “Sturzenegger eligió ayer el riesgo para no alentar más las expectativas inflacionarias. La inflación es también un elemento que debilita a los presidentes y que afecta a todos los sectores sociales, pero sobre todo a los más vulnerables” (…) “Un elemento no menor para la necesidad de contener la inflación es el inminente comienzo del período de paritarias” (…) “Solo la tardía acción judicial contra algunos dirigentes sindicales podría serenar el ímpetu sindical en materia de aumentos salariales. El mejor remedio sería mostrarles índices inflacionarios mejores que los que hubo en los últimos tiempos. Ese es uno de los favores que, quizá, le hizo Sturzenegger a Macri cuando ayer se mantuvo en la senda de la ortodoxia en un mundo de tímidos keynesianos”.

En su edición del 9 de enero, Página/12 publicó artículos de Tomás Lukín (“Salarios depreciados, dos años después”) y Adriana Meyer (“Maldonado, Malvinas y las cárceles”).

Escribió Lukín: “La remontada de los salarios frente a la inflación que prometió en agosto pasado el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, no se concretó. El funcionario anticipó en agosto pasado una “goleada” para los ingresos laborales. Los datos hasta noviembre muestran una recuperación de 2,3 por ciento frente al mismo período del año anterior. La tímida mejora es, sin embargo, insuficiente para revertir la retracción experimentada durante el primer año de gestión, cuando los ingresos de los trabajadores registrados cayeron 5,3 por ciento. Las estimaciones del Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET) de la UMET arrojan que la capacidad de compra de los salarios en noviembre fue 4,2 por ciento inferior a la observada en el momento previo al recambio presidencial. A lo largo de los últimos veinticinco meses los trabajadores perdieron así una suma equivalente a 1,44 salarios. Para recomponer el poder adquisitivo cedido en ese lapso, un asalariado que gana 20.000 debería recibir un bono de 28.800 pesos por única vez” (…) “Durante una entrevista con radio Mitre, Dujovne recurrió a las estadísticas oficiales para anticipar una vigorosa mejora en los ingresos de los trabajadores durante 2017. “Los números del Indec de mayo dicen que los salarios promedio crecen 29,9 por ciento interanual. En ese momento, la inflación era 24 por ciento. Es decir que teníamos un crecimiento del salario real de casi 6 por ciento. En junio ese número va a ser 8 por ciento”, afirmó el funcionario cuya imprecisa aritmética exageraba la mejora. La estimación del economista surgía de la resta entre la suba interanual de los salarios nominales y la tasa de inflación anualizada: 29,9 por ciento menos 24 por ciento. O sea, un incremento de 5,9 puntos porcentuales que representaban una suba del poder adquisitivo de 4,8 por ciento en mayo contra el mismo mes de 2016” (…) “Pero con el paso de los meses la recuperación perdió fuerza. Con las mismas fuentes utilizadas por el funcionario, los salarios arrojaban en octubre una mejora interanual de 4,5 por ciento y en los primeros diez meses registraban una suba promedio de 4,1 por ciento frente al mismo período del año anterior. El desempeño salarial no llegó a una goleada como prometió Dujovne pero ofreció un impulso para la tímida reactivación económica observada en 2017. Sin embargo, la mejora estadística en el nivel de actividad no fue acompañada por un proceso de creación de empleo que permitiera recomponer los puestos perdidos durante la recesión” (…) “Desde el Centro de Estudios del Trabajo y el Desarrollo (Cetyd) de la Unsam explicaron a este diario que “el crecimiento del salario debe ser adecuadamente contextualizado considerando que el año con que se compara es 2016, cuando la capacidad de compra de las remuneraciones se había reducido sensiblemente como resultado de la aceleración inflacionaria. En efecto, durante ese año el poder adquisitivo del salario medio se contrajo en algo más de un 6 por ciento, siendo la mayor reducción de la remuneración real promedio de los últimos 14 años”. La escalada de 2,4 por ciento en diciembre en el Indice de Precios de los Trabajadores elaborado por el IET-UMET permite estimar que la finalizar el año pasado el salario real formal era 4,2 por ciento inferior al mes previo al recambio presidencial”.

Escribió Meyer: “El caso Maldonado mostró la brutalidad de la represión en su máxima expresión, y ese accionar ilegal fue ordenado y dirigido por las más altas autoridades del Ministerio de Seguridad, incluso la ministra Bullrich justificó y avaló todo lo actuado, llegando ascender al gendarme imputado en la causa, es decir fue una decisión política, un plan estatal, destinado a defender desde el estado los intereses de los más poderosos por sobre los intereses de un grupo vulnerable como es la comunidad mapuche”, dijo a Página/12 Roberto Cipriano García, secretario de la Comisión Provincial por la Memoria, consultado sobre la desaparición y muerte del joven mochilero y tatuador” (…) “La comisión es un organismo público de la provincia de Buenos Aires, autónomo y autárquico, que promueve e implementa políticas de derechos humanos. Fue creada en 1999 por resolución de la Cámara de Diputados, desde marzo de 2001 tiene como sede el edificio donde funcionó la Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires (Dippba) y gestiona el archivo que registra el espionaje realizado por esta dependencia durante más de 50 años” (…) “En cuanto a las situaciones de encierro y violencia institucional, la CPM determinó que empeoró el “sistema de la crueldad” :16.403 hechos de tortura y malos tratos padecidos por 3.054 víctimas, 42.800 personas detenidas a noviembre de 2017, 90% de sobrepoblación en el Sistema Penitenciario Bonaerense (SPB), sobrepoblación en comisarías reflejada en 3.010 detenidos de los cuales sólo 1.039 tienen camastro, 385 muertes de personas bajo custodia del estado o víctimas del uso letal de la fuerza pública. Este monitoreo es realizado bajo los requisitos del Protocolo Facultativo de la Convención Contra la Tortura de la ONU que lo convierten, de hecho, en el mecanismo local de prevención de la tortura” (…) “Otro hecho relevante fue el inicio del juicio a funcionarios y agentes del Servicio Penitenciario Bonaerense por su responsabilidad en una de las masacres más graves de la historia del encierro bonaerense, ocurrida el 16 de octubre de 2005 en el penal de Magdalena. La CPM, el CELS y el CIAJ patrocinan a familias de las víctimas. Aquel día 33 personas privadas de su libertad murieron asfixiadas y quemadas en el incendio en el pabellón 16 de la Unidad Penal 28. El personal del SPB había ingresado al pabellón con escopetas con munición antitumulto como respuesta a una discusión entre dos internos. Los agentes dispararon balas de goma a quemarropa, golpearon a los detenidos que se tiraban al piso y lanzaron a los perros. Una vez iniciado el fuego encerraron a los detenidos en el pabellón en llamas y reprimieron a quienes querían socorrerlos” (…) “Además, a partir de una presentación de la CPM el Ministerio de Salud bonaerense ordenó el cierre del instituto de rehabilitación San Camilo, donde habían verificado la existencia de torturas y tratos crueles, inhumanos y degradantes contra 60 jóvenes y adultos con padecimiento mental y uso problemático de sustancias” (…) “En diálogo con Página/12, Cipriano García explicó que para concretar su plan, el gobierno “construyó la idea del terrorismo mapuche internacional, una invención sin asidero que pretende justificar la violencia institucional y la idea de resolución del conflicto social mediante la represión y no mediante el diálogo democrático”. En tal sentido, el poder judicial no sería ajeno para tal objetivo. “Fue parte de esa trama avalando el accionar del gobierno, como lo es siempre en los casos de gatillo fácil o torturas. Y luego de Santiago asesinaron por la espalda a Rafael Nahuel, un joven mapuche que reclamaba por tierras ancestrales. Sin dudas estos casos son claras señales del sesgo represivo y autoritario de este gobierno”.

En su edición del 9 de enero, La Nación publicó artículos de Fernando Laborda (“El gobierno de Macri busca revertir la “mala onda”) y Martín Kanenguiser (“El control de los precios, entre los desafíos más urgentes del Presidente”).

Escribió Laborda: “La imagen del presidente Mauricio Macri y de su gestión de gobierno sufrió en las últimas semanas de 2017 una de las mayores caídas desde su llegada al poder en diciembre de 2015. Esa baja, de aproximadamente ocho puntos, no ha sido la única mala noticia: en la ciudad de Buenos Aires, la tensión social también experimentó una importante suba durante el año pasado, si se mide por la cantidad de protestas callejeras” (…) “Aunque buena parte del gabinete permanece de vacaciones, el oficialismo ya inició una campaña para revertir la “mala onda” derivada de los hechos que tuvieron en vilo a la ciudadanía poco antes de las fiestas de fin de año. La primera acción ha sido el anuncio de que, desde mañana mismo, cuando empiecen a abonarse las jubilaciones, más de 1,3 millones de jubilados que se retiraron con 30 años de aportes recibirán en sus haberes un incremento promedio de 528 pesos, a modo de diferencia que les permitirá llegar al 82% del nuevo salario mínimo, vital y móvil, que ha subido a 9500 pesos” (…) “Lo relevante en términos políticos de este anuncio es que tal aumento jubilatorio del orden del 7% es resultado de la propia ley previsional que fuera tan cuestionada por la oposición” (…) “De este modo, el gobierno buscará compensar las innumerables críticas que recibió la reforma jubilatoria a partir de la aplicación de una nueva fórmula para el cálculo de los ajustes en los haberes, que si bien permitirá aumentos levemente por encima de la inflación, al menos en lo inmediato no será tan beneficiosa para los jubilados como lo hubiera sido la antigua fórmula, basada en un mix dado por el aumento de la recaudación de la Anses y el incremento de los salarios” (…) “La “recalibración” de las metas inflacionarias, que de una banda prevista del 10 al 12% para 2018 pasaron a un objetivo mucho más moderado, del 15% anual, sugirió un convencimiento por parte del gobierno de que es preferible mantener cierto nivel de actividad económica, aun a costa de una inflación algo más alta. La duda de no pocos economistas es si las empresas estarán dispuestas a arriesgar e invertir más y si, en definitiva, la economía argentina crecerá más cuando se admite que la inflación será mayor”.

Escribió Kanenguiser: “El Gobierno se siente cómodo con la nueva meta de inflación del 15 por ciento fijada para este año y cree que los grandes sindicatos no negociarán acuerdos paritarios muy por encima de esa cifra” (…) “Ahora sostienen que este nuevo objetivo del 15% está más cerca de la realidad, aunque las consultoras privadas entienden que la suba de los precios estará más cerca del 18-20% anual. Pero si, como pretende el gobierno, el Banco Central empieza desde hoy a bajar las tasas de interés…ese movimiento se traducirá en una mayor devaluación” (…) “Esa devaluación es deseada por las autoridades económicas porque es clave para que las exportaciones y las inversiones crezcan, pero, a la vez, contiene un riesgo de traslado a precios. Para asegurarse de que los gremios no pidan un aumento superior al 16%, la tarea más importante del equipo económico es que no haya un traspaso de la devaluación a los precios minoristas” (…) “En este juego de expectativas los próximos datos serán muy importantes: ya se sabe que la inflación de diciembre se ubicó en torno del 3% (de los cuales 1,7 puntos los aportó la suba de las tarifas) y prenden las velas para que la de enero, sin aumentos tarifarios, se ubique por debajo del 2%” (…) “A la vez, el gobierno…quiere preservar también el nivel de crecimiento económico. Es decir, bajar la inflación (del 24% de 2017 al 15-17% de 2018) y mantener, por segundo año consecutivo, el rebote del PBI en torno del 3,5%” (…) “Si lo logra, habrá roto la maldición de los últimos años que indicaba que año de por medio la Argentina entraba en recesión” (…) “Claro que la Argentina sigue estando en el triste club de los países con más inflación en todo el mundo y no podrá abandonarlo rápidamente. Pero la apuesta oficial de mediano plazo es que el déficit fiscal vaya bajando-con metas del 4% del PBI en 2017, 3,2% en 2018 y 2,2% en 2019-para moderar el nivel de emisión monetaria y, así, lograr una inflación de un dígito en un eventual segundo mandato de Macri”.

En su edición del 8 de enero, Página/12 publicó un artículo de Tomás Lukin titulado “Una mochila cada vez más pesada”.

Escribió el autor: “En los dos primeros años del gobierno de Mauricio Macri, las emisiones de deuda en moneda local y extranjera totalizaron 121.588 millones de dólares. De ese total, sólo el tesoro Nacional emitió 98.185 millones de dólares. A su vez, del conjunto de la deuda emitida durante la administración actual, 85.167 millones fueron títulos en dólares en poder de acreedores externos. Cuando a esos 85.167 millones se suman los 10.862 millones de dólares que llegaron como inversiones de portafolio para aprovechar la amplia y bien señalizada bicisenda financiera, la cifra global asciende hasta los 96.029 millones de dólares. El último informe del Observatorio de la Deuda Externa de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (ODE-UMET) estimó que 84 de cada 100 dólares fueron destinados para abastecer la fuga de capitales, financiar la remisión de utilidades y dividendos de las firmas extranjeras, cubrir la demanda de dólares para turismo y cancelar los vencimientos de deuda” (…) “El financiamiento externo no fue destinado a inducir cambios sobre la estructura productiva que permitan una mayor generación de divisas a través de la economía real, sino a financiar la fiesta que genera la enorme bicicleta financiera creada por el gobierno nacional. El modelo así presentado no resulta sostenible en el tiempo”, sostiene el noveno informe del ODE- UMET” (…) “Durante 2017 la deuda externa fue el respirador artificial del modelo. Argentina consolidó una posición de fuerte tomador de fondos externos y apareció el déficit comercial que es con la fuga de capitales el agujero negro del proyecto de Cambiemos”, afirmó el rector de la UMET, Nicolás Trotta. Si se suman los 34.216 millones de dólares emitidos en 2016, el monto total asciende hasta los 98.185 millones de dólares. La cifra computa colocaciones de títulos públicos en moneda extranjera, bonos en pesos y letras en dólares sin distinguir entre tenedores locales y extranjeros” (…) “Pero el desmantelamiento de las regulaciones cambiarias, la liberalización de los movimientos de capitales, el pago a los fondos buitre, el acercamiento a los organismos multilaterales y la elevada rentabilidad ofrecida por los bonos no solo facilitaron las operaciones diseñadas por el ministerio de Finanzas sino que aceitaron las emisiones provinciales y corporativas en moneda extranjera” (…) “La contraparte de ese proceso no fue la inversión en infraestructura ni el financiamiento de proyectos industriales estratégicos. El Banco Central acumuló una porción de esos dólares en las reservas internacionales pero el grueso fue destinado a cubrir los desequilibrios en la cuenta corriente y la cuenta financiera. “La fuga de capitales alimentada por la política económica vuelven inviable el funcionamiento de la economía en el mediano plazo. Pero resulta muy serio el emergente de un déficit comercial externo que con crudeza hacen que este modelo no tenga ninguna sustentabilidad y permite afirmar la enorme fragilidad que exhibe”, indicó el director de ODE, Arnaldo Bocco” (…) “Este modelo deja a la Argentina en una situación de extrema vulnerabilidad ante un revés en las condiciones de financiamiento en los mercados internacionales”, indica el informe al concluir que “un desajuste que afecte el sector externo tendrá inevitablemente un impacto en el tipo de cambio y, dada la estructura económica y distributiva diseñada por la gestión actual, terminará impactando de manera más severa sobre los sectores populares, quienes han sido los únicos afectados por las medidas del gobierno de Cambiemos”.

Escribió el autor: “A las necesidades de financiamiento que demandan el creciente déficit de la cuenta corriente y la fuga de divisas, se le suman también que el Gobierno necesitará hacerse de divisas para financiar vencimientos de capital e intereses por 32.292 millones de dólares. La tarea comenzó el jueves pasado cuando para aprovechar una reducción generalizada en el riesgo país, el Ministerio de Finanzas que encabeza Luis Caputo emitió tres títulos a 5, 10 y 30 años por una suma total de 9000 millones de dólares. En ausencia de fuentes genuinas de divisas, “boom exportador” o “lluvia de inversiones”, que permitan abastecer las necesidades de dólares del esquema económico vigente, la colocación de deuda no se interrumpirá” (…) “Los vencimientos previstos para este año son los más elevados del período comprendido entre 2017 y 2047. El Informe de la Deuda Externa del ODE-UMET indica que, a lo largo de los próximos doce meses, deberán cancelarse 9019 millones de dólares de intereses, 7.555 millones en concepto de capital y 15.718 millones de dólares por los vencimientos de Letras del Tesoro en dólares. Desde el observatorio dirigido por el economista Arnaldo Bocco estiman que el 61,7 por ciento de los vencimientos corresponden a “nueva deuda” que fue emitida a lo largo de los últimos dos años” (…) “De hecho, el ciclo de endeudamiento iniciado por la gestión de Cambiemos ya representa alrededor del 40 por ciento del total de vencimiento de la deuda pública hasta 2047. “Si se considera la gestión de Cambiemos en su totalidad y según cálculos propios sólo aproximadamente el 41,36 por ciento de las nuevas emisiones de títulos públicos del Tesoro en moneda extranjera han sido destinadas al pago de vencimientos de capital e intereses de la “deuda heredada”, habiéndose incluso destinado un 5,36 por ciento de dichas emisiones al pago de vencimientos de interés de “deuda nueva” contraída por el propio gobierno de Cambiemos. El restante 53,28 por ciento de las emisiones se ha destinado a cubrir la fuga de capitales y financiar gastos corrientes”, explican los investigadores del observatorio” (…) “Desde la perspectiva del ODE-UMET, el actual modelo económico caracterizado por déficit fiscal, déficit de cuenta corriente con resultado comercial negativo, fuga de divisas y fuertes vencimientos de capital e interés para los próximos años, “no es sostenible en el largo plazo”. A esos elementos, los investigadores suman “los vencimientos de muy corto plazo de Lebac en pesos para los próximos años” (…) “El problema que se le ha generado al BCRA es que el creciente stock de Lebac que está próximo a vencer pone en riesgo la sostenibilidad del sistema financiero: ante cada vencimiento de Lebac, que llega a representar el equivalente a más del 50 por ciento de la base monetaria, la entidad se enfrenta al riesgo de no lograr renovar todos los vencimientos a menos que siga subiendo la tasa de interés. Se estima que el stock total a vender para 2018 es nada menos que de 1,1 billones de pesos”, sostienen desde el ODE-UMET para advertir que “si no lograse refinanciar en el tiempo su deuda en pesos, esto podría desencadenar una severa corrida bancaria”.

En su edición del 8 de enero, La Nación publicó artículos de Marita Carballo (“Los argentinos empiezan el año con optimismo y a la espera de soluciones”) y Sergio Suppo (“Al peronismo no lo une el amor ni el espanto por la división”).

Escribió Carballo: “Esta época del año es propicia para balances y reflexiones sobre nuestras vidas y sobre nuestro país” (…) “Para ello, las encuestas, aun con sus limitaciones, son muy útiles ya que nos permiten escuchar la voz de los ciudadanos y responder a estos interrogantes” (…) “Un estudio global “think tank” norteamericano PEW que incluye la Argentina nos muestra que en nuestro país la mayoría (51%) piensa que estamos peor que hace 50 años mientras que un 21% sostiene que estamos igual y solo un 23% que estamos mejor que entonces” (…) “Al analizar los datos duros de las estadísticas comprobamos que efectivamente si nos referimos a indicadores económicos y sociales hemos retrocedido en las últimas décadas. En 1974, cuando se comenzó a medir, la pobreza en el país era del 4%; al inicio de la democracia, cuando asumió Alfonsín en 1983, era del 16% y hoy el 33% son pobres. La informalidad en el empleo era de 22% en 1983 y hoy ronda el 30%. Señalo estos dos indicadores como ejemplo porque considero que son de sustancial importancia en la construcción de una sociedad justa e integrada” (…) “Llevamos 34 años de democracia con alternancia en el poder y contamos con un sistema político que, aunque con problemas pese a la baja credibilidad en sus instituciones, se va consolidando” (…) “En cuanto al presente, las opiniones de los argentinos se han visto reflejadas en los resultados electorales de medio término, donde la población ha dado al gobierno de Macri un voto de confianza y también en las encuestas. El sondeo anual de fin de año en el que participamos desde 1983 y que fue iniciado por George Gallup en 1977, muestra a los argentinos más optimistas y esperanzados que el promedio mundial en relación con sus expectativas para 2018” (…) “Interesa destacar que, a diferencia de lo que pasa en el mundo, en general los argentinos estamos más optimistas que hace un año y 12 puntos por encima del promedio global con 51%, pensando que en general 2018 va a ser mejor, un 22% que será similar y un 21% que será peor que 2017. En todos los segmentos demográficos predominan en nuestro país las respuestas positivas sobre las negativas” (…) “Al referirnos específicamente al futuro del país en el plano económico, los argentinos tienen opiniones más divididas acerca de las proyecciones para 2018. Aun así, en este punto somos también más positivos que el promedio mundial (donde el 28% es optimista) y que el promedio de los países del G-20 (25%). El 34% de la población en la Argentina manifiesta que este año será de mejoría económica, el 24% vaticina un año de mayores dificultades y un 38% no espera cambios. Los resultados son muy similares a los obtenidos el año pasado y más pesimistas que en 2015, año signado por las elecciones presidenciales, donde las perspectivas eran significativamente más positivas en todos los planos. Son fundamentalmente los sectores más bajos y los jóvenes quienes están más preocupados y menos esperanzados sobre todo en la reducción de la inflación y el desempleo” (…) “Los principales problemas del país para la población hoy son la pobreza, el temor al desempleo y la inseguridad. Se reconoce al gobierno una buena gestión contra el narcotráfico, la política exterior de estrechar relaciones con el mundo y la lucha contra la corrupción. Y se esperan mejores resultados en temas económicos y sociales, como el combate contra la pobreza, la creación de puestos de trabajo y el control de la inflación” (…) “Este análisis permite concluir que existe una asociación entre los resultados de las elecciones legislativas y las expectativas. Los datos históricos muestran que las expectativas aumentan cuando se ha ganado la elección legislativa del segundo año. Puesto en este contexto, Macri se encuentra al cumplir dos años de gobierno, en análoga situación a las de Alfonsín, Menem en su primer mandato y Néstor Kirchner”.

Escribió Suppo: “En su primer viaje por el peronismo como nuevo jefe del PJ bonaerense, Gustavo Menéndez comprobó que a su partido no lo une el amor, pero tampoco el borgeano espanto de seguir lejos del poder por muchos años. El intendente de Merlo, uno de los distritos más pobres del conurbano bonaerense que el justicialismo gobierna desde 1983, intenta reconstruir, pedazo a pedazo, las fracciones dispersas de una estructura que viene de una triple derrota frente a Cambiemos: perdió Cristina Kirchner (Unidad Ciudadana); perdió Sergio Massa (el Frente Renovador), y perdió Florencio Randazzo (con el sello del PJ propiamente dicho). Juntos era imposible, separados resultó otra catástrofe para el partido que alguna vez fue hegemonía” (…) “Menéndez salió de su feudo para reunirse con unos y con otros y comprobar, por si le hiciera falta, que la reconstrucción del peronismo puede ser resumida como un parte médico: grave, con pronóstico reservado” (…) “En la provincia de Buenos Aires, donde la coexistencia del peronismo clásico con el kirchnerismo es más intensa y por lo tanto fuertemente compleja e inestable, la grieta más profunda pasa por la mirada sobre el gobierno de Mauricio Macri. “Es muy difícil hablar con gente que a los cinco minutos dice que, para recuperarnos, Macri se tiene que ir antes de terminar su mandato”, explica uno de los interlocutores de Menéndez, en referencia a los hombres de la expresidenta” (…) “Pero Menéndez ya se desmarcó del kirchnerismo puro para tratar de achicar la dispersión de una fuerza convertida en un archipiélago sin puentes” (…) “No es casual que Sergio Massa, luego de verse con Menéndez, haya dicho que pretende un peronismo que haga “una oposición inteligente, no destituyente” y rechazado por completo la oferta que éste le hizo para que se reuniera con Cristina” (…) “Dirigentes kirchneristas como Agustín Rossi encuentran que la radicalización de su sector es un pasaporte a la nada política” (…) “Qué hacer ante el gobierno de Macri es uno de los dilemas que seguirá teniendo respuestas múltiples desde la oposición y que impedirá, todavía por un buen tiempo, encontrar un camino común en el peronismo” (…) “Sus dirigentes, todos sus dirigentes, imaginan que Macri les sacó una clara ventaja para lograr su reelección y que desde esa posición de fuerza avanzará sobre sus territorios. Ese temor resuena con especial intensidad en el conurbano, del que salió Menéndez con la receta de la unidad en reemplazo del frustrado plan kirchneristas de una lista propia excluyente que saltó por sobre la frontera de las formas partidarias” (…) “En el interior del país, el 2019 también se anticipó. Los gobernadores amigos pasarán a ser rivales de Macri obligados a defender sus territorios. El senador Miguel Pichetto, su delegado más eficaz en Buenos Aires, avisó que el peronismo endurecerá su discurso en el Congreso” (…) “Distantes de las gestiones de Menéndez, sin un kirchnerismo tan presente como en la provincia de Buenos Aires, en el interior las preocupaciones son las mismas. El camino del regreso peronista se parece más a un laberinto de Borges. Un dilema casi literario”.

En su edición del 8 de enero, Clarín publicó un artículo de Guillermo Lousteau Heguy titulado “Libre expresión y corrección política”. Escribió el autor: “La libertad de expresión, central para la supervivencia de una sociedad libre, está en dificultades. El episodio de la revista Charlie Hebdo mostró la existencia de un doble standard en materia de libertad de expresión. Mientras la opinión pública defendía el derecho irrestricto de la revista a expresarse, aunque fuera en forma ofensiva, el gobierno francés persiguió por “apología del delito” a quienes defendieron a los autores del atentado” (…) “Esto presenta una doble faceta: en ciertos casos se defiende el ejercicio irrestricto de la libertad de expresión y por el otro se reprimen otras expresiones, limitando esa libertad, como expresiones de odio, racismo o discriminación, que conforma lo “políticamente correcto” (…) “Dos hechos actuales revitalizan el problema (el enfrentamiento entre la libertad de expresión contra la corrección política). La Corte Suprema de los Estados Unidos fallará en los próximos meses, en el caso “Masterpiece Cakeshop vs Colorado Civil Rights Comisión”: Jack Phillips, dueño de Masterpiece Cake, se niega a elaborar una torta de boda para un casamiento entre dos personas del mismo sexo, alegando sus convicciones religiosas y su derecho a expresar su opinión, con su negativa” (…) “Otro hecho importante resulta de una investigación realizada por el Cato Institute, el think tank de Washington, sobre el estado de la libertad de expresión y la tolerancia en los Estados Unidos. La encuesta ofrece una gran cantidad de información sobre el tema. Muestra que el 71% de los norteamericanos cree que la corrección política ha silenciado discusiones importantes que la sociedad debiera tener” (…) “Desde el punto de vista personal opinan que el clima político les impide decir cosas en las que creen. Por supuesto, las diferencias más claras surgen entre las opiniones de los demócratas y los republicanos. Los demócratas (53%) no sienten la necesidad de autocensurarse, mientras que el 73% de los republicanos y el 85% de los independientes manifiestan no expresar sus opiniones. La mayoría se opone a las expresiones de odio, porque las considera moralmente inaceptables, pero el 82% dice que no es fácil prohibirlas, ya que no hay acuerdo en qué expresiones pueden ser de odio u ofensivas. El 58% piensa que debiera ser permitido expresar opiniones impopulares en público, aunque sean fuertemente ofensivas para otra gente, mientras el 40% cree que el gobierno debiera prohibirlas” (…) “Una parte importante del estudio se refiere a la universidad. Dos tercios de los americanos manifiestan que las universidades no están haciendo lo suficiente para enseñar el valor de la libertad, que los estudiantes deben ser expuestos a todos los puntos de vista, aunque sean ofensivos o desacertados con respecto a ciertos grupos. Solo una minoría cree que las universidades deben prohibir manifestaciones ofensivas o inexactas sobre ciertos grupos y que tienen la obligación de proteger a los estudiantes de discursos ofensivos” (…) “Finalmente, el 61% de los republicanos concuerdan con Trump en que los periodistas son hoy un enemigo del pueblo americano. La mayoría de los americanos (64%), el 80% de los demócratas y el 61% de los republicanos cree lo contrario, y creen que el gobierno no debe tener el poder de frenar noticias e historias, aun cuando las consideren inexactas o interesadas”.

Anexo

LAS FUERZAS MORALES de José Ingenieros

Escribió el autor: “La dependencia pasiva es incompatible con la dignidad. Los mansos y los ignorantes, por falta de confianza en sus propias fuerzas, entregan su destino a la complicidad de los demás. Todo lo esperan de la beneficencia providencial del Estado: profesan los catecismos de sus escuelas, obedecen las órdenes de sus funcionarios, esperan la protección de sus leyes, imploran la merced de sus favores. Sueñan con una sinecura en la burocracia y saben de memoria la ley de jubilaciones. Con tales hombres nada progresa, ni se renueva, sino con los que estudian, quieren y hacen. El que se agranda a sí mismo sirve mejor a su pueblo, que sólo es grande por converger en él la grandeza de quienes lo componen. Grandes naciones son aquellas cuyos ciudadanos tienen el hábito de la iniciativa libre; ellos crean para los demás vida y cultura y riqueza, en vez de envilecerse en el parasitismo social. El hábito de confiar en la propia iniciativa es segura escuela de hombría, despertando el sentimiento de la responsabilidad. El hombre digno piensa, quiere y hace. Si triunfa, no achica su ventura pensando que la debe a otros: si fracasa, acepta serenamente el resultado de sus errores. Digamos al joven: “haz lo que quieras”, para enseñarle a responsabilizarse de sus actos; las recompensas y contratiempos debe recibirlos como una consecuencia natural de su conducta. Un joven libre puede convertirse en una fuerza viva, emprender cosas grandes o pequeñas, pero suyas. Y dando a la sociedad, en iniciativas, tanto como de ella recibe en educación, respeta la justicia y practica la solidaridad”.

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