Por Luis Américo Illuminati.-

El Papá Noel K (segundo caballo de Troya de Cretina)

Si se compara el apurado «discurso de campaña» del candidato K Sergio Massa, delegado o apoderado de CFK, con la desopilante oratoria de «El Tirri», el primo de Marcelo Tinelli, hay una similitud o coincidencia notable entre ellos. El Tirri posee una gran capacidad de charlatanismo o saraza idéntica a la del candidato-ministro Massa. Éste quiere convencer al electorado de que Cristina Kirchner (condenada por la Justicia) le cedió el trono, resignada ante el naufragio del gobierno de Alberto que ella misma procreó, una estrategia que empuja un operativo que es un simulacro destinado a mantener la supervivencia de kirchnerismo, cuya podredumbre puede llevarlo a su total extinción, como una criatura antediluviana, un gólem que tan pronto tiene forma de una enorme Pitón o de un camaleón o un chancho gigante con antifaz. Pues todos los gánsteres K saben perfectamente que, si pierden, la cárcel es una posibilidad no muy remota para muchos de ellos.

El Tirri invirtió en la Luna

Luciano Giugno -El Tirri- contó que en el 2012 compró 4 acres en la Luna, en una entrevista para Infobae con Tatiana Schapiro. El primo de Marcelo Tinelli reveló ser dueño de cuatro acres en la superficie de Luna, equivalente a 40 manzanas. Hace 10 años el músico usó la tarjeta de crédito de su primo para realizar la impactante compra. El primo de Marcelo Tinelli habló de su vida, su relación con su familia, sus adicciones y sus inversiones fallidas. Así dijo: “Perdí muchísimo dinero por malas decisiones. Lo único bueno en lo que invertí fueron cuatro acres en la Luna que son 40 manzanas, en una época que nadie creía en eso. Yo quiero venderlo, ¿para qué quiero 40 manzanas? Con una sola me alcanza. Ahora se están peleando Elon Musk y Bezos por ir a la Luna y yo tengo esa barbaridad de hectáreas.

Conclusiones

Ya hemos calificado en anteriores notas que el papel de Massa se asemeja al de un bandido que se disfraza de Papá Noel para regalar todo tipo de baratijas, incluido el tren fantasma en el que se moviliza como maquinista (presidente de facto), prometiendo habitar la Luna y el asteroide B-312 donde vive El Principito. Si se repasan los 14 puntos o promesas, mal denominadas «Máximas», puesto que éstas son «reglas o proposiciones de conducta, frases de origen popular o culto repetida tradicionalmente de forma invariable, en la cual se expresa un pensamiento moral, un consejo o una enseñanza»; en cambio, los puntos que propone Massa no son otra cosa más que una mera expresión de deseos, declamaciones vacías, una burda falacia, un fabuloso «Cuento del Tío». A su futuro gobierno, Massa le llama de «Unidad Nacional». Veamos. «Es un Gobierno serio. El objetivo es servir a las personas y a la Patria, priorizando los intereses de todos por sobre los de los políticos o partidarios. Eso dará confianza al mundo y a quienes necesitamos que crean e inviertan en el país. El Gobierno de Unidad Nacional es el Gobierno de las y los mejores, vengan de donde vengan. En el Gobierno de Unidad Nacional no importa de dónde venís, sino a dónde queremos ir como país. Es un Gobierno de diálogo. Es un Gobierno que tendrá el diálogo y la búsqueda de acuerdos y consenso como método. Es un Gobierno para alcanzar consensos. Es un Gobierno que piensa en el futuro, con capacidad para hacer frente a los grandes desafíos que tenemos como país, resolver los problemas estructurales que acarreamos y definir las políticas de Estado que nos permitirán tener un futuro mejor. Es un Gobierno estable y previsible. El Gobierno de Unidad Nacional nos garantiza gobernabilidad, lo que da seguridad, certezas y tranquilidad a las y los argentinos. Es un Gobierno serio. El objetivo es servir a las personas y a la Patria, priorizando los intereses de todos por sobre los de los políticos o partidarios. Eso dará confianza al mundo y a quienes necesitamos que crean e inviertan en el país. El fin de la grieta. Sueño con un país en el que dejemos atrás las diferencias y la polarización, y en el que todos y todas tiremos para el mismo lado. Un objetivo común: construir un mejor futuro para todas y todos los ciudadanos.»

Lo Viejo y lo Nuevo

Por último, para aquellos que meten miedo a los votantes para que no elijan a Javier Milei y voten a Massa, les decimos que entre Massa y Milei existe una notable diferencia: uno es parte de la ruina de la Argentina e integrante de la mafia K y el otro aún no hizo nada y todavía no ha victimizado a nadie. «Elemental, Watson», diría Sherlock Holmes. Una cosa es la prueba de los hechos consumados (Massa) y otra cosa muy distinta es lo discursivo que aún no es praxis (Milei). Uno forma parte del árbol podrido, es rama caída de éste, en cambio el otro es un arbolito que lucha y se eleva en la oscura maraña del bosque en busca del aire y la luz necesaria para desarrollarse y ocupar el lugar que le corresponde.

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