Por Guillermo Cherashny.-

Eran muy esperadas las primeras declaraciones de Lilita Carrió después de su delicado estado de salud -que aún persiste-, pero no defraudó a nadie; es más, dijo más de lo que se suponía, ya que pidió volver atrás con el tarifazo y llamar a audiencias públicas. Luego lo atendió a Ernesto Sanz, a quien calificó de “metido”. Pero lo más duro fue compararlo a Daniel Angelici como el Lázaro Báez de Macri y, en cierta forma, de no controlar a los barra bravas de Boca autores del crimen del Unicenter a los dos colombianos.

También se acordó de Raúl Alfonsín, a quien acusó de un pacto negro con Duhalde en Buenos Aires, y finalmente castigó a Margarita Stolbizer por tener un acuerdo con Daniel Scioli.

El gobierno criticó por lo bajo pero no dijo nada en público. En cambio, Margarita Stolbizer le contestó que hizo una denuncia disparatada sobre el retiro de 20 mil millones de pesos cash por parte de Daniel Scioli que finalmente resultó falsa y en donde Carrió tuvo que rebobinar y decir que nunca habló del retiro cash y sí de 5 cajas negras donde robaba el sciolismo.

La seducción a margarita empezó con Jorge Macri en Tecnópolis en un partido de basket donde jugaba el hijo de la diputada y luego en un desayuno con la gobernadora Vidal, pero las declaraciones posteriores de Stolbizer elogiando a Sergio Massa y diciendo que nunca integraría el gobierno de Cambiemos dio por tierra con una eventual candidatura senadora dentro de Cambiemos, y tampoco con Massa, aunque con el Frente Renovador comparte una agenda legislativa en común.

Así las cosas, Carrió -que no banca a Jorge Macri y recela a Stolbizer- salió con el cuchillo entre los dientes a criticar duramente la campaña de ahorro de energía de Macri, aunque dijo que era su gobierno y que lo hace para ayudar aunque en la Casa Rosada no piensan así.

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