El macrismo y el cristinismo juegan con fuego en la legislatura bonaerense

El gobierno del cambio al borde del plagio de otros gobiernos.Es momento que el mandatario, que se eligió como alternativa revise y evalúe las actuaciones y el desempeño de sus subordinados. El sabe si fue por confianza y/o aptitud e idoneidad que puso a su gente en el gabinete. El implacable TIEMPO corre el velo de la verdad del RENDIMIENTO y ya está en situación de comprobar si todo fue actitud de competencia o resultan, con la realidad vistiendo a la verdad, que todo resulta un fiasco. Tal vez haciendo honor al nombre del partido del CAMBIO, pueda comenzar a abrir las ventanas y puertas para CAMBIAR a los que no lo acompañaron en su ilusión.
El, es el que tiene que tomar conciencia administrativa y política de quienes cumplieron con las funciones y responsabilidades que les delegó. En algún momento dijo: «ellos son yo».
Existe un costoso compromiso hacia los ciudadanos que lo eligieron, rendir cuentas de los hecho realidad o de lo que tiene en proceso para que desarrollen sus elegidos. No sirve las contestaciones del Jefe de Ministros al Congreso. En ese ámbito, existe hoy una nutrida cantidad de ocupas que llegaron colgados de una lista y ni siquiera palpan en la calle la «temperatura «de los que votan. El CIUDADANO quiere ver y escuchar a su ELEGIDO. Está cansándose de Ministros, secretarios u otros títulos de nuestros oceánicos organismos desconcentrados, que, últimamente tomamos notificaciòn de sus existencias por el escándalo derivado de sus malos desempeños, que por los resultados positivos de sus aptitudes. Solo un NECIO no puede asumir la PRESENTE realidad, tanto en lo político como económico.
Si nuestro PRESIDENTE comienza a privilegiar al diálogo, escuchar y brindar la oportunidad a componentes técnicos de la oposición y desecha el capricho de uno o dos soberbios que se creen dueños de un «PROYECTO GANADOR», seguramente comprobará que los cuatro años de SU GESTION sostenido con nuestros impuestos, no resultarán una estafa más en la historia política de nuestro querido país. Fue elegido porque se ofreció como el hombre para el CAMBIO. No puede dejarse secuestrar por los que le componen música entonada para sus oídos, y tarde se darse cuenta que le cambiaron la letra real. Y tendrá que pagar un castigo que hoy no lo hace con quienes se acostumbraron a una añeja forma de gobernar. El argentino, con todas sus falencias, no desea un buen país con un buen gobierno, lo MERECE. Todos estamos esperando los cambios en el gobierno de CAMBIEMOS. Ya es momento, antes de las elecciones, dar las gracias a funcionario/as que no hacen honor a sus puestos, que en vez de sumar restan, y , más aún en áreas de Seguridad, Finanzas, Transporte, Energía y Social. El rigor en las conductas es la forma de encarrilar la cosas.
Infantiles actuaciones y declaraciones en Seguridad, vergonzosa actitud en Finanzas (más grave aún por se la encargada del manejo de nuestro endeudamiento), dudosas maniobras de adjudicación en Transporte, penoso ejercicio de función en Energía (se necesita conocer la riqueza subterránea de nuestro país) y desprolijo tratamiento a la asistencia de los jubilados (por respeto y por sus aportes genuinos).
El Presidente debe respetar nuestra investidura ciudadana, requiriendo respeto a sus funcionarios con el pueblo que trabaja. Es la forma en que la devoluciòn hacia la investidura se vuelve concomitante.