Por Hugo Morales.-

La dupla de Omar Gutiérrez, gobernador, y Jorge Sapag, su antecesor, que conduce al MPN desde diciembre del año pasado logró imponer a sus candidatos en las elecciones internas de ese partido político para elegir a los candidatos a concejales para el Concejo Deliberante de la Ciudad de Neuquén. Alejandro Nicola y Vanina Merlo cabezas de la Lista Azul se impusieron por más del 70 por ciento de los votos y, ahora, competirán con los otros partidos políticos que aspiran a conseguir bancas en la principal Legislatura municipal de Neuquén. Sin embargo, los otros dos pesos pesados del cincuentenario partido que gobierna la Neuquén desde hace más de 50 años que se mantiene en el Poder, como el senador Guillermo Pereyra y el ex gobernador Jorge Sobisch no lograron incidir en la votación. Gutiérrez y Sapag emergen como los verdaderos dueños del único partido provincial que sobrevive en el país en medio de una pelea constante con los partidos nacionales y centralistas de la Argentina.

Su más férreo contrincante será el espacio Cambiemos que lidera el intendente de la capital, Horacio Quiroga, quien ya ha designado a su secretario de Obras Públicas, Guillermo Monzani como el número 1 de una lista que debe competir en las próximas PASO porque el actual diputado provincial radical, Alejandro Vidal, vive enfrentando a la conducción formal que presidirá Cesar Gass y a Quiroga, ya anunció que irá por una banca. Vidal, hijo de un histórico de la UCR neuquina, allegado a Ricardo Balbín, que supo mantener sólidas relaciones políticas y económicas con el MPN -uno de los privilegiados con los créditos blandos que el ex gobernador Jorge Sobisch otorgó para potenciar viñedos- fue el gran derrotado en las últimas internas de los radicales neuquinos después de un proceso preñado de denuncias por hechos de corrupción que lo pusieron en el foco de la escena judicial y política de la Provincia.

También Nicola y Merlo dejarían importantes cargos públicos para arriesgar en una pulseada electoral. Principalmente el primero quien dejará su cargo de ministro de Energía, Obras y Servicios Públicos si le toca ir al Concejo Deliberante capitalino. Tanto Nicola como Gutiérrez anticiparon por las radios locales que no solo se trata de ganar una banca en el CD local sino ir hacia el Gobierno municipal. Detrás de la lista Azul se ubicó la lista Celeste y Blanca que encabezó Claudio Marchetti que sacó el 9,12 por ciento de los votos. Nicola es un hombre clave en las negociaciones que el gobierno neuquino mantiene con las multinacionales del petróleo por las anunciadas inversiones en Vaca Muerta

Merlo, una obediente discípula de Gutiérrez-Sapag, también abandonará su cargo de subsecretaria de Defensa Civil, para ir a ocupar una posible banca legislativa. Los dos componen las espadas políticas con que el MPN intentará arrebatarle la Municipalidad de Neuquén a Quiroga, quien mantiene en la capital una popularidad que intenta trasvasar a su leal funcionario Monzani. En el fondo será una pelea de dos ingenieros, algo no común en la política local y tampoco nacional. Pero Quiroga sabe que su amor por Macri tiene un límite. Es el apoyo de la administración nacional a la Provincia de la mano de Pereyra, quien se ha convertido en el niño mimado de la industria hidrocarburífera, especialmente por su ingeniería de armar un convenio colectivo de trabajo que place a esos capitales.

Prueba de ello fue el trato preferencial que el gremialista y senador petrolero tuvo en Houston cuando acompaño al presidente Mauricio Macri y a su ministro de Energía Juan José Aranguren a la reunión con los CEO de las compañías más importantes del mundo. Solo falto que el ministro lo llamara por su apelativo “Willie” ante el entusiasmo que despertó el programa laboral del senador y presidente de la estratégica Comisión de Energía del Senado. Claro que esta euforia no le resulta gratis. Desde una izquierda pseudo kirchnerista, el legislador por el Parlasur, Ramón Río Seco, lo ataco sin miramientos en coincidencias con la lluvía ácida que hace caer sobre Pereyra la izquierda mas dura como el Partido Obrero local. Río Seco aprovechó este marco para criticar duramente al MPN de quien sin embargo copia sus banderas provincianas y federalistas.

Este político local comenzó a trascender con los movimientos piqueteros que surgieron en la Provincia en la década de los 90, especialmente, a partir de la trágica muerte de Teresa Rodríguez en Cutral Có. Sin embargo no adoptó una posición extrema sino que se cobijó en una centro izquierda del radicalismo que encabezó Eduardo Benítez, ex intendente de la ciudad y después deambuló por el kirchnerismo de paladar negro de Néstor y Cristina Kirchner. Sin embargo, un tiempo después abandonó para amagar una asociación política con Quiroga con la intención de disputarle el Poder Provincial al MPN. Ese permanente saltimbanquismo le ocasionó duros cruces del mismo PJ local que lideraron los hermanos Oscar y Nancy Parrilli. Ayer, se lo recordó el candidato de la izquierda y hombre de los sindicatos ceramistas, hoy candidato del Frente de Izquierda de los Trabajadores, Raíl Godoy.

Nicola y Merlo obtuvieron el 71,17 por ciento de los sufragios emitidos por los 22.914 afiliados que ayer concurrieron a las 23 escuelas habilitadas para votar en toda la ciudad donde se constituyeron 106 mesas. Por tratarse de una elección municipal, en el resto de la Provincia sencillamente no se votó. El padrón para estas elecciones registró una cantidad de 168 mil electores -podían votar independientes- de los cuales 38 mil fueron afiliados. El MPN se ufana que con el piso de 23.000 afiliados que ayer fueron a votar por las 8 listas que se presentaron, le alcanza para ganar las elecciones municipales -la verdadera elección en la Provincia- que se disputarán el mismo día de la compulsa para diputados nacionales. La picardía proviene de Quiroga, quien busco identificar a la elección local con la nacional y así aprovechar el envío de Macri. Obviamente que el intendente suele responder con sorna cuando se le baraja tamaña posibilidad.

La novedad de esta elección fue la habilitación de la urna electrónica que permitió conocer los resultados con bastante anticipación. Precisamente la imposición del voto electrónico fue una iniciativa de Quiroga, de quien ayer su principal contrincante político- Gutiérrez- tomó como propia y ponderó la metodología empleado por el MPN, el primer partido en seleccionarla en una interna partidaria, como prueba de un fuerte dinamismo y concepción democrática del ejercicio del Poder. En el tercer lugar se ubicó la lista Verde con 1.159 votos, un 5,06%. Y detrás de ella se registraron los siguientes guarismos: 1.123 votos (4,90 % para la Lista Roja), 751 para la Lista Violeta (3,28%), 533 Marrón (2,33%), 269 Turquesa (1,17 %) y 234 para la Morada (1,02 %). Como votos en blanco se contabilizaron 403 (1,76%) mientras que los nulos y recurridos apenas llegaron a los 25 y 17 sufragios. En total votaron 22.300 mil personas que lo hicieron en un clima de total tranquilidad.

Por su parte, el vicegobernador de Neuquén Rolando Figueroa votó en la escuela 125 y en sintonía cromática con otros integrantes de la lista que lo representaba, uso el color azul en su vestimenta. Figueroa fue uno de los últimos de los dirigentes del MPN en votar y aprovechó la presencia de periodistas para ponderar el trabajo que supone hará Alma “Chani” Sapag (hermana de Jorge) en la Cámara de Diputados. Figueroa deshojó la margarita hasta último momento para decidir -finalmente dijo no- si iba como primer candidato a diputado nacional o se quedaba en su cargo actual que significa nada más, ni nada menos, que ser el segundo funcionario de jerarquía de la Provincia. En su mente, pareció reflejarse el recuerdo de Felipe “Pipe” Sapag (otro hermano de Jorge) cuando Sobisch lo envió como senador a Buenos Aires y elegantemente lo alejó de la pelea por el poder local.

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