Por Carlos Tórtora.-

Hay una persona de la confianza de Javier Milei que desde hace varios días trabaja a full en la preparación de las designaciones de los futuros funcionarios, así como en la supervisión legal del proyecto de ley ómnibus que se enviará al Congreso. Lo sorprendente es que la funcionaria en cuestión es nada menos que Vilma Ibarra, la mano derecha y ex pareja de Alberto Fernández. La historia que explica esta situación se remonta al 2011, cuando Ibarra dejó la actividad política para transformarse en la gerente de legales de Corporación América. Allí se reencontró con Guillermo Francos, que se sentaba en la banca de al lado de su hermano Aníbal, en el Consejo Deliberante porteño. En el grupo Eurnekian, ella también se hizo amiga del futuro Jefe de Gabinete, Nicolás Posse.

Después del 19 N, en el equipo de Milei se percataron de que no tenían perfilado a ningún candidato a Secretario Legal y Técnico, luego de que se cayera Santiago Viola, el apoderado electoral de LLA.

Fue entonces cuando Francos decidió recurrir a Vilma y ella empezó a evacuar cada vez más consultas, actuando en la práctica como una funcionaria más de Milei.

La continuidad

Esta semana, en el Hotel Libertador se sinceraron las cosas y alguien habría sugerido que se confirme a ella en el cargo, un hecho que, de ocurrir, no tendría antecedentes en la historia política nacional. El Legal y Técnico es tradicionalmente una de las personas de mayor confianza del presidente, que debe consultarla a diario. Ahora, con el correr de las horas, la idea de dejar a Ibarra en su cargo gana espacio.

De ser así, el espectro multicolor del nuevo gobierno sumaria un matiz más: el albertismo.

Share