Por Claudio Valdez.-
El 1º de mayo de 1982, dando cumplimiento a la misión asignada, recibió su “bautismo de fuego” la Fuerza Aérea Argentina exhibiendo capacitación y eficiencia en aquellas cruciales instancias bélicas. La entereza, sacrificio, valor y entrega de sus integrantes por el “interés y bien común” de nuestra sociedad hicieron evidentes los titánicos esfuerzos realizados, que se perciben a través del tiempo en su completa y heroica dimensión.
Las rastreras conductas y actitudes que hasta la actualidad confirman los “adornos” que ostentan demasiados políticos, funcionarios, sindicalistas, profesionales e infinidad de contraculturales, agiganta el recuerdo de la suprema “vocación de servicio” de aquellos héroes y veteranos. A pesar de la corrupción, inmoralidad y las pusilánimes conductas imperantes, subsiste para nuestra Nación una tenue esperanza de que semejante simiente no puede haberse extinguido.
Mientras la sensatez, honestidad y voluntad de nuestra gente quiera ser empeñada en el rescate de la suerte desperdiciada durante las últimas décadas, no debería ignorarse que seguridad, progreso y bienestar son siempre el resultado de esfuerzo institucional y ciudadano mancomunados. Nuestros valientes aviadores en situación de guerra así lo entendieron y ofrendaron su preparación, su entrenamiento, sus voluntades y hasta sus propias vidas en respuesta al requerimiento de “la causa de Malvinas y el dominio del Atlántico Sur”.
Hombres de fe, palabra y conducta, hicieron realidad las estrofas de su marcha aérea: “Por la patria morir o la gloria,/ Sus soldados alados irán”.
La extensa y desprotegida Patria reclama vigilancia, control y seguridad en tierra, aire y mar. ¡Honra y honor a nuestras Fuerzas Armadas, de Seguridad y Policiales que cumplen servicio preservando el territorio y su población!
01/05/2022 a las 11:38 AM
Lamentablemente y debido al trabajo de muchos políticos el Pueblo de la Nación se ha convertido paulatinamente en un «pueblo de dependientes» es decir lo contrario a «ser independientes » . Un estado macrocefálico que fue y sigue siendo usado por unos cuantos para su provecho individual ( políticos y empresarios ) a los que se le suman hoy los » planeros » que son millones , la deficiente educación pública, y la ausencia de ese enorme estado que no hace frente a las necesidades básicas ignorando los derechos humanos son los factores negativos que explican en parte la hipocrecía generalizada que se pone en evidencia con el flojo reconocimiento hacia nuestros héroes de guerra. Hay una gran resposabilidad de ello que cae sobre los altos mandos a cargo de las tres fuerzas que ejercían sus comandos en la época. Actuaron como cobardes tratando de ocultar su fracaso . Honor y Gloria a nuestros héroes de las tres fuerzas que pusieron el cuerpo en el camplo de batalla.