Por Antonio Rossi.-

Los reiterados anuncios de una pronta reactivación de las obras públicas que viene efectuando la administración de Alberto Fernández han hecho que todos los actores que intervienen en la industria de la construcción comiencen a mirar con atención el accionar de Vialidad Nacional.

Si se cumplen las promesas oficiales, el organismo vial debería desempeñar un rol clave en la ejecución y licitación de las obras en rutas y autopistas que el Gobierno prevé llevar adelante para superar la crisis económica provocada por la pandemia y las restricciones de la cuarentena.

Pero lejos de estar calentando los motores para poner en marcha el plan de obras para que el sector de la construcción recupere parte de los más de 50.000 puestos de trabajos perdidos en los dos últimos años, Vialidad Nacional no mostró hasta ahora el protagonismo que se esperaba y encima la conducción encabezada por el ex intendente de Cañuelas, Gustavo Arrieta ha vuelto a ser el blanco de fuertes cuestionamientos internos.

Por medio de una nota remitida a Arrieta, la Asociación Gremial de Profesionales y Personal Superior de Vialidad Nacional (AGPPSVN) rechazó la decisión de las autoridades asumidas en diciembre de “designar a personas y dirigentes políticos que no cuentan con experiencia, antecedentes profesionales y hasta estudios básicos para ocupar los altos cargos de la estructura organizativa de la repartición”.

Según denunciaron los profesionales “la situación se ha agravado considerablemente en los últimos meses porque hemos alcanzado unas 60 designaciones de personas que no poseen títulos habilitantes y que algunos casos tampoco tienen estudios primarios o secundarios”.

“No debemos olvidar que la improvisación registrada en las administraciones anteriores al nombrar personas sin conocimientos específicos en los cargos jerárquicos han generado numerosos y graves errores que hoy se reflejan en los caminos y sufren los usuarios”, advirtió la entidad.

En la nota firmada por el secretario general Jorge Maturano, la AGPPSVN advirtió que hasta ahora “no se ha materializado ninguna licitación, pública o privada, para realizar obras nuevas en las rutas de la red troncal nacional”.

“Esta improvisación se sufrirá el próximo año cuando debido a la falta de inversiones en el presente período y en los anteriores se incrementen los deterioros de las rutas nacionales y los paquetes estructurales no soporten la densidad del tránsito circulante”, alertó la asociación.

Al analizar la situación interna que se registra en el organismo vial, los profesionales destacaron que ya van ocho meses de gestión sin que se diera respuestas, entre otros, a los siguientes planteos y requerimientos:

–La reapertura de las negociaciones paritarias.

–La recategorización de más de 1.500 agentes.

–La provisión de los elementos y equipos de trabajo para el personal que trabaja desde sus domicilios en forma remota.

–La realización de concursos para la cobertura de cargos de la estructura técnica y organizativa.

–El paso a planta permanente de los contratados que hace más de cinco años que se encuentran en esa situación y vienen desempeñando tareas similares a los agentes de la planta estable.

–Reincorporación de los trabajadores despedidos en la gestión anterior.

–La reformulación de la estructura orgánica de Vialidad.

–La aprobación de los protocolos de seguridad para el regreso al trabajo en forma presencial cuando se levanten las prohibiciones sanitarias.

Por último, la asociación reclamó la “urgente reapertura de las Escuelas Técnicas Viales” que fueron cerradas durante la gestión macrista para poder contar con técnicos, laboratoristas y topógrafos capacitados no sólo para las tareas de Vialidad, sino también para las empresas específicas provinciales y privadas que requieran de esos servicios.

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