Por Mario Cadenas Madariaga.-

Un motivo personal.

He dedicado más de una década a la actividad rural en la Provincia de Santa Fe, en la zona inhóspita de los Bajos Submeridionales, donde adquirí campos que eran sólo tierra y cielo y los transformé en explotaciones ganaderas y agrícolas, soportando en verano temperaturas de 46 grados a la sombra -trabajando al sol- y cinco grados bajo cero en invierno, y finalmente fracasé por efecto de la crisis de 1981, producida por la Tablita, un inadecuado manejo de la devaluación y el restablecimiento de los impuestos a las exportaciones que había derogado como Secretario de Agricultura de la Nación.

A pesar de ese final, conservo un recuerdo grato de aquella experiencia, como consecuencia de la cual conocí la provincia cruzándola periódicamente, de un extremo al otro y de pensar la solución de sus problemas, siguiendo una vieja vocación.

Como Secretario de Agricultura fui el autor de la de la reforma de la ley de granos, que permitió la creación de los puertos graneleros privados de la provincia de Santa Fe, por donde se canalizan las grandes exportaciones de la zona de San Lorenzo.

La actualidad de la provincia

Hoy la provincia de Santa Fe, como toda la Nación, vive un momento de gran desconcierto, porque es conciente de sus potencialidades para progresar, pero al mismo tiempo ve como se le cierran los caminos para producir y llegar a usufructuar de los beneficios de una mayor actividad, en todos los órdenes. Es indispensable presentar un cuadro de decisiones estratégicas, que orienten a la opinión pública y aplasten las falsas alternativas fundadas en el populismo y a las organizaciones del delito que tratan de aprovechar el desarme moral producido por el mismo desconcierto.

Desarrollaremos a continuación un proyecto que transformaría a la provincia en una zona de pleno desarrollo, al nivel de las del primer mundo.

Las cifras básicas de la realidad

Población: 3.400.000 habitantes.

Superficie 133.000 kilómetros cuadrados.

PBG. 50.500 millones de dólares.

PBG por habitante 14.852 dólares.

Pobres 560.000 personas (estimado).

Desocupados: 100.000 (estimado).

Presupuesto: gastos 75.800 millones de pesos; igual al 16,8% del PBG. Inversiones del presupuesto 8,600 millones de pesos, 1,9% del PBG.

Mortalidad infantil 9,7 por mil.

Préstamos al sector privado 44.500 millones de pesos (1)

El objetivo central de la reforma

Frente a esta realidad el objetivo central de la reforma debe ser alcanzar en todos los ordenes -social económico, político y cultural- el estatus de una democracia occidental del primer mundo.

Esto en el orden económico significa multiplicar por tres el PBG en 12 años, es decir alcanzar a 150 mil millones de dólares, con un ingreso por habitante de 39.000 dólares, que es el que actualmente tiene Gran Bretaña.

Esto es lo que requiere la provincia de Santa Fe

Examen critico

La situación de la provincia de Santa Fe, en primer término, sufre los efectos negativos de la sobrevaluación de la moneda, los impuestos a las exportaciones, a las operaciones bancarias, la inflación, la carencia de una política crediticia adecuada, todas de responsabilidad de la Nación y que son las causas principales de la contracción económica que se percibe, influida además por la baja de los precios internacionales.

Pero a estos efectos de la política nacional se agregan los errores de la política provincial a saber:

1) Excesivo gasto publico provincial.

2) Un muy bajo nivel de crédito bancario al sector privado.

3) Graves fallas en la política de represión del delito.

4) Inversiones públicas insuficientes por sus altos costos y sin un plan ajustado a la realidad de la provincia.

5) Una política educacional anticuada.

6) Mala administración en la política de salud.

El Presupuesto de la provincia de Santa Fe

El nivel del presupuesto en casi el 17% del PBG de la provincia, es una proporción muy elevada. La forma de reducirlo es no incrementarlo al nivel del crecimiento de la economía provincial y así manteniendo sus valores absolutos en cuatro años representará el 11% del PBG provincial que es el adecuado.

En 10.000 millones de pesos de gastos en bienes y servicios de consumo, por el efecto de la estabilidad monetaria, se puede prever una reducción de 2.000 millones de pesos. Además por diversas formas de ahorro sobre el total del presupuesto se puede lograr un 8% es decir unos 6 mil millones de pesos. Esto podemos dedicar en parte a mejorar las retribuciones.

En el presupuesto actual se prevén 6.000 mil millones de pesos en inversiones reales, que equivalen a 666 millones de dólares, y en cuatro años, 2664 millones de esa moneda.

La grave insuficiencia del crédito bancario al sector privado

Según el Boletín Estadístico del Banco Central de abril del 2015, los préstamos bancarios al sector privado, alcanzan la suma de 44.552 millones de pesos, lo que equivale al 10% del PBG de Santa Fe, uno de los más bajos del mundo. Si Santa Fe fuese gobernada por una política similar a la de Chile, dispondría de una cifra de préstamos ocho veces superior, a tasas internacionales y en medio de un franco crecimiento económico.

El proyecto de reformas que proponemos contempla en cuatro años, con estabilidad monetaria, aumentar del 10% al 50% del PBG de la provincia el credito bancario al sector privado. Y en doce años llegar al 90% del PBG.

Ese aumento permitirá equiparse a la industria con los equipos mas modernos, al agro perfeccionar su tecnología, al transporte modernizar sus unidades, a la población superar el déficit habitacional, multiplicarse al comercio y en general contribuir a un enorme crecimiento económico.

La grave situación de la seguridad

La provincia de Santa Fe lamentablemente presenta un cuadro muy grave de creciente criminalidad, fundamentalmente en la ciudad de Rosario, al que hay que atacar con rapidez y mediante una estrategia general efectiva.

Dicha estrategia se puede sintetizar en:

a) Fortalecer la policía de prevención, en su formación, armamento, protección y retribución.

b) Crear otra institución policial de investigaciones, con los mejores laboratorios criminológicos.

c) Aumentar la justicia penal, informatizarla, hasta que los procesos se reduzcan a un año, con sentencias definitivas.

d) Aumentar el numero de detenidos de 6.000 a 12.000 creando 9.000 unidades carcelarias, 3.000 para alojar a los que se encuentran detenidos en comisarías, y 6.000 para los próximos detenidos. Lo que significará una inversión de entre 90 y 180 millones de dólares en cuatro años. Lo que representa el 6,7% de las inversiones previstas.

Una educación anticuada

Para alcanzar el nivel de ingresos que proponemos se debe lograr un mejoramiento sustancial de la educación, no solo de la población escolar sino de toda la población activa.

Los últimos exámenes PISA han puesto en evidencia el atraso de nuestros estudiantes secundarios en el dominio del idioma, de las matemáticas y de las ciencias, ubicándose en el grado 55 sobre 65 países participantes.

Esto requiere una modificación sustancial que consiste en la informatización total de la educación publica y en la educación a distancia para los adultos.

La informatización total significa primero contar con software o programas para todas las materias, preparados por los mejores pedagogos argentinos o extranjeros, para ser trasmitidos a los alumnos a través de las computadoras, y examinarlos a través del mismo método, todo bajo la vigilancia de los docentes. Los 57.000 docentes de la provincia se van a preparar simultáneamente, porque no se puede esperar su preparación previa, sin postergar todo el proyecto.

Esto deberá ir acompañado de un aumento de la inversión en ciencia e investigación en el orden nacional y provincial.

La situación de la salud en Santa Fe

La información disponible en esta materia es lamentablemente muy insuficiente. Por ejemplo no se puede conocer cual es el grado de cobertura medica que cuenta la provincia, diferenciada por la prestada por los gremios, la asistencia privada y la atención publica.

El único dato relevante en que la mortalidad infantil se encuentra en el 9,7 por mil sobre un promedio del 11,7 por mil promedio en el país. Contra 7,9 por mil de Chile.

Las informaciones del presupuesto no permiten diferenciar los gastos que la provincia realiza en la directa atención de la salud, como son los hospitales, de los gastos administrativos del Ministerio, que no se justifican, pero que en todas las provincias, son una parte sustancial de ese gasto.

La histórica falta de corrección de los defectos de la estructura territorial de la provincia.

En una apreciación muy general se puede decir que alrededor de 5 millones de hectáreas, o sea el 37% de la superficie de la provincia, sufre inclemencias climáticas que afectan notablemente su productividad y son perfectamente factibles de corregirse.

A diferencia de la provincia de Buenos Aires que hace muchas décadas se ha ocupado de corregir o atenuar el flagelo de las inundaciones, la provincia de Santa Fe no ha hecho nada en este sentido.

Se ha asistido a las inundaciones periódicas en los departamentos del norte, con aguas salitrosas, y en menor gravedad en el centro, comprendiendo las inundaciones de la ciudad Capital, como si se tratara de un cataclismo climático de imposible solución, cuyos efectos duran varios meses, por falta de obras elementales.

Además, si bien la provincia ha hecho un progreso importante con el proyecto de la Hidrovía del Río Paraná-Paraguay, no ha logrado un aprovechamiento suficiente de esta innovación, por la falta de productividad de sus hinterland y la modernización de sus puertos.

Nos referimos a los puertos de Reconquista y de Santa Fe y a la corrección de los graves defectos que afectan sus zonas de influencia.

Se parecen a enfermedades endémicas e incurables, cuando su naturaleza es completamente diferente. Yo traté, para disuadirlo, con un gobernador de la Provincia -posterior a 1983- cuyo proyecto era transformar en un gran parque o reserva natural una enorme extensión de los tres departamentos del norte.

El problema de los Bajos Submeridionales

La tragedia de los Bajos Submeridioanles en la provincia de Santa fe, se debe a las inundaciones que ingresan por el noroeste y el norte, pero muy cerca de la frontera, en la primera región, se convierten en aguas salitrosas por que atraviesan salitrales que se hallan en Santiago del Estero y el Chaco, ingresando principalmente por la Cañada de las Víboras. Luego estas aguas que deberían desembocar en el Río Paraná, no pueden hacerlo, por la existencia del domo oriental de la provincia que corre desde el norte hasta la ciudad de Santa Fe, en la línea que recorre el antiguo ferrocarril. El problema, hasta la fecha, se resuelve por la sola acción de la evaporación, después de largos meses, con la secuela de las pérdidas consiguientes, de las que nadie se hace cargo, al menos para encontrarle una solución, con obras básicas de ingeniería.

Lo que se debe hacer es aislar los salitrales santiagueños y chaqueños, para evitar que las aguas pasen a través de los mismos, y de esta forma defender su calidad y en segundo termino encausarlas, al ingresar a la provincia hacia el este, y abrir el domo oriental de esa inmensa zona baja, a diferentes alturas de los paralelos, para que las aguas pasen y desemboquen en ríos y arroyos que desembocan en el Paraná.

Estos dos millones de hectáreas actualmente producen estimativamente 120 millones de dólares anuales, cuando viene bien el clima, y pasarían a producir 1500 millones de dólares, por año, que se reinvertirían en la zona, con un efecto multiplicador extraordinario.

El problema del Río Salado del Norte

Este río nace en los Andes en la provincia de Salta, con varios nombres pero predomina el de Río Juramento, con una alta calidad en sus aguas, pero a poco de ingresar en territorio santiagueño, cambia de nombre y se llama Salado, porque atraviesa grandes salitrales, que deterioran su calidad, para afectar la fertilidad de las tierras en toda la extensión que recorre, de mas de 500 kilómetros en Santiago del Estero. Luego ingresa en Santa Fe, recorriendo 150 kilómetros en dirección sudeste, hasta llegar al domo oriental de la provincia, por lo que tuerce hacia el sur, recorriendo los últimos 200 kilómetros, para desembocar en el Paraná a la altura de la Capital de la provincia.

Las provincias de Santiago del Estero y Santa Fe deberían hacer un canal para evitar la contaminación de las aguas del Río Juramento al cruzar los salitrales, y tendrían el enorme beneficio de la alta calidad de las aguas de este río, en el un recorrido de mas de 800 kilómetros.

La provincia de Santa Fe debería derivar parte del caudal de río, con un canal al este y esclusas, que desemboque en el Paraná, a la altura de La Criolla (estación Cañaditas), para evitar las inundaciones de su Capital y de los campos del centro de un enorme potencial productivo.

Esta región del centro y norte representa la mayor extensión de la provincia por lo que tendría un enorme efecto multiplicador de su riqueza.

La construcción de una importante red vial

Para esto se debe quebrar la inmensa corrupción que hay en la contratación de la obra vial, para lo cual se debe producir cambios drásticos en la Dirección Provincial de Vialidad. Un criterio debe ser contratar a los ex funcionarios de los organismos viales alemanes.

Se deben construir en cuatro años 5.000 kilómetros de rutas pavimentadas, que al costo de Alemania, demandarían una inversión de 500 millones de dólares. Y se debe construir autorrutas por 2.500 kilómetros por el mismo valor y en el mismo plazo. Luego de determinar el trazado se deben iniciar simultáneamente en las tres regiones, el norte, el centro y el sur.

Al norte como mínimo se le deben construir 650 kilómetros de rutas pavimentadas. Entre ellas dos rutas pavimentadas que crucen la provincia de oeste a este a la altura del Nochero y los Amores en el norte y de Villa Minetti a Intiyaco, ambas hasta llegar a la ruta 11. Dichas obras deben tener también el propósito de resolver las inundaciones, orientando las aguas hacia el este, cruzando el domo oriental, y encausarlas en los ríos y arroyos que desembocan en el Paraná. Previamente se deberían aislar los salitrales de Santiago del Estero y del Chaco para que no contaminen las aguas. Las rutas no deben ser paredones que no dejen pasar las aguas, si no que a través de un alcantarillado con exclusas, deben permitir un escurrimiento hacia el sur, en proporción a la importancia de cada creciente, bajo la vigilancia de personal experto. También se debería pavimentar la ruta de Vera hasta el límite con el Chaco -unos 150 kilómetros, paralela a la línea del antiguo ferrocarril. Estas obras darían una fuente de alimentación al puerto de Reconquista que hoy no tiene. Pero al mismo tiempo debería dotárselo del equipamiento moderno, de silos y de carga y descarga, para operar eficientemente.

A la región del centro se deberían dedicar 1500 kilómetros de rutas pavimentadas. En primer término se debe transformar en autorruta la 34, que aunque es nacional, en caso de defecto de inversiones de este origen, debe emprenderlo la provincia, llevándola primero al puerto de Santa Fe, favoreciendo el radio Rafaela-Esperanza y la capital provincial. Asimismo Tostado-San Cristóbal-San Justo.

La zona sur puede llegar a tener una red propia de un país desarrollado con la parte mas de 2.000 kilómetros de rutas nuevas, de la red proyectada, y la proporción de las autorrutas programada.

Conclusiones

La provincia se halla hoy frente a elecciones que definirán su futuro, por que se asiste al final de un ciclo nacional que no puede continuar por agotamiento de los recursos, dentro de su concepción de gobierno.

La alternativa aparece representada por el PRO, pero para consolidar su débil triunfo en las PASO debe mostrar un proyecto como el expuesto, y conquistará una amplia mayoría. Se debe salir de las generalidades que nada dicen, para pasar a exhibir un programa de altos objetivos y concretos planes de realización que los haga creíbles.

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1) Observación: La Dirección Nacional de Estadísticas de la Provincia de Santa Fe hasta hace poco tiempo era consultada por la honestidad de sus cifras, en contraste con las del INDEC. En la actualidad no es así, sus informaciones son insuficientes o totalmente inexactas como las del organismo de la Nación.

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