Por Enrique Guillermo Avogadro.-
“Veo bandas rapaces movidas de codicia -la más vil de las pasiones- enseñorearse del país, dilapidar sus finanzas, pervertir su administración, pavonearse insolentemente en cínicas ostentaciones, comprarlo y venderlo todo, hasta comprarse y venderse unos a otros a la luz del día”. José Manuel Estrada.
Mi columna de la semana pasada, al igual que ésta, escrita el sábado por la noche, abusó del humor para describir una realidad cada vez más preocupante, y quedó fuera de lugar cuando terminó la farsa de la elección en Tucumán, sumergida en un caos demencial de violencia y sangre. ¿Cuánto tuvo de “ejercicio de cuadros y de tropas en el terreno”, con vistas al gran combate de octubre?; la quema de urnas, los disparos en las escuelas, la intimidación a fiscales y periodistas, el robo de boletas y la falsificación de telegramas fueron maniobras tácticas practicadas ese día y puestas a punto para la siguiente ocasión. Los hechos (que son sagrados, como dice el Dr. Fayt) mostraron hasta qué punto está dispuesto a llegar el Gobierno para conservar el poder; si estaba convencido de que Manzur ganaría, ¿para qué armar ese siniestro festival?
Lo sucedido, sin embargo, tuvo un costado positivo, porque detonó la reacción de la ciudadanía tucumana y permitió que a las fuerzas opositoras les entraran las lecciones, y sus líderes, convocados por un generalizado repudio, reclamaran la urgente reforma del obsoleto sistema electoral que nos hemos dado, que habilita todas las formas de fraude, comenzando por el control de los comicios por el Poder Ejecutivo, a través del Ministerio del Interior y del Correo Argentino, en manos de La Cámpora.
Lo que hemos visto en Tucumán nos dice mucho acerca de qué puede suceder en las elecciones nacionales del 25 de octubre, cuando el oficialismo, aupado por unas encuestas dibujadas ex professo, que muestran a Scioli a sólo cuatro o cinco puntos de consagrarse, con el 45%, en la primera vuelta electoral, ejerza esta forma de “contar” los votos para perpetuar el modelo, en especial en el norte del país y en el temible Conurbano bonaerense. Si no lo lograra creo, porque ya lo demostró, que será capaz de incendiar Roma.
Contra esa improbable posibilidad de Lancha de alzarse con el triunfo, lo cierto es que el famoso “cisne negro” -el factor imponderable que puede convertir cualquier cálculo en papel mojado- parece haberse transformado en una renegrida bandada: su viaje a Italia, las inundaciones (los meteorólogos auguran que las lluvias se repetirán con similar violencia antes de octubre), los hechos de Tucumán y su buscado (y luego lamentado) abrazo a Alperovich y a Manzur, su declaración de bienes inexplicables, la guerra de Insfrán contra un ídolo de multitudes como Carlitos Tévez, la propia candidatura de Anímal, la caída en los precios de nuestras exportaciones, la dramática escasez de reservas, el recrudecimiento de la inflación y su silencio respecto al asesinato de Nisman (¡qué llamativa velocidad para iniciar la investigación sobre su patrimonio!), el memorándum con Irán y la causa Hotesur son algunos de los pájaros que la integran. Cuánta importancia final puedan adquirir para una sociedad tan anestesiada es una de las mayores incógnitas del momento.
No se trata, entonces, sólo de una mejor y mayor fiscalización del acto, que seguramente se logrará por la práctica adquirida por quienes la ejercieron en las PASO, sino en descubrir cómo hacer para dar velocidad, transparencia y, sobre todo, veracidad y credibilidad al escrutinio final. Si la oposición se limita a actuar con su candorosa inocencia habitual -como fue el reclutamiento de fiscales a través de las redes sociales, lo cual permitió que se anotaran kirchneristas para cumplir ese rol, que después desertaron- y con dar ejemplos de buenos modales, mientras admite que la información de cada mesa se trastoque en su camino a los centros de cómputo, todo se habrá perdido y el cristinismo habrá logrado su propósito de seguir en el poder a través del Chino Zannini, de Anímal y de los emires feudales de Formosa, de Tucumán, de Jujuy y de otras provincias.
Creo que no disponemos de tiempo para cambiar, en sólo dos meses, el sistema -sea yendo hacia el voto electrónico, sea hacia la boleta única- que permitiría evitar algunos de los mayores vicios, pero estoy seguro que, al menos, se podría montar un enorme equipo de fiscales electrónicos para un efectivo control del escrutinio; además, como ya lo ha sugerido alguien de la oposición, debemos exigir la presencia de veedores internacionales, y cuantos más, mejor. Después del cenagoso chiquero en que el Gobierno ha convertido a la economía, y con la terrible herencia que dejará a su sucesor, éste -quien quiera que sea- necesitará de toda la legitimidad para encauzar y dar credibilidad al país; ese esencial requisito faltará si las elecciones que lo unjan resultan controvertidas o, literalmente, robadas.
Hasta ahora, creí que una eventual renuncia, antes de octubre, de Sergio Massa a su candidatura presidencial resultaría contraproducente, ante un eventual vuelco de su electorado peronista al redil del ¿Frente para la Qué?, pero ya no estoy tan convencido; básicamente, porque la presencia dividida del PRO y del Frente Renovador podría llevar a que ninguno llegara al 30%, y eso habilitaría a Lancha a triunfar -siempre fraude mediante- con sólo el 40%, en este curioso sistema de ballotage que los argentinos tenemos para las presidenciales. En la Provincia de Buenos Aires, donde gana quien simplemente obtiene más votos, la situación es distinta, porque allí están en condiciones de alzarse con el triunfo tanto María Eugenia Vidal (la candidata más votadas en las PASO) cuanto Felipe Solá, quien podría reunir los votos peronistas de Julián Domínguez y de barones hartos del kirchnerismo, que los lleva a la derrota.
De todas maneras, resulta esencial reiterar que el futuro se presenta muy difícil, tanto por la horrible situación interna como por las conmociones que, día a día, se producen en el escenario internacional, por las dificultades que afrontan Brasil (¡un espejo que nos avergüenza!) y China -nuestros principales clientes- y, sobre todo, por la devaluación masiva de las monedas de todos nuestros competidores y vecinos. Así, las drásticas correcciones que resultará inevitable realizar sobre el rumbo económico, en especial sobre el mega-gasto público que el kirchnerismo impuso, requerirá de fuertes consensos parlamentarios y sociales, que sólo podrán generarse a partir de la interacción generosa entre los distintos actores políticos, y allí se abre una puerta amplia, por ejemplo, para compartir espacios en el gabinete y en el Congreso, es decir, para constituir una amplia base aliada.
Cambiando totalmente de tema, y dado que también en este asunto la letra con sangre entra, algo acerca de la crisis de la inmigración ilegal de los miles de africanos que conmovedoramente luchan por una vida simplemente viable y están dispuestos a perderla en el intento, porque el infierno que dejan atrás es aún peor. Con toda humildad y desde este remoto lugar, me permito formular una sugerencia a la Comunidad Europea entera: ¿por qué no reparar algunos de los grandes errores de la época colonial y crear un Plan Marshall para África, que genere educación y riqueza para permitir a sus poblaciones permanecer en sus países de cuna?
Como todos sabemos, el original de ese plan hizo que Europa, después de la pavorosa destrucción que provocó la II Guerra Mundial, se recuperara con fuerza en pocos años. Muchos historiadores adjudican las razones que llevaron a los Estados Unidos a destinar tan ingentes fondos a esa reconstrucción al egoísta propósito de regenerar mercados para sus productos; aunque así fuera, los muchos millones de seres humanos que habitan en el continente negro y los enormes recursos de los que disponen los países sub-saharianos debiera servir, ahora también, como similar aliciente y, en especial, evitaría esa justificada invasión al continente europeo, tan rico y tan cercano.
El también dramático caso de Oriente Medio es diferente, porque quienes emigran huyen de la guerra y del demente Ejército Islámico. Un elemental instinto de auto-preservación debería obligar a reflexionar a los países centrales, creadores de ese caos por su avidez del mar de petróleo involucrado, e imponerles poner fin al mismo, ya que los inmigrantes árabes no se integran a las comunidades que los acogen y, por su infinitamente mayor tasa de crecimiento demográfico, terminarán por islamizar a Europa entera.
Los chinos tienen una curiosa maldición: “¡Ojalá vivas tiempos interesantes!”; no hay duda que nos está siendo destinada.
30/08/2015 a las 4:00 PM
Un juez clave en la causa Hotesur compró una millonaria mansión…….
La casa de Eduardo Freiler, el camarista que desplazó a Bonadio, cuesta U$ 1 ,4 millones y está en Olivos…..LA NACION.
NO OLVIDEMOS HOTESUR , NO OLVIDEMOS A ESTE CANALLA , AL MOMENTO DE LAS CONFISCACIONES…………
TOME NOTA LA : Drug Enforcement Administration, ( DEA )
30/08/2015 a las 6:43 PM
Para evitar una Europa Islámica, lo único que tiene que hacer Europa es volver a las fuentes, ¡SU CULTURA CRISTIANA!, debe dejar en el olvido, la actual cultura masónica, levemente atea y profundamente satanista, donde lo malo es bueno y lo bueno es malo, debe abjurar definitivamente de su relativismo, como lo ha echo el islamismo. Debe dejar de lado de una vez por todas su hedonismo contranatura, castigar la producción, comercio y consumo de drogas, terminar con los asesinatos abortistas, premiar el trabajo la honestidad y las familias heterosexuales, terminar con el premio a las uniones contranatura y contra Dios. Terminar con los subsidios a la falta de trabajo y crear trabajos para que todos se puedan ganar la vida honestamente y estar orgullosos de eso. ¿TAN DIFICIL ES ESTO? Europa es el continente mejor preparado intelectualmente, por lo tanto si sus líderes quisieran abocarse a esto, no dudo que lo conseguirían, pero el problema no es intelectual sino moral, estan vencidos y entregados atados de pies y manos a la satánica masonería ejecutora y heredera de la revolución francesa, que se representa a si misma como la prostituta con las tetas al aire que recorre las trincheras de París con un fusil en una mano y la tricolor en la otra. Revolución que profana los altares de Dios, y entroniza las imágenes de una prostituta parisina como diosa razón, lo cual algo de coherencia mantiene dado que destronado Dios, desaparecen el bien y el mal, lo bello y lo feo, lo recto o lo incorrecto, donde relativismo reinante mediante como dice nuestro YIRA YIRA; “dale nomás, dale que va que allá en el horno se vamo a encontrar, da lo mismo el que labura noche y día como un buey, que el que vive de las minas, el que roba el que mata o esta fuera de la ley” ¡DIOS, PATRIA Y HOGAR!
30/08/2015 a las 8:36 PM
URGENTE24
“La Casa Rosada quiere sacarse de encima la causa Carbón Blanco”
30/08/2015 a las 10:57 PM
Estado Islámico continúa con la destrucción en Palmira: demolió parte del templo de Bel
Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, el grupo jihadista destruyó parte del edificio construido en el siglo I D.C. y uno de los mejores conservados en las ruinas arqueológicas sirias
El templo de Bel, blanco de un nuevo ataque de Estado Islámico. Foto: Archivo
EL CAIRO.- El grupo jihadista Estado Islámico (EI) destruyó partes del templo de Bel, que conforma el mayor complejo dentro de las ruinas arqueológicas de la ciudad siria de Palmira, donde ya dinamitó otros históricos edificios, informó hoy el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
El templo forma parte del sitio arqueológico declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y fue construido en el primer siglo después de Cristo.
En tanto, otro grupo activista aseguró que todo el templo resultó destruido. “Estado Islámico hizo explotar el templo de Bel que está entre las construcciones más importantes del mundo antiguo”, indicó el grupo Palmyra Coordination en las redes sociales.
El templo de Bel se encuentra ubicado fuera de la zona principal de la antigua cuidad y su cámara principal (cella) se encontraba muy bien preservada.
Hace una semana se supo que los jihadistas habían destruido el templo de Baal Shamin, construido hace unos 2000 años y uno de los mejor conservados de las ruinas de Palmira.
Seguidores del grupo extremista publicaron luego en Internet fotografías que muestran cómo el templo quedó aparentemente reducido a cenizas. En algunas imágenes se ve cómo algunos hombres siembran de minas el templo y otras muestran grandes columnas de humo y ruinas.
La Unesco condenó la destrucción del templo y la consideró un “crimen de guerra”.
En mayo, Estado Islámico conquistó Palmira, un oasis y antiguo centro comercial en medio del desierto sirio, y expulsó a las fuerzas del gobierno.
Hace dos semanas, los jihadistas ejecutaron públicamente al que fuera el arqueólogo jefe de la ciudad histórica durante unos 40 años. Jaled al-Asaad, de 81 años, fue decapitado y su cadáver fue colgado de una columna antigua. Se había negado a abandonar la ciudad pese al avance del EI.
Desde su asalto se temía que los extremistas destruyeran la ciudad, considerada “testigo del politeísmo”, como ya hizo en varias ocasiones con otros sitios antiguos en el norte de Irak.
Hasta ahora habían destruido la estatua de un león de unos 2000 años de antigüedad y una tumba sagrada, así como valiosas estatuas que supuestos traficantes habían sacado de la ciudad histórica.
Agencias DPA y ANSA.