En su edición del martes 25, La Nación publicó un artículo de Pablo Mendelevich titulado “La grieta nuestra de cada día”, en el que analiza la profunda división que aqueja a la sociedad luego de doce años de kirchnerismo en el poder. Cada vez que estalla una discusión política, ya sea entre miembros de la academia o personas que se juntan en la popular para ver un partido de fútbol, queda en evidencia la profundidad de la grieta que se abrió entre nosotros luego del conflicto por la resolución 125. A partir de entonces kirchneristas y antikirchneristas pasaron a ser dos bandos antagónicos creando un escenario de antagonismo reñido con los valores fundamentales de la democracia como filosofía de vida. Para Mendelevich dicha grieta es el máximo legado cultural K, el kirchnerismo ha sido el principal responsable del encono que aún se manifiesta entre los partidarios del anterior gobierno y los defensores de Cambiemos. Semejante afirmación constituye, obviamente, una tremenda falsedad histórica. Porque si bien nadie duda que tanto Néstor Kirchner como su esposa poco hicieron, a partir del estallido del conflicto con el “campo”, para apaciguar los ánimos, lo cierto es que de la vereda de enfrente-patronales agropecuarias, medios hegemónicos y caceroleros-no hubo el menor intento por encontrar una salida negociada. Todo lo contrario. Con el correr de los días el antikirchnerismo fue creciendo en intensidad y su máxima expresión se vio plasmada en los cacerolazos, manifestaciones plagadas de violencia, grosería y diarrea verbal. En esta historia nadie es, pues, inocente.
Para Mendelevich hay un único culpable de la grieta: el matrimonio Kirchner. Dice el autor: “El kirchnerismo debería sentirse orgulloso por este legado, para nada una ornamentación de su estética política. La república matrimonial edificó sus doce años y medio de “reparación revolucionaria” de la historia argentina sobre el restyling de la antinomia patria-antipatria. Huelga recordar que junto con el diseño organizó el reparto. Pero por algún motivo, el kirchnerismo que nos agrietó hoy no está orgulloso de haberlo hecho: desconoce la paternidad de la criatura” (…) “Grieta existió siempre en la Argentina-dicen (los “pocos kirchneristas reflexivos”)-, si en cada familia había que ver cómo se peleaban nuestros abuelos cuando se discutía de política”. Ahora resulta que no se trataba de una abertura abismal, deliberada, para separar a la sociedad según la lógica amigo-enemigo y ejercer el poder con pretensión mesiánica sino de mera pasión argenta, de nuestra sabrosa idiosincrasia, entrañable acaloramiento” (…) “la confrontación kirchnerismo-antikirchnerismo tiene antecedentes bastante más gruesos: unitarios y federales en el siglo XIX y peronismo-antiperonismo en el XX. Si fuera necesario hablar de evolución cabría aplaudir que en el ítem niveles de violencia se hayan logrado saludables avances. Pero eso no significa que la grieta del siglo XXI, o como se la quiera decir, no haya sido tóxica, perniciosa, extemporánea, retrógrada y, en esencia, antidemocrática. Mucho menos debería omitirse que su plantación fue un acto consciente, ancado en la búsqueda colectiva de chivos expiatorios tras la anarquía de 2001 y articulado con la debilidad de las instituciones y con la doctrina totalitaria del “vamos por todo”. Con su populismo resultadista los Kirchner engarzaron el método de la confrontación permanente de enemigos rotativos con los beneficios de una economía cortoplacista sustentada en el consumo. Cuando los métodos se radicalizaron y los ciclos económicos se agotaron el combo perdió consenso y los sueños de perpetuidad-con la ayuda de una serie de errores políticos de la conducción-se interrumpieron”.
Es cierto que el matrimonio Kirchner puso en práctica una estrategia tendiente a profundizar la antinomia “amigo-enemigo”, pero cabe reconocer que en la Argentina dicha estrategia siempre se aplicó -¿o acaso no lo hizo Mariano Moreno para aplastar la contrarrevolución encabezada por Liniers?-. A partir de esos fusilamientos la concepción política de Schmitt quedó legitimada para siempre por las sucesivas élites que ejercieron el poder en el país. ¿O acaso no fueron enemigos los rosistas y la generación de 1837, la élite porteña y los caudillos del interior, los conservadores y los radicales, los peronistas y los antiperonistas, los peronistas de derecha y los peronistas de izquierda, los militares y los guerrilleros, los menemistas y los antimenemistas, los kirchneristas y los antikirchneristas? Nuestra historia siempre se escribió con sangre. La violencia extrema, el feroz antagonismo y la sinrazón impusieron sus códigos desde el comienzo de nuestro proceso emancipatorio. Los Kirchner no hicieron más que continuar con esta larga tradición. No inventaron absolutamente nada. Su lema fue: con nosotros o en contra nuestra. Lo que pasa con el enfoque de Mendelevich es que culpa exclusivamente de la grieta al kirchnerismo y nada dice respecto a sus enemigos que no hicieron otra cosa que echar más leña al fuego todos los días. ¿O acaso ya nos hemos olvidado de los insultos contra la ex presidente de la nación, de los festejos a raíz del fallecimiento de Néstor Kirchner, de los constantes ataques contra el kirchnerismo del multimedios Clarín?
Según Mendelevich “la vigencia de la grieta, sin embargo, no hace otra cosa que fortalecer los argumentos extrajudiciales que utiliza Cristina Kirchner para contestar a las acusaciones por corrupción que pesan en su contra. Fuera de los tribunales (tampoco adentro, hasta ahora) ella nunca le explicó a la sociedad cómo hizo su fortuna ni para qué quería ser cada vez más millonaria, cómo entiende su vínculo con el terrateniente Lázaro Báez, por qué cada día aparece otro caso de corrupción entre sus funcionarios, cómo podía ignorar lo de la obra pública, lo de la efedrina, los aportes del narcotráfico a su campaña, qué pasaba con sus hoteles y trescientas cosas más” (…) “El enemigo es la antipatria y ella encarna a la patria misma. Patria y antipatria. La grieta no reconocida sigue activa como molde funcional delante de una realidad que no se quiere, o no se puede, explicar en términos llanos. Ya nadie la agita desde el gobierno y no existe más un aparato estatal que la promueva. Sobrevive en el aire porque los odios no se esfuman de un día para el otro”. La corrupción es, indudablemente, la mochila más pesada que debe llevar la ex presidenta de la nación. Si es realmente inocente no tiene de qué preocuparse. En caso contrario, deberá someterse a la Justicia como cualquier ciudadano común. El problema es que, tratándose de Cristina Kirchner, las acusaciones que llueven sobre su persona se han politizado sobremanera. Cada nueva denuncia penal en su contra huele demasiado a una nueva operación política. Es demasiado evidente. Pero ello no significa que si se ve obligada a rendir cuentas ante la justicia, deba hacerlo. Tiene que hacerlo. Millones de argentinos la votaron (votamos) y lo menos que nos merecemos es saber si es culpable o inocente.
En las últimas horas el presidente de la nación recibió a su colega Tabaré Vázquez para estrechar filas en torno a una cuestión que los obsesiona: expulsar a la Venezuela chavista del Mercosur. “Venezuela, en estos términos, no puede ser parte del Mercosur. ¡Tiene que recibir la condena de todas las naciones americanas!”, bramó el mandatario argentino. Por su parte, el presidente oriental señaló que “hay una preocupación que aumenta cada día” y reclamó la mediación del papa Francisco, quien ayer recibió la visita del mandatario venezolano. Durante la conferencia de prensa conjunta el presidente de la nación expresó que tanto él como Tabaré Vázquez están sumamente preocupados por lo mal que están las cosas en el país caribeño. “Claramente la declaración que ha hecho el Congreso ha sido contundente y nos lleva a confirmar que Venezuela, en estos términos, no puede ser parte del Mercosur”, aseguró Mauricio Macri. Consideró que “además tiene que recibir la condena de todas las naciones americanas y del mundo entero porque en Venezuela no se están respetando los derechos humanos”. Es loable la preocupación de Macri sobre los derechos humanos en Venezuela. Lo curioso del caso es que no ha demostrado, al menos hasta ahora, preocupación alguna por la desaparición de los estudiantes en Ayotzinapa, donde gobierna su amigo Enrique Peña Nieto. Por su parte, el presidente oriental expresó que hay “una gran preocupación que aumenta día a día” y que con respecto a la aplicación de la cláusula democrática del Mercosur, reconoció que el tema debe ser analizado con suma responsabilidad. “Personalmente, siempre hemos defendido, a lo largo de toda nuestra carrera política, el derecho soberano y la libertad de los pueblos a manifestarse, a decir lo que piensan y a ser respetados en sus voluntades”, puntualizó. El gobierno del Frente Amplio es uno de los que con mayor ahínco viene bregando por una política de diálogo con el régimen chavista. En la conferencia de prensa Tabaré Vázquez señaló que “en la declaración de la OEA que Uruguay firmó está explícito nuestro posicionamiento: aspiramos que haya una solución pacífica de esta controversia, que exista un diálogo entre el gobierno y la oposición” (…) “También una referencia a que posiblemente exista una mediación del Papa Francisco y todo lo que contribuya a salir de una situación tan delicada bienvenida sea” (fuente: “Macri, con la idea fija”, Página 12, 25/10/016).
No es la primera vez que se encuentran ambos presidentes. Durante sus encuentros confirmaron que tienen un objetivo en común: buscar tratados de libre comercio desde el Mercosur y proyectar un puente que una Buenos Aires con Colonia. Sin embargo, ayer fue la primera vez que Tabaré Vázquez habló con su par argentino en suelo patrio. En la conferencia de prensa de rigor los periodistas les preguntaron acerca de un tema espinoso: una nueva pastera de UPM (ex Botnia) en la vera del Uruguay. La estrategia de Macri fue la previsible: diferenciarse lo máximo posible del ex presidente Néstor Kirchner, en cuyo gobierno se produjo una protesta de los vecinos de Gualeguaychú que produjo un conflicto internacional que debió ser zanjado por la Corte de La Haya. Dijo Macri: “Queremos consolidar un laboratorio en común para que se haga el monitoreo en forma continua, de común acuerdo, compartiendo la responsabilidad de velar por el medio ambiente en el río Uruguay”. Y agregó: “Tenemos que ver el nivel de afectación en el río para entender de qué manera podemos sostener un desarrollo debido a la variedad y calidad de materias primas que hay en ambas márgenes. Sabemos que vamos a crear trabajo de calidad pero eso nunca puede ir a costa del medio ambiente. Ambos hemos asumido ese compromiso en la última cumbre del cambio climático en París y hay un acuerdo absoluto y total que, sin hacer falsas demagogias, vamos a cuidar con seriedad lo que está sucediendo en el río Uruguay”. El presidente oriental señaló que “estamos apurando los trámites para instalar un laboratorio binacional de control en toda la extensión del río Uruguay para trabajar en los niveles de contaminación que existan en ambos lados del río para mejorar la calidad del agua, aire y medio ambiente”. Macri destacó que “se ha planteado el estudio de una alternativa al histórico puente Buenos Aires-Colonia y hay una nueva alternativa que aparenta ser accesible, viable económicamente”. “Quedamos en que con el apoyo de organismos multilaterales de crédito podemos recibir un financiamiento para empezar los estudios que nos confirmen si hay viabilidad económica para hacer el puente”, remarcó. Ambos presidentes acordaron la realización de encuentros periódicos entre los gabinetes de ambos gobiernos. “Estamos logrando retomar la histórica relación entre ambos países que ha sido siempre de afecto y de convivencia”, destacó Macri. “Por su parte, Vázquez devolvió gentilezas: “Con Mauricio hemos encontrado altísima sintonía y estoy seguro de que podemos seguir avanzando y desarrollando este excelente relacionamiento por el bien de los dos países”. Explorar un Tratado de Libre Comercio con China fue otro de los ejes del encuentro. Expresó Macri: “entendemos la visión de Uruguay, su necesidad de abrir mercados para su producción, ya que produce casi 10 veces más alimentos que los que necesita consumir. Nos hemos comprometido a tener una actitud abierta. Lo ideal sería plantear esto en el seno del Mercosur, como lo estamos haciendo con la Unión europea”. El presidente oriental agradeció la “actitud profundamente generosa” y destacó su coincidencia con el avance de un tratado de esta índole como el Mercosur. No obstante, rememoró que “hace seis años China presentó un pedido y aún no se le ha respondido, ni siquiera diciéndole que no”. “Sería muy bueno que en la próxima reunión del Mercosur se plantee este tema, lo analicemos en profundidad, veamos la posibilidad de avanzar en conjunto, pero mientras tanto Uruguay va a explorar la posibilidad de llegar a un tratado de libre comercio con China”, remarcó don Tabaré (fuente: “Una nueva pastera en la mira”, Página 12, 25/10/016).
Los trabajadores estatales recibieron la semana pasada un correo electrónico con una encuesta del Ministerio de Modernización en la que se les pregunta sobre sus valores. La iniciativa se titula “Nuestros valores construyen futuro” e invita a cada empleado a participar de una encuesta anónima sobre “los valores que nos caracterizan como Estado”. En la encuesta, cuyo título es “Somos Nación. Nuestros valores construyen futuro”, el trabajador debe identificar de qué sector del Estado forma parte, a qué ministerio pertenece, su sexo, su edad y el tiempo que lleva trabajando en el ámbito estatal. Luego debe atravesar tres pantallas. En la primera se ve obligado a seleccionar diez de una lista de valores/conductas que mejor reflejen cómo es el trabajador. La lista incluye “aceptar la diversidad”, “aprendizaje continuo”, “asumir riesgos”, “autodisciplina”, “búsqueda de recompensa”, “creatividad”, “eficiencia”, “emprendedorismo”, “foco en la misión”, “hacer la diferencia”, “saber escuchar” o “ser el mejor”. En la segunda pantalla el trabajador debe describir cómo opera su equipo en el presente. Algunas de las opciones son “acaparar información”, “alentar al personal”, “burocracia”, “buscar culpables”, “competencia interna”, “confusión”, “derechos humanos”, “explotación”, “foco en el individualismo”, “humor/diversión”, “libertad para tomar decisiones”, “manipulación”, “reducción de costos” e “inseguridad laboral”. En esa lista se le pide que escoja aquellos valores que considera útiles para ayudar al equipo a alcanzar su máximo potencial. Esta iniciativa surge del Centro de Valores Barret (sede en Waynesville, Estados Unidos), una consultora cuyo negocio es propagar “las herramientas de transformación cultural” para empresas y otras organizaciones. Hugo Godoy, titular de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), salió con los tapones de punta: “Es una más de las acciones que está haciendo el gobierno desconociendo la participación de los sindicatos en la definición de una política de personal” (…) “Esto muestra la incapacidad creadora y la subordinación intelectual al Banco Mundial y sus gerentes que buscan instalar un esquema de gobernanza mundial” (fuente: Werner Pertot, “Con los valores del Banco Mundial”, Página 12, 24/10/016).
26/10/2016 a las 11:29 AM
Don Hernan: en mi nada valiosa opinion , la grieta existira , mientras los miembros del regimen anterior y sus prebendarios , no devuelvan lo que robaron !!!!!!!!!!!!!
26/10/2016 a las 1:54 PM
Viví 30 años en Santa Cruz.- Lamentablemente fui testigo del saqueo sin precedentes en la historia argentina, de esa hermosa y rica provincia.- En el marco de la democracia presencié el avasallamiento de sus instituciones y el robo a cara descubierta (ya que cuando eramos chicos los asaltantes , al menos, se cubrían el rostro) de los recursos del Estado.- No pongo en duda las buenas intenciones de quien escribe la nota, lo que sí le sugiero, es que se informe.- El matrimonio Kirchner arrasó con la provincia de Santa Cruz.-
26/10/2016 a las 2:51 PM
LA GRIETA ES ENTRE, LOS LADRONES Y SU CÓMPLICES, Y LA TRANSPARENCIA CAMBIEMOS, QUE + DEL 50 % EL 10/12 VOTÓ A MACRI, Y QUE AHORA SOMOS MUCHOS MAS.-
Un huracán anunciado
“Son testigos de la muralla inexpugnable de nuestra mente, de la impenetrable fortaleza de nuestra memoria”.
Joël Dicker
POR: Enrique Guillermo Avogadro – Abogdo- Bs.As., 15 Oct 16
En la Argentina, donde tantos están sufriendo en el barro la travesía desde el cataclismo que significaron los gobiernos kirchneristas, mal que les pese a los inexplicables fanáticos que aún los añoran hay fuertes señales de que estamos llegando al pavimento desde donde comienza un futuro mejor. La ciudadanía lo percibe y, aún en medio de tantas dificultades, sigue acompañando a Mauricio Macri.
La mayor muestra del cambio de expectativas vino, como siempre, de los mercados de capitales. El Gobierno emitió, con un éxito que superó todas las esperanzas dada la previsión de aumento de las tasas por la Reserva Federal, bonos a diez años, en pesos y con interés fijo; es más, que fuera del 15,5% anual, da a la sociedad entera una certidumbre que ninguno de los argentinos recuerda haber tenido nunca. Como escribió hace unos días James Neilson, los argentinos siempre originales, cuando nos convertimos en “normales” el mundo se vuelve “anormal”.
En el lado negativo -siempre lo hay- de la situación local debemos sumar, como todas las semanas, los signos concretos del avance y de la potencia del narcotráfico. El incendio intencional de un Juzgado federal y las nuevas amenazas mafiosas a la Gobernadora de Buenos Aires fueron, sin duda, los episodios más graves, y todos haríamos mal en restarles importancia.
La inseguridad que, por lo demás, no hace sino crecer entre las preocupaciones de los ciudadanos, me llevó a formular algunas propuestas en mi nota del sábado pasado; entre ellas, que las fuerzas de seguridad fueran destinadas a la lucha contra el delito en el interior y, en su reemplazo, se enviara a las fronteras a las fuerzas armadas. Ignoraba que algo así ya estaba en la mente de algunos gobiernos de la región, entre ellos el nuestro: esta semana se reunieron los jefes de los ejércitos de varios países para coordinar esfuerzos con esa idea, que ya ha sido adoptada por Brasil, para combatir el tráfico de narcóticos, de armas, de personas y, sobre todo, el rampante terrorismo transnacional, íntimamente relacionado con todos esos males, ya que de ellos obtiene el financiamiento de sus actividades.
En los últimos siete días, una sensación que recorría el mundo y, sobre todo, a América Latina, se transformó en una certeza: el populismo se está derrumbando, empujado al abismo político por sociedades que están hartas de la corrupción o, simplemente, del derroche de los recursos públicos.
En España, en las elecciones celebradas en Galicia y en el País Vasco, el PSOE recibió una paliza, pero los votos que perdió no fueron a Podemos, ese partido de izquierda de reciente formación que venía de un fuerte knock-out en los comicios nacionales. Escocia, harta del populismo que llevó al “brexit” y fuerte defensora del europeísmo, ha vuelto a plantear la necesidad de un referendum con vistas a su independencia de Gran Bretaña
Por lo que se ve, la campaña de Donald Trump, otro populista pero de derecha, se ha zambullido en un tobogán que parece no tener fin. En individuos tan profundamente morales como son los estadounidenses, las permanentes denuncias por elusiones impositivas y abusos sexuales en que el candidato ha incurrido y su inclemente racismo, han producido un enorme impacto negativo. Ni él ni Hillary Clinton se han caracterizado por la altura o la dignidad con que se han conducido en estos meses, pero esta semana hemos visto a muchos de quienes contribuyeron con fondos para el republicano pedir su devolución, y los grandes líderes de su partido lo han dejado solo o, lisa y llanamente, han llamado a votar en su contra
En Venezuela, el Tribunal Supremo (íntegramente formado por chavistas) autorizó a Nicolás Maduro a aprobar el presupuesto anual por decreto, soslayando así su tratamiento por la Asamblea Nacional, con mayoría opositora. Además, para impedir que se realice un plebiscito revocatorio de su mandato este año, lo cual obligaría a llamar a elecciones, ha ordenado a su también dependiente Consejo Nacional Electoral demorar hasta el hartazgo la verificación de las firmas obtenidas para forzar ese recurso constitucional; así, esa decisión que inevitablemente lo expulsará del Palacio de Miraflores, se producirá el año próximo y permitirá a otra figura del “socialismo bolivariano” completar el período, con los mismos vicios que, a esta altura, se han transformado en un verdadero genocidio de la población venezolana, sumida en la más irracional violencia, el hambre y la insalubridad.
El incomparable Rafael Correa ha debido abandonar su pretensión de perpetuarse en la Presidencia de Ecuador y, ahora, lo han comenzado a acosar denuncias de corrupción que, como sucedió en el escándalo que tanto afectó a Dilma Rousseff, a punto tal que fue depuesta, se originan en la empresa estatal de petróleo. Y otro tanto les pasa a los restantes colegas que, en esta América del Sur tan especial, han encarnado gobiernos populistas; me refiero a Evo Morales, en Bolivia, y a Michelle Bachelet, en Chile.
En el caso de la mandataria trasandina, que terminó su primer mandato con una gigantesca imagen positiva, al regresar a La Moneda inexplicablemente dedicó todos sus esfuerzos a destruir el más exitoso proceso económico de la región, que había llevado a su país a un desarrollo sin igual.
En Brasil, el PT, tan erosionado por la corrupción, sufrió la peor derrota de su historia en las elecciones municipales del domingo pasado. En San Pablo, la mayor ciudad de la región, el candidato de PSDB -el partido de Fernando Henrique Cardoso- João Doria, no necesitó esperar a la segunda vuelta para expulsar del cargo al ahijado de Lula, Fernando Haddad. Y ese fue sólo el caso más notorio, ya que el huracán impactó en todo el país y de nada sirvió la presencia permanente del fundador de la sigla, que recorrió toda la geografía nacional tratando de impedir el inevitable resultado. Tampoco allí los votos que fugaron fueron a los otros partidos de izquierda (PSB, PDT, PSOL, PSTU, PCdoB); según la prestigiosa revista Veja, con el resultado de estas elecciones, las formaciones de derecha -PSDB, PMDB, PSD, PP, PR, DEM- conquistaron el 78% de los cargos.
La somera descripción de lo sucedido últimamente confirma, como dije, que los vientos huracanados desatados por el fracaso de las políticas populistas están arrasando con todos los regímenes de ese signo de la región, que tanto daño han causado a nuestros países. Eso augura un futuro prometedor, con desarrollo sustentable, con libertad de comercio, con mejor educación y salud, con infraestructura adecuada, con más competitividad, con empleos más calificados, con más inversiones, es decir, con mayor bienestar general.
27/10/2016 a las 1:23 AM
LA “GRIETA” EXISTE HOY MÁS QUE NUNCA……ANTES ERA ASISTENCIALISMO PREBENDARIO, HOY, ES TRANSFERENCIA DESDE LOS MÁS POBRES Y LA CLASE MEDIA HACIA LOS MUY RICOS Y PODEROSOS QUE VIVEN DEL “ESTADO” DE TURNO……MÁS MIERDA QUE GENERA MUCHA MÁS MIERDA, FARSA, AJUSTE, FRUSTRACIÓN Y POBREZA……(CERO DE PROGRESO E INVERSIÓN)……
CON ESTE “MODELO” DEL TARTA Y SUS “CEOS”, NOS TERMINAMOS DE RECIBIR DE PAUPÉRRIMOS CONGOLEÑOS……¿HABRA QUE APRENDER A HABLAR EN DIALECTO “BANTÚ” ??……OH, MY GOD !!!……
28/10/2016 a las 12:22 AM
…QUE JAMAS PODREMOS CERRAR EN ARGENTINA …..!!!
http://41.media.tumblr.com/fefe652a334b513587a0fa7edfb808ab/tumblr_nj46obh7wI1sqog9jo3_1280.jpg