Por Carlos Tórtora.-

Como es lógico y con Cristina Kirchner candidata más aún, la provincia de Buenos Aires recuperó toda su centralidad política. Así es que el armado electoral de la Capital para octubre está en buena medida supeditado a la elección legislativa bonaerense. Pero la especulación es limitada, porque la presentación de las listas de candidatos a senadores y diputados nacionales vencerá el 17 de agosto, veinte días antes de la elección provincial del 7 de septiembre. Esto hace que las especulaciones políticas sean muy limitadas ya que, por ejemplo, en la Ciudad los partidos deberán tomar sus decisiones sin saber los resultados bonaerenses.

Para el PRO porteño y en particular para Jorge Macri el panorama está muy complicado. Javier Milei acepta volver a dialogar con Mauricio Macri pero castiga sin piedad a su primo: primero lo dejó con la mano extendida en el Tedeum del 25 de mayo y luego su hermana Karina rechazó incluir en la alianza Pro-LLA a todos los dirigentes allegados al Jefe de Gobierno que estaban en la nómina de candidatos que le arrimó Cristian Ritondo.

En la Casa Rosada las versiones convergen: Milei quiere que Patricia Bullrich sea senadora por Capital en octubre y que LLA obtenga un triunfo electoral mayor que el del 18 de mayo. No hay señales de que los libertarios le ofrezcan al PRO ser su aliado; simplemente quieren barrerlo del mapa electoral.

Una negociación muy difícil

Lo más probable es que en los próximos días Karina y Pilar Ramírez empiecen a negociar con Jorge Macri y sus operadores. Para el PRO, sumarse a una marcha triunfal de Bullrich podría ser un suicidio político y el presagio de que en el 2027 la Ciudad la gobernarán los libertarios.

Pero el camino inverso también es muy riesgoso. Jorge Macri podría rearmar una especie de Juntos por el Cambio con Martín Lousteau y Elisa Carrió. ¿Pero sería posible que el PRO compita con LLA en Capital mientras es su aliado en Buenos Aires? Algo así sería realmente insólito.

Si nos atenemos a la inexistencia de combatividad alguna que hoy manifiesta Mauricio Macri, el PRO podría marchar hacia ser absorbido por Milei hasta en la Ciudad. Pero todavía pueden pasar muchas cosas imprevistas.

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