Finalmente el ex presidente brasileño, Luis Inácio Lula de Silva, se entregó a la policía luego de resistir durante varias horas en su bunker del sindicato de los metalúrgicos en San Pablo. Fue la crónica de un desenlace anunciado. Desde que la Corte Suprema de Justicia le denegó el hábeas corpus que había presentado por 6 votos contra 5, la suerte de Lula quedó marcada con fuego. Por supuestos actos de corrupción que habría cometido durante su presidencia, el más popular presidente brasileño fue literalmente borrado de la competencia por la presidencia de la nación que tendrá lugar en octubre próximo. Porque ese fue el objetivo que se buscó desde el principio: proscribir a Lula, impedir por cualquier medio que el líder del PT retorne al poder. Los grandes medios, el Poder Judicial y el ejército decidieron en nombre del pueblo que Lula no debía regir otra vez los destinos del país. Lo que sucedió en Brasil fue, lisa y llanamente, un golpe de Estado. Todo comenzó con la destitución de la antecesora de Lula, la también petista Dilma Rousseff, que fue echada a patadas del gobierno por razones aún no esclarecidas. Lo cierto es que nada pudieron probarle en su contra. Pero la derrocaron sin miramientos. Pero Dilma no era la presa apetecida. Fue tan solo un paso intermedio para el logro del verdadero objetivo: tumbar al verdadero enemigo, Lula. Fue una operación perfectamente orquestada que contó seguramente con el visto bueno de Estados Unidos. A diferencia de los golpes de Estado tradicionales, en esta oportunidad la fuerza de choque fue el Poder Judicial. Desde el juez de primera instancia Moro hasta la Corte Suprema, dicho Poder actuó como una verdadera fuerza de tareas. Una verdadera vergüenza. Un oprobio para Sudamérica.
Las escenas que se vieron ayer (sábado 8) en el búnker de Lula fueron espantosas. Durante horas enfervorizados manifestantes pretendieron lograr lo imposible: que Lula no se entregara. Incluso llegaron a impedir momentáneamente que el ex presidente se fuera del lugar para tomar el avión que lo llevaría a la prisión de Curitiba. No quedó claro si se trató de una estrategia del propio Lula o, en cambio, de una decisión desesperada de los propios manifestantes. Todo parece indicar que se trató de lo segundo. Finalmente, cuando ya era de noche se produjo lo que tenía que pasar: Lula se entregó y desde anoche está preso. De esa forma, el orden conservador brasileño consiguió lo que se propuso desde el principio: proscribir a Lula. Porque lo que acaba de pasar en Brasil es eso: prohibir a Lula presentarse en octubre. Una vez más quedó en evidencia lo peligrosa que puede llegar a ser la derecha conservadora cuando tiene miedo. Como esos animales feroces que están heridos, la derecha conservadora brasileña viene desde hace tiempo dando zarpazos desesperados para herir de muerte a su enemigo. Finalmente lo logró. El tiempo dirá si Lula logrará sobrevivir políticamente o no.
Como era previsible el gobierno de Macri guardó durante todo este lamentable proceso un silencio ominoso. Una actitud lógica de parte de un presidente que apoyó desde el principio el golpe de Estado contra Dilma Rousseff. Macri ve a Temer como un presidente “amigo”, una persona confiable que habla su mismo idioma. Pero lo que verdaderamente causa asombro es el silencio de la Unión Cívica Radical, del más que centenario partido que durante nuestra ajetreada historia fue víctima de varios golpes de Estado. Cuesta entender que una fuerza política que experimentó en carne propia lo que acaba de pasar con Lula no haya salido públicamente a solidarizarse con él. Este ominoso silencio pretende sepultar los golpes de Estado que sufrió en 1930, 1962, 1966, 1989 y 2001.
En septiembre de 1930 Hipólito Yrigoyen fue derrocado y alojado en la isla de Martín García. Inmediatamente la Corte suprema convalidó el atropello. El orden conservador no había tolerado el retorno del “peludo” al poder. Si bien el presidente jamás atentó contra sus intereses, la oligarquía lo despreciaba por que no lo consideraba de su propio palo. Otros seis años de Yrigoyen en la Rosada le resultaba intolerable. Durante la siguiente década, llamada “infame”, el radicalismo estuvo proscripto y fue víctima de persecuciones de todo calibre. Los radicales parecen haber olvidado que quienes derrocaron al “peludo” son los abuelos de quienes hoy gobiernan la Argentina. Es la misma gente. Son los mismos valores.
En marzo de 1962 fue derrocado Arturo Frondizi, líder del radicalismo intransigente. En esta oportunidad el intelectual presidente fue víctima del feroz antagonismo entre el peronismo y el antiperonismo. Frondizi intentó quedar bien con Dios y con el Diablo. Terminó como Tupac Amaru: descuartizado. Frondizi debió soportar innumerables cuestionamientos de parte de unas Fuerzas Armadas altamente politizadas, como lo están ahora las Fuerzas Armadas brasileñas. ¿Se han olvidado de esto los radicales?
En junio de 1966 fue derrocado el radical del pueblo Arturo Humberto Illia, un médico de Cruz del Eje honrado y decente. Lamentablemente, la proscripción del peronismo le jugó en contra. Pese a gobernar como un genuino demócrata, el espíritu de intolerancia que se respiraba en aquel entonces lo terminó eyectando del poder. ¿Se olvidaron los radicales cómo fue echado Illia del poder? A los empujones. Una falta absoluta de respeto por la investidura presidencial y el propio Illia.
En junio de 1989 Raúl Alfonsín le comunicó al pueblo que había decidido adelantar la entrega del mando presidencial seis meses antes de lo previsto por la Constitución Nacional. El líder de Renovación y Cambio se mostraba impotente para contener la inflación y garantizar la seguridad. En agosto de 1988 el presidente había sido abucheado en Palermo, sede de la Sociedad Rural. ¿Se olvidaron los radicales de ese hecho bochornoso? Quienes le faltaron el respeto son los descendientes de los golpistas de 1930, 1962 y 1966. Seguramente están contentos con lo que está pasando en Brasil. Alfonsín fue víctima de un golpe de Estado no tradicional. No tuvo a las Fuerzas Armadas como protagonistas sino al poder económico concentrado, el mismo poder que mucho tiene que ver con la proscripción de Lula.
En diciembre de 2001 Fernando de la Rúa se escapó de la Rosada en helicóptero. El país era un caos. El corralito había enfurecido a sus votantes quienes, encolerizados, coparon la Plaza de Mayo exigiendo su renuncia. Aconsejado por uno de sus hijos, Antonio, De la Rúa invitó al peronismo a conformar un gobierno de unidad nacional. Acantonado en San Luis el peronismo nada hizo por evitar su caída. ¿Se olvidaron los radicales de esa tragedia? Porque no ocurrió hace cien años. Fue a principios de este siglo.
Los radicales saben muy bien lo que significa sufrir un golpe de Estado. Saben lo que significa ser perseguidos, proscriptos, prohibidos. Yrigoyen y Frondizi fueron detenidos. Illia fue echado a patadas, Alfonsín fue insultado en Palermo y De la Rúa abandonó el poder por la puerta de atrás. Muchos e importantes dirigentes sufrieron, a lo largo de la historia, cárcel, persecución y exilio. La UCR sabe perfectamente lo que está sufriendo Lula en este momento. ¿Cómo creen los radicales que hubiera actuado Yrigoyen frente al atropello que se está cometiendo con Lula? ¿Creen que se hubiera quedado callado? ¿Cómo creen que hubiera actuado Raúl Alfonsín? ¿Piensan que se hubiera quedado de brazos cruzados? El ominoso silencio de la UCR actual frente a los graves hechos que están sacudiendo a nuestro gran vecino condena a la irrelevancia estos trágicos hechos que hacen a su esencia como fuerza política democrática y republicana. El radicalismo y su historia no merecen semejante afrenta.
Hernán Andrés Kruse
08/04/2018 a las 10:35 AM
Señor Krause. Lula es indefendible. Tanto o más corrupto que la casta político judicial argentina.
Respecto a los radicales, nacieron golpistas y fueron los siempre golpeadores de las puertas de los cuarteles.
08/04/2018 a las 11:22 AM
Mi estimado Andrés Krause, te olvidas que la UCR comenzó su periplo con revoluciones, y no de palomas? Estoy totalmente de acuerdo con el post de Roberto Oscar Gonzalez.
La Revolución del Parque, también conocida como Revolución de 1890, fue una insurrección cívico-militar producida en la Argentina el 26 de julio de 1890 dirigida por la recién formada Unión Cívica, liderada por Leandro Alem, Bartolomé Mitre, Aristóbulo del Valle, Bernardo de Irigoyen y Francisco Barroetaveña, entre otros. La revolución fue derrotada por el gobierno, pero de todos modos llevó a la renuncia del presidente Miguel Juárez Celman, y su reemplazo por el vicepresidente Carlos Pellegrini.
08/04/2018 a las 11:26 AM
La cantidad de víctimas causadas por la Revolución del 90 nunca ha sido bien establecida. Distintas fuentes hablan desde 15024 hasta 300 muertos,25 o en forma indiscriminada de 1500 bajas sumando muertos y heridos.26
En el Cementerio de la Recoleta se levantó un panteón en memoria de los caídos en la Revolución del Parque. Desde entonces, cada año, la Unión Cívica Radical realizaba una marcha de fuerte contenido político desde el centro de la ciudad hasta el panteón.
En el Panteón de los Caídos en la Revolución del Parque se encuentran enterrados también Leandro Alem y los presidentes radicales Hipólito Yrigoyen y Arturo Illia.
08/04/2018 a las 11:26 AM
Luego de la revolución la Unión Cívica comenzó a polarizarse detrás de las dos grandes tendencias que convivían en su seno, una más conservadora y conciliadora con el roquismo encabezada por Bartolomé Mitre, y la otra más combativa y enfrentada con el régimen de poder impuesto por Roca, encabezada por Leandro Alem. En 1891 esas diferencias llevaron a la fractura de la Unión Cívica en dos partidos: la Unión Cívica Nacional dirigida por Mitre, y la Unión Cívica Radical dirigida por Alem.
La Unión Cívica Radical utilizaría reiteradamente la lucha armada para responder a la falta de elecciones libres. En el futuro la UCR realizaría dos grandes insurrecciones armadas conocidas como Revolución de 1893 y Revolución de 1905, y otros varios levantamientos menores o locales. Ante la amenaza de nuevos levantamientos armados, en 1910 el recién elegido presidente Roque Sáenz Peña hizo un pacto secreto con Hipólito Yrigoyen para sancionar una ley estableciendo un sistema capaz de garantizar elecciones libres. La Ley fue sancionada en 1912, estableció el sufragio secreto y universal para varones, conociéndose como Ley Sáenz Peña.
08/04/2018 a las 11:31 AM
https://www.youtube.com/watch?v=whFD6qPs9A8
08/04/2018 a las 11:54 AM
VIVA LA PATRIA!!!
08/04/2018 a las 11:52 AM
El autor tiene todo el derecho del mundo a dar su opinión y la respeto, pero no la comparto en absoluto. El socialismo latinoamericano, que en realidd es el comunismo de la URSS implantado luego de la guerra fría, ha sembrado el terror en todo el continente y nuestros soldados por defender la república y las vidas de inocentes, hoy purgan prisión mediante juicios payasescos. En cambio en Brasil, se ha dado un juicio con todas las garantías de la defensa en juicio y se probó la corrupción de Lula, esta sentencia llegó hasta la Corte y en un público debate televisado al país, se ratificó la sentencia de prisión. Por lo tanto se ha cumplido con la ley. Si le duele en los riñones al autor de la nota lo lamento, a muchos argentinos nos duelen los años de sangre del terrorismo y los años de corrupción kirchnerista con todos sus líderes no solo libres, también indemnizados, nombrados en el gobierno, subvencionados de por vida, homenajeados como si fueran ciudadanos merecedores de tales actos, cuando en realidad son merecedores de la repulsa y la cárcel.
08/04/2018 a las 12:54 PM
El Padre de Alem fue quien inició en la Masonería a Don Juan Manuel de Rosas, y a su caída fue fusilado y colgado en Plaza de Mayo. Le Dió a Rosas las Llaves para que los Ingleses y Rosas Comerciaran y Chorearan a “rajacincha”. La corona inglesa le Otorgó Asilo, y 8o Hectáreas de Campo en Shouthampton.
08/04/2018 a las 1:31 PM
¿POR QUE SE EXILIÓ ROSAS EN INGLATERRA?
Las razones
Muchos que no saben que decir contra Rosas, utilizan el argumento que era “pro-ingles” y “la prueba es que se exilió en Inglaterra”. Es un argumento tan cretino, como acusar al Libertador San Martín de “afrancesado” porque, amenazado de muerte en su Patria, se exilió en Francia.
Las razones por las que Rosas se exilió fue a Inglaterra son muy sencillas:
Los Ingleses siempre utilizaron la estrategia de “deshacerse del enemigo permitiéndole escapar” (Filosofía Sun Tzu). La usaron muchas veces en la guerras de Europa y la usarían también en América. Rosas respetó a los ingleses de Bs.As. (y los tratados de 1825 de nación favorecida que obtuvieron a cambio de reconocernos la independencia) pero se opuso encarnizadamente al libre comercio y la libre navegación de los ríos, objetivo buscado por los ingleses (y franceses).
Los brasileros (aliados de siempre del imperio ingles), en virtual guerra con Rosas, tentaron a Urquiza (jefe del ejército de la Confederación contra Brasil) para que se revele contra Rosas. Urquiza, entre otras razones por ambición personal y económica (que hasta el mismo Sarmiento le echa luego en cara) en alianza con los brasileros derroca a Rosas. Si bien se arrepiente en forma casi inmediata, el error ya estaba hecho y los Ingleses consiguieron su objetivo en gobiernos posteriores.
Ahora bien: ¿porque Rosas fue a Inglaterra?: derrotado Rosas por Urquiza y brasil a Rosas le quedaban dos opciones: entregarse como lo hizo Chilavert, sin resistencia, para ser fusilado por la espalda (por Urquiza), o entregarse a su verdadero vencedor.
Rosas optó por esto último y no tuvo un exilio sino una prisión disimulada en una granja de Inglaterra, donde vivió humildemente de su trabajo diario. (Llevó un cajón de papeles y documentos y unos pocos patacones en el bolsillo) ¿Porque lo recibieron los Ingleses?… muy sencillo…para “deshacerse del enemigo permitiéndole escapar”, para “tenerlo controlado” y de paso “tener controlados” a los gobiernos de la Confederación…“o les mandamos nuevamente e Rosas” . Si en cambio lo mataban, lo hubieran convertido inmediatamente en un mito. Si hubiera ido a otro país, podría regresar a la Confederación. Rosas recibió ofertas en ese sentido desde su patria, pero se negó terminantemente a regresar ilegalmente contra un gobierno constituido.
Hay otra razón para que Rosas se exilaran en Inglaterra: en aquella época, Inglaterra era el único país con estabilidad políica. El Propio San Martín en su madurez estuvo a punto de exiliarse en Inglaterra cuando los desórdenes en Francia no le daban seguridad personal.
Rosas no fue “enemigo” de los ingleses. El propio cónsul ingles testimonia que se respetaron a los súbditos ingleses, sus bienes y propiedades inglesas aún durante el bloqueo Ingles.
Rosas no fue “enemigo” de los ingleses: simplemente los puso en su lugar.
Otros argumentos (1)
¿Por qué Rosas se fue a Inglaterra después de Caseros?
“¿Si Juan Manuel de Rosas era tan atibritánico, por qué eligió Inglaterra para vivir su exilio?”
Es una pregunta que he oído muchas veces; antes que nada debe decirse que Rosas no era antibritánico sino argentino, que no es lo mismo: luchó contra los ingleses cuando se metieron con nosotros, y los respetó cuando nos respetaron. No tenía motivo de inquina contra ellos después que reconocieron la victoria argentina en el tratado Southern-Arana de 1849.
Con los ingleses se entendió bien; con quienes nunca pudo entenderse fue con los anglófilos.
A los ingleses les pasó lo mismo. Quisieron vencer a Rosas y este contestó a la agresión con el gesto heroico de la Vuelta de Obligado. Pero estar en guerra contra extranjeros no significa odiarlos: los ingleses eran patriotas que combatían por el engrandecimiento de su patria, y Rosas era un patriota que luchaba en defensa de la suya. Los ingleses, como los franceses, admiraron el gesto de Rosas: ellos hubieran hecho lo mismo de haber nacido argentinos. Lord Howden llegado a Buenos Aires por 1847 para hacer la paz, fue apasionado admirador de Rosas. Lo cual no quiere decir que dejara de ser muy inglés y tratase de sacar las ventajas posibles para su patria.
Para el buen inglés no había cotejo posible entre Rosas y los unitarios. Aquél era un enemigo de frente, que los había vencido en buena lid, y digno de todo respeto; en cambio éstos eran agentes sin patria que necesitaba como auxiliares en la guerra, pero a los cuales despreciaba. Los pagaba, y nada más.
Esta posición de los imperios con sus servidores nativos, no la pudo entender Florencio Varela cuando fue a Londres en 1848 a gestionar a Lord Aberdeen la intervención permanente británica en el Plata, el apoderamiento por Inglaterra de los ríos argentinos, y el mayor fraccionamiento administrativo de lo que quedara de la República Argentina. Fue don Florencio a Londres muy convencido de que los ingleses lo recibirían con los brazos abiertos por estas ofertas, pero Aberdeen lo echó poco menos que a empujones del despacho: le dijo claramente que Inglaterra no necesitaba el consejo de nativos para dirigir su política de expansión en América, y sabía perfectamente lo que debería tomar y cuándo podía tomarlo; que Varela se limitara a recibir el dinero inglés para su campaña en el “Comercio del Plata” en contra de la Argentina, sin considerarse autorizado por ello a alternar con quienes le pagaban.
Otra cosa les ocurre a los imperialistas con los nacionalistas. Los combaten con todas las armas posibles; pero íntimamente los respetan y admiran. Es comprensible que así sea. Tampoco un nacionalista odia a un imperialista: luchará contra él hasta dar o quitar la vida en defensa de la patria chica, pero no tiene motivos personales para malquerer a quien sirve con toda buena fe el mayor engrandamiento de la suya. Ambos – imperialistas y nacionalistas – podrán ser enemigos en el campo de batalla o en la contienda política, pero se comprenden, pues a los dos los mueve la pasión del patriotismo. Este de su patria chica. Aquél de la grande. No se puede odiar aquello que se comprende. En cambio al cipayo que vende su patria, no lo comprenden ni unos ni otros. Los imperialistas lo emplean a su servicio, pero lo desprecian.
Un auténtico nacionalista no es un anti: su verdadera posición es afirmativa y no negativa. En cambio un cipayo puede ser un anti: empieza, por ser antipatriota, y sigue por oponerse a todo imperialismo que no sea el de sus preferencias.
En tiempos de Rosas había unitarios antibritánicos por pro franceses, o antifrariceses por pro ingleses. Como hoy encontramos antisoviéticos, antiyanquis o antibritánicos, por ser defensores de otro imperialismo foráneo. Un verdadero argentino no entiende esas oposiciones: combatirá con uñas y dientes al imperialismo que quiera mandar en nuestra tierra, exclusivamente por ese hecho y sin llevar la lucha más allá.
Así lo hizo Rosas. Luchó contra los invasores europeos en Obligado y en cien combates y luchó contra sus auxiliares nativos. Venció a aquéllos, y les tendió la mano de igual a igual una vez que se comprometieron (en los tratados en 1849 y 1850) a reconocer la plena soberanía argentina. Perdonó a éstos en sus leyes de amnistía por deber de humanidad, pero no les tendió la mano de igual a igual: fueron siempre los “salvajes” sin patria que ayudaron al extranjero.
Juan Manuel de Rosas Por eso Rosas vivió sus últimos años en Inglaterra. Lo rodeaban gentes que sabían lo que era el sentimiento de patria y admiraban al Jefe de aquella pequeña nación americana que los venciera en desigual guerra. Por otra parte, Rosas no eligió el lugar de su exilio: el “Conflict” que lo llevó a Europa lo dejó en el puerto de Southampton, y allí se quedó los veinticinco años que le restaban de vida. Da la impresión de que, no siendo su patria, todo otro lugar era indiferente a ese gran criollo que fue Juan Manuel de Rosas.
Asi que, no hables pavadas.
08/04/2018 a las 2:51 PM
Señor “Jorge”: se ha expresado usted con una GRANDEZA… más que inusual en este Medio; puede decirse que ¡¡ni con lupa, y buscando específicamente!!.., puede encontrarse.
Haré llegar su digno aporte a gente que continuará mi tarea.
A sus órdenes.
Guille
08/04/2018 a las 4:21 PM
Fabuloso é histórico relato… y recordar también de que por algo el Gral.José de San Martín le entregó su ESPADA.—-
08/04/2018 a las 3:11 PM
SE PUEDE AGREGAR MUCHO MAS PERO SU COMENTARIO ES TAN ACERTADO Y ESCLARECEDOR QUE CONCUERDA CON AQUELLO DE QUE LO CONCISO ES DOBLEMENTE BUENO, TAMBIEN LA ECUANIMIDAD ES UNA VIRTUD SUPERADORA PARA CUALQUIER MORTAL.
SIGA PARTICIPANDO LA ARGENTINA LO NECESITA. ESTE TAMBIEN ES UN BUEN MEDIO, PRECISAMENTE POR LA TOTAL LIBERTAD DE EXPRESION SIN AMILANARSE CONTRA LAS ALIMAÑAS EXECRABLES QUE ACECHAN EN CONTRA DE LOS ARGENTINOS DE BIEN .
08/04/2018 a las 5:46 PM
Gracias por esta ilustrada explicación. Con un breve comentario se comprueba la veracidad de sus palabras: Tanto San Martín en Francia como Rosas en Inglaterra fueron hospedados y respetados como dos valerosos soldados, dignos de admiración. Ninguno de ellos, lamentablemente, tenía lugar en su Patria. Es nuestra historia, injusta con sus héroes.
08/04/2018 a las 5:47 PM
OTRO SI DIGO: Nuestra Patria sigue siendo injusta con sus héroes y defensores.
08/04/2018 a las 6:52 PM
¡¡Y bueno…….!!, habrá que dejar de “acariciar” la superficie con la siembra directa…, y clavar el arado a más de 30 centímetros.., para dar vuelta la tierra, aguantar que durante el barbecho se pudran las malezas haciéndose tierra.., y entonces volver a plantar con buena simiente.
08/04/2018 a las 11:48 PM
POR SER INJUSTA CON SU HEROES NADA PUEDE ESPERARSE HACIA SUS SUFRIDOS HABITANTES. DESDE EL VIRREINATO QUE SE TEJEN INTRIGAS PERSONALES Y DE GRUPO EN CONTRA DEL BIENESTAR GENERAL.
NO DE CASUALIDAD VENIMOS DE RODADA EN RODADA. POR LO TANTO ES NECESARIO REPROBAR DE INMEDIATO A QUIENES NOS MANCILLAN O ENDEUDAN EN SU PROPIO BENEFICIO, SIN DILACIONES NI VANAS ESPERANZAS.
08/04/2018 a las 10:17 PM
Hay Documentos: El Libro de Actas de la Logia del Gallego Alen, Custodiado por el Gran Oriente Argentino, y lo que se publicó en varias Revistas Masónicas: Don Juan Manuel Fue Iniciado Aprendiz, y alcanzó el Grado 4º (Maestro Secreto).
San Martín conoció al General Berresford, luchando contra Napoleón, (Berresford súbdito inglés y San Martín Militar Español). Berresfor lo invitó a Londres, donde conoció a Miranda, y por el Protocolo Masónico, se derivó la Iniciación de Miranda, San Martín y Bolívar, a Una Logia de Cádiz, donde fueron iniciados los tres, (no en forma simultánea).
San Martín además era Miembro Honorario, (Bajo la Espada), de La Gran Logia de Bélgica.
En cuanto a las 80 Hectáreas de campo que le donara la Corona Británica, están los originales Títulos de Propiedad, en el Condado de Southampton.
Hay Muchos Historiadores serios, que han publicado es información en sus Obras.
¡NO NIEGUEN LA REALIDAD!
08/04/2018 a las 3:12 PM
SIN DUDA EL TERCER GOBIERNO RADICAL YA IMPLOSIONO E HIZO IMPLOSIONAR AL REJUNTE SOCIALISTA PARA EL SAQUEO. LAS PRUEBAS A LA VISTA Y EN RAPIDO DESENCADENAMIENTO.
08/04/2018 a las 5:04 PM
Excelente y coincido totalmente con el histórico relato de Jorge 08/04/2018 at 1:31 PM con “detalles” que la mayoría ignoramos, y como así también con el aporte de
A.Schittino
08/04/2018 at 4:21 PM
………….Fabuloso é histórico relato… y recordar también de que por algo el Gral.José de San Martín le entregó su ESPADA.—
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