Por Guillermo Cherashny.-

Tal cual señalamos ayer, el gobierno privilegia la baja del dólar y de la inflación por encima de la acumulación de reservas, aunque ayer recibió 1500 millones de dólares del Banco Mundial y llegó a los 38.000 millones. Pero hay una clara preferencia por el deseo presidencial de llevar al divisa a $ 1000 y por ende bajar la inflación, a tal punto que ahora economía quiere modificar la composición del índice de precios por una canasta actualizada como la de CABA, que da mayor porcentaje a los servicios en detrimento de los alimentos, con el objetivo de bajar la inflación.

En cuanto a la acumulación de reservas, empieza a solucionarse por el acuerdo con el FMI y porque las aceiteras tienen más o menos 4.000 millones de dólares para liquidar de la cosecha vieja, o sea unos 1500/2000 millones por mes, por lo cual el objetivo acordado con el Fondo de tener 4000 millones de reservas positivas es muy factible.

Así las cosas, el miércoles fue un buen día para el gobierno, salvo por la caída del consumo, que marzo del 25 contra marzo del 24 dio una baja de 8% para una consultora y 5,6% a otra, y la industria en problemas por una avalancha de importaciones, entre ellas maquinaria usada desde Estados Unidos y también de chatarra, por lo cual en economía hay buenas y malas en este tiempo.

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