¡Que se embromen los privados!
Por Jorge Ingaramo.-
Para el Tesoro, hay dólares…
…y también capacidad para endeudarse a tasas exorbitantes. Usando escasas Reservas del BCRA y tal vez, contrayendo un nuevo préstamo Swap, ya anunciado por el Embajador de China en La Argentina, el Tesoro está zafando y se asegura de que, en los dos meses que le quedan al actual gobierno, no habrá mayores dificultades.
Así, la semana pasada, el Central debió pagar deudas provinciales y, por ende, perdió MU$S 787 de Reservas. El Ministro Axel anunció que se pagará el BODEN 2015 (unos MU$S 5.900) hoy lunes, y que “a pedido del público”, crearán un nuevo Título, el BONAR 2020, bajo ley argentina, con un cupón que paga 8% anual y un monto a licitar de MU$S 500.
Se dice que MU$S 2.200 quedarían en La Argentina y hay que tratar de captarlos, ya sea con la colocación de Títulos o vía depósitos en dólares, en el sistema financiero local (paga menos que el Bonar), para que una parte pueda ser computada como Reservas. Hechas las cuentas de la pérdida neta de divisas por el BCRA, Vanoli procederá a formular su demanda del nuevo Swap.
En una palabra, el Tesoro resuelve sus problemas de divisas, sin modificar su pauta de gasto público y cargándole la mochila al futuro gobierno, no sólo por el financiamiento del déficit, sino también por la cancelación de compromisos anteriores.
Siguen recaudando bien
Pese a la catástrofe del comercio exterior argentino, la recaudación de setiembre (AFIP) sigue siendo muy buena, sobre todo para las provincias. Veamos detalles:
– La recaudación por Derechos de Exportación cayó, en setiembre, 28,5% con respecto a agosto y 19,5% interanual. Se va profundizando la retención de granos y derivados, a la espera de un Tipo de Cambio comercial más elevado.
– Como consecuencia de ello, la recaudación de Aduana cayó 10,5% mensual (versus agosto) y, en lo que va del año, aumentó apenas un 7,8% con un aporte del 13,8% de incremento en los Derechos de Importación (aquí influye la tasa de devaluación que, en lo que va del año, ronda el 10%, o sea que no es que se haya importado mucho más sino que -en pesos- la AFIP consigue capear -un poco- el temporal de la falta de divisas para el sector privado).
– Los impuestos con fuente de actividad interna crecieron 32,7% interanual (agosto), contra una inflación del Congreso del 26,6%. La acumulación de distorsiones sigue siendo bastante efectiva (Ganancias mejoró 40,4%; Naftas lo hizo al 30,9% y el Impuesto al Cheque aumentó 29,9%, todos valores por encima de la inflación). El total de Recursos Tributarios aumentó un 31,1%; con mejoras -para la Administración Nacional- de apenas el 25,3% (se ve el impacto de la menor recaudación aduanera, no coparticipable) y, para las provincias, del 36,7%.
– En lo que va del año, la Administración Nacional recolectó 26,8% más (igual que la inflación) mientras que las provincias obtuvieron una mejora del 38,6%.
En síntesis, hay un deterioro evidente en el comercio exterior, que seguramente se profundizará en los dos meses que le quedan al gobierno, pero el Estado se “salva solo”, con una tributación distorsiva que grava por encima de sus posibilidades, a una dañada actividad privada.
Las finanzas públicas nacionales en los primeros ocho meses
La ASAP (Asociación Argentina de Presupuesto) acaba de publicar, base devengado, su habitual Informe, para agosto, en el cual se analiza la Ejecución Presupuestaria en el lapso de los primeros ocho meses.
– La ASAP sostiene que, en lo que va del año (a agosto), el Resultado Financiero es deficitario por M$ 102.720, un 1,9% del PBI proyectado para 2015. Deducidos los Pagos de Intereses, arriba a un Primario en rojo, por M$ 47.827, que contrasta con el Superávit Primario de M$ 20.700 en igual período de 2014.
– En comparación con lo presupuestado para 2015, se observa un desvío que se explica “principalmente por un crecimiento del gasto por arriba de lo esperado en el Presupuesto aprobado y, en menor medida, por una disminución en la percepción de recursos”.
– Como nosotros somos muy traviesos, les sumamos a los desequilibrios las llamadas Rentas de la Propiedad, que en el Presupuesto son un ingreso genuino, pero en la realidad, son simples transferencias del Banco Central y la ANSES, entre otros. Por lo general, tienen impacto inflacionario, no sólo por la emisión de Base Monetaria involucrada, sino también por su contribución a la formación de expectativas. Así, las Rentas presupuestadas superaban los M$ 155.800, de las cuales ya se han ejecutado M$ 71.411. A estar por el último Informe Monetario del Central, esta institución emitió M$ 88.365 destinados al Sector público, que constituyen la causa de la inflación del 2% mensual observada en lo que va del año.
– Computando déficit financiero más Rentas de la Propiedad, el desequilibrio en los primeros ocho meses, llega a M$ 174.100, es decir un 6,3% del PBI. Pero eso no es todo. Falta la incorporación (al ejecutado) de casi M$ 56.000 por el pago de los BODEN 2015, que no figurarán en el llamado Resultado Financiero del Tesoro, pero sí lo harán en la cuenta de Títulos Públicos que forma parte del Activo del BCRA. No debería asombrarnos que “el verdadero” desequilibrio financiero anual del Tesoro, que usa al BCRA como rueda de auxilio, ronde los 8 puntos del PBI.
El Sistema Financiero se porta bien
En lo que va del año (al 25 de septiembre), la Base Monetaria creció 14,1% (a razón de 1,5% mensual), mientras que el crédito al sector privado lo hizo un 18,9% (al menos una sardina); los Depósitos Totales al 17,4%, los de Titulares Privados un 23,3% y, entre ellos, los “a plazo”, un 41,2%. Por su parte, los depósitos privados, en dólares, crecieron 18,8%, lo cual es una buena noticia, aunque parte de ellos pueden ser dólares traídos por YPF y aún no gastados.
Como se ve, los bancos captan para seguir renovando préstamos al Tesoro, y también para renovar LEBACs (aunque en volúmenes decrecientes, para las emitidas en pesos). Al no tener al Central como demandante marginal, están empezando a dar crédito a la actividad productiva. De allí la diferencia entre el 18,9% de suba versus un aumento de apenas el 9,7%; en el M1, o sea el dinero híper-líquido.
Como se dijo muchas veces, el Central ya no puede aumentar -en términos netos- su deuda en LEBACs con los bancos. La duration de la misma es de apenas 112 días, en promedio y las tasas que está pagando van desde el 26,04% (vencimiento 06/01/16) al 28,25% (vencimiento 08/06/16). En algún momento, llegaron a representar el 69% de la Base Monetaria, pero desde que en abril el Tesoro empezó a financiarse con deuda propia, bajaron al 64% de aquélla.
Otro cambio de magnitud se da en la variación interanual del 149% en el stock de LEBACs en dólares, que ya suma MU$S 1.893. Siempre se sostuvo en esta columna, la conveniencia de evitar la creación de Base en pesos y de desarrollar un Sistema Financiero en dólares, para desalentarlos “a pasear por el mundo”. Es mejor conseguir financiamiento al 4% anual en dólares, vía Banco Central, que emitir Títulos como el que debutará el próximo martes, con un cupón que rinde el 8% anual en dólares. Los bancos son más confiables que el Tesorito de Axel. Pero, el Central no le puso demasiado énfasis a esta política, sino más bien trató de sacarse de encima el problema del financiamiento monetario en pesos, del déficit público. En parte, lo está logrando.
Actividad económica e inversión
Según datos del Estudio de Ferreres, el nivel de actividad creció 0,8% en el acumulado de los primeros ocho meses. En agosto, lo hizo al 2,0% interanual, pero si uno lo compara con el mismo mes de 2013, cayó 3,2%. En los ocho meses, la Construcción y el Agro proveyeron subas del 6,6 y 6,3%, respectivamente, mientras que la Industria cayó 0,1%.
El Sector Manufacturero está estancado desde julio de 2014, pese a que creció 1,9% interanual en agosto, porque se lo compara con el peor mes de 2014. En el acumulado de los ocho meses, sobresale Minerales no Metálicos (+8,7%), empujado por la Construcción y, sorprendentemente, Alimentos crece 4,4%. El sector de Químicos (por influencia del derrumbe del biodiesel y la menor demanda de agroquímicos) cayó 4,3%; mientras que Maquinaria y Equipos y la Metálica Básica lo hicieron en 5,9 y 8%, respectivamente.
Finalmente, la Inversión creció 3,2% en agosto, interanual, alcanzando el 20% del PBI. Lamentablemente, está un 10,3% por debajo de agosto de 2013. En el acumulado interanual para enero-agosto 2015, la Construcción, con el 6,3% de suba (representa 2/3 de la Inversión total) es el sector responsable de la mejora coyuntural.