Por Germán Gorraiz López.-
Wright Millsen, en su libro “The Power Elite” (1956), indica que la clave para entender la inquietud norteamericana se encontraría en la sobre-organización de su sociedad. Así, establishment sería “el grupo élite formado por la unión de las sub-élites política, militar, económica, universitaria y mass media de EEUU”.
Dichos lobbies de presión estarían interconectadas mediante “una alianza inquieta basada en su comunidad de intereses y dirigidas por la metafísica militar”, concepto que se apoya en una definición militar de la realidad y que habría transformado la economía en una guerra económica permanente.
Doctrina de la Coexistencia Pacífica de Trump
En un discurso pronunciado en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), Trump afirmó «Soy el único candidato que puede hacer esta promesa: evitaré la Tercera Guerra Mundial». Asimismo, Donald Trump denunció la «excesiva cantidad de armamento que circula actualmente en el mundo» lo que supondría la asunción de la Doctrina del Aislacionismo de EEUU en el plano militar y la entronización del G-3 (EEUU, Rusia y China) como «primus inter pares» en la gobernanza mundial quedando de paso la UE, Japón, India y Brasil como convidados de piedra en el nuevo escenario geopolítico.
Ello sería un misil en la línea de flotación de los intereses geopolíticos del conocido como «Club de las Islas» con activos cercanos a los 10 trillones € y cuya cabeza visible, según el espía ruso Daniel Estulin, sería el financiero y experto diseñador de «revoluciones de colores», George Soros y que tiene perfilada la implementación del Nuevo Orden Mundial (NWO) que implicaría la recuperación del papel de EEUU como gendarme mundial siguiendo la Doctrina Brzezinski.
Brzezinski, en su libro «Entre dos edades: El papel de Estados Unidos en la era tecnotrónica»(1971) explica que «ha llegado la era de reequilibrar el poder mundial, poder que debe pasar a manos de un nuevo orden político global basado en un vínculo económico trilateral entre Japón, Europa y Estados Unidos», doctrina que implicaría el sometimiento de Rusia y China y que incluiría la posibilidad de un ataque nuclear preventivo por parte de EEUU utilizando misiles Trident II contra objetivos vitales rusos y chinos en el supuesto de declararse la Tercera Guerra Mundial.
El expresidente de EEUU Donald Trump (2017-2021) aseguró en sus redes que «nunca hemos estado tan cerca de la III Guerra Mundial» y que debe haber un «compromiso total para desmantelar el grupo de poder neoconservador globalista», responsable de arrastrar al mundo a «guerras interminables».
En el plano geopolítico, la victoria de Trump en el 2024 representaría el ocaso de la estrategia atlantista de Biden y Soros empecinados en defenestrar a Putin del poder, la firma de un acuerdo de Paz en Ucrania y el retorno a la Doctrina de la Coexistencia Pacífica con Rusia, lo que supondría la entronización del G-3 (EEUU, Rusia y China) como «primus inter pares» en la gobernanza mundial.
La doctrina de Trump de «Coexistencia pacífica» con Rusia, chocaría frontalmente con el sueño obsesivo de Soros y de la Open Society Foundation (OSF) de conseguir el sometimiento de Rusia, pues Rusia sería para George Soros la “ballena blanca que lleva décadas intentando cazar”.
Asimismo, el pacifismo trumpiano sería un misil en la línea de flotación del complejo militar-industrial que tiene perfilado para el próximo quinquenio la recuperación del papel de EEUU como gendarme mundial mediante la quinta fase del despliegue del escudo antimisiles en Europa (Euro DAM) y un incremento extraordinario de las intervenciones militares estadounidenses en el exterior (léase Nueva Guerra en Oriente Medio).
Soros y la trama anti-Trump
En la actualidad, la CIA se habría transmutado en el llamado Departamento de Seguridad Nacional (Homeland Security) y de la hidra-CIA habrían nacido 17 nuevas cabezas en forma de agencias de inteligencia que integrarían la Comunidad de Inteligencia de EEUU (la Cuarta Rama del Gobierno según Tom Engelhardt), agentes patógenos de naturaleza totalitaria y devenidos en Estado paralelo, verdadero poder en la sombra fagocitado por el “Club de las Islas” de George Soros y que se habría conjurado contra un Trump partidario de la Geopolítica Primus Inter Pares o G3.
Así, el aislacionismo geopolítico propugnado por Trump sería un misil en la línea de flotación de los intereses geopolíticos del conocido como “Club de las Islas” con activos cercanos a los 10 trillones € y cuya cabeza visible según el espía ruso Daniel Estulin, sería el financiero y experto diseñador de “revoluciones de colores”, George Soros y que procederá a gestar una trama contra Trump.
La paternidad de dicha trama sería atribuible a la llamada Alianza Democracia (DA), megaorganización fundada por George Soros en el 2005 y constaría de una primera fase mediante una ofensiva judicial contra Trump al estar involucrado en 4 procesos judiciales que buscarían su inhabilitación política para dejar paso al actual Gobernador de Florida, Ron DeSantis como candidato republicano a las Presidenciales del 2024 y que contaría con las bendiciones de los globalistas.
En el supuesto de no lograr su objetivo, Soros pasaría a la segunda fase de la trama consistente en la gestación de una trama endógena que intentará reeditar el Magnicidio de Dallas con el objetivo confeso de que EEUU retorne a la senda de las seudodemocracias tuteladas por el verdadero Poder en la sombra (Cuarta Rama del Gobierno).
25/03/2023 a las 6:00 PM
La globalizacion nunca funciono; lo mismo que la presidencia de Trump.
Los seguidores de Trump, cada uno se invento un Trump a su manera.
Los religiosos anti-aborto lo vieron como un anti-abortista; a pesar que anos atras habia dicho que era pro-aborto.
Los seccionistas y supremacistas surenos y los libertarios (no liberales), lo vieron como un seccionista y un libertario que iba a destruir el estado.
La realidad es que Trump no entiende muchascosas, no lee, no puede mantener la atencion en un escrito mas que 10 minutos; o en un mismo tema en una coversacion. Eso desesperaba a sus asesores, ministros y empleados; todos de su mismo partido y que habian creido en un Trump a su manera.
Descubrir que Trump no era lo que pensaban desilusiono a muchos incluido John Bolton.
Trump pedia «lealtad»; el problema es que en EEUU que un presidente pida lealtad a si mismo, es mal visto. Se entiende que el funcionario debe ser leal al pais; no al presidente.
Trump se hace famoso en un programa de TV, supuestamente echando gente de un supuesto empleo. Eso le gusto a personas con mentalidad extremista; y cada uno se invento un Trump a su manera.
Los discursos en manifestaciones de Trump, eran lo mas basico; de lo basico. Cosas como «linda gente», «buenos genes», soy inteligente, tengo un alto IQ, «vamos a hacer lo que se necesita» (nunca explicaba que es lo que se necesita).
Saco las leyes de control ambiental, de controles de vias ferreas, y de controles en el ambito bancario; que habia puesto Obama, para evitar otro 2008.
Las consecuencias estan a la vista; un tren contamino un pueblo; quebro el Banco Silicon Valley. Si hubieran continuado los controles puesto por Obama no hubiera pasado esto.
Trump no entendia, el por que de esos controles; pensaba que era algo que iba contra la empresa privada.
El problema con los empresarios al poder, como paso con Trump, Berlusconi y otros; es que tienden a pensar que un pais se maneja como una empresa. En una empresa el dueno, hace lo que quiere con su empresa. En un pais, un presidente no puede hacer lo que quiere con el pais.
No pienso que Trump es una mala persona; pienso que carece de informacion; lo mismo sus seguidores.