Tiempo de decisiones: polarización y convergencia
Por Jorge Raventos.-
El paso al costado que dio el viernes Francisco de Narváez, dejando libre la candidatura del Frente Renovador a la gobernación bonaerense, fue el aporte más notable a los sectores que aspiran a que Sergio Massa compita por la decisiva provincia de Buenos Aires y, de paso, no divida el voto opositor en la puja por la presidencia (es decir: que en esa categoría le dé la derecha a la postulación de Mauricio Macri).
¿Hasta dónde tensar la cuerda?
Sin duda, como se señaló oportunamente en este espacio, todo empuja a Massa “a concentrarse, más bien, en la conquista de la gobernación bonaerense, para asegurar ese territorio y continuar desde allí la conformación de su fuerza nacional”. Pero hasta ahora resulta difícil una convergencia con Macri, porque el líder del Pro se muestra seducido por las ideas puristas que despliega su pensador de cabecera, el ecuatoriano Jaime Durán Barba: el Pro no debería contaminarse con “la vieja política” (o con la política, en general). Estas ideas constituyen, si se quiere, un relato: aunque Macri ha reclutado a una buena cantidad de recién llegados a la política, muchos de los cuadros dirigentes del Pro (desde el presidente del partido al jefe de gabinete porteño y a su candidato a vicejefe, sin descartar al número uno de la Legislatura de la Ciudad Autónoma, por citar sólo a algunos) no nacieron precisamente de un repollo.
Los argumentos de Durán Barba, en cualquier caso, le sirven por ahora a Macri para endurecer su postura en una negociación que tiene fecha de vencimiento el próximo miércoles. Algo de eso insinuó Carlos Reutemann que será candidato a senador por Santa Fe en las listas del Pro: “No sé si no quieren tensar la cuerda hasta el final”, dijo.
La provincia y la presidencia
Desde el massismo (así como desde sectores empresarios) le reclaman a Macri que, sin necesidad de apartar a su propia candidata a la gobernación, María Eugenia Vidal, abra la posibilidad de que ella compita en las primarias con Massa en un espacio común. “Al fin de cuentas -señalan en esos ámbitos- si ella quiere ser gobernadora tendrá que ganarles a todos”. Macri no ignora la presión que se ejerce sobre él. Es una presión de los acontecimientos: si rechaza la convergencia y el oficialismo termina colocando a uno de los suyos en la gobernación (Por ejemplo: Aníbal Fernández) y se acerca a una victoria sin ballotage en la presidencial, su intransigencia tendrá un costo altísimo. Aunque hoy se respire un esperanzado triunfalismo bajo el pabellón amarillo, Macri, que sabe bien lo que se siente después de perder una licitación por centésimos, difícilmente quiera cargar con esa responsabilidad.
Massa estaría en condiciones, aún si la convergencia con el espacio del Pro no se concreta, de retroceder a la provincia sin perder la elegancia: el gesto de De Narváez se lo facilita. Podría dejarle el lugar a José Manuel De la Sota como candidato presidencial y exhibirse él como un candidato que sale a defender un territorio fundamental para las aspiraciones de ese espacio (y del conjunto de las fuerzas alternativas al kirchnerismo) como el bonaerense. En principio, las conversaciones con el cordobés siguen en pie: ambos aseguran que preparan una primaria del espacio pero tal vez el maquiavelismo de los hechos decida otra cosa.
¿Cambio o continuidad?
Los argumentos que difunde el gurú de Macri se sigue difundiendo en medios y consultoras: la idea de que el eje central de las elecciones es una disyuntiva: continuidad o cambio. Pero la realidad es más matizada que esa simplificación dicotómica.
En primer lugar, el cambio es un hecho consumado y constituye el telón de fondo del comicio más allá de quién sea el candidato que triunfe en las urnas. Lo sustancial de ese cambio empezó cuando el triunfo del Frente Renovador en las parlamentarias de dos años atrás puso fin a la ambición re-reeleccionista. El ciclo K quedó sin capacidad para determinar su sucesión que, en un régimen hipercentralizado como este y tras la muerte de Néstor Kirchner, sólo podía concretarse con la continuidad de su viuda. Como lo subrayan los adherentes más fervorosos del kirchnerismo, el liderazgo del modelo actual es de la señora de Kirchner. Pero ella no puede ejercerlo y debe dejar la presidencia en diciembre.
He allí el cambio: concluye un ciclo y se inicia otro. Aunque la identidad del triunfador no sea totalmente indiferente, lo que está a la vista es que entre los principales competidores hay denominadores comunes. Un dato: representantes muy cercanos de Daniel Scioli, Mauricio Macri y Sergio Massa acaban de concretar una visita compartida a Washington, que incluyó contactos con el Departamento de Estado. Florencio Randazzo denunció que se trataba de una traición al proyecto de la Presidencia, lo que pareció evidenciarse cuando se supo que ella, en su reciente viaje a Moscú mantuvo conversaciones secretas con el principal acusado de espionaje de Estados Unidos, Edward Snowden, asilado en Rusia.
Hoy las fuerzas que más se identifican con la palabra cambio no reclaman la erradicación de políticas sociales desarrolladas en esta década y, por su parte, el casi seguro candidato del oficialismo no ignora la necesidad de modificar rumbos. “Del crecimiento tenemos que pasar al desarrollo”, sugiere Scioli en sus discursos.
Inicios y epílogos
El ciclo K se inició en un contexto particular: el país contaba con una capacidad instalada vacante, producto combinado de la fuerte inversión de la década del 90 y de la caída productiva de los años de la Alianza. La presencia de China en los mercados impulsó hacia arriba la demanda (y los precios) de nuestros productos agroalimentarios. Duhalde, Remes Lenicov y Lavagna habían rectificado a cuchillo la distorsionada convertibilidad que subsistió durante el gobierno de la Alianza.
Así, el kirchnerismo pudo estimular el consumo, continuar la recuperación que había iniciado Duhalde y encarar un fortalecimiento de su poder. Para esto instrumentó la confrontación y la dispersión de los adversarios como armas de hegemonía. La inserción en el mundo se subordinó a los objetivos domésticos y, en el campo regional la etapa coincidió con un momento de auge del eje “bolivariano” y la retórica “antiimperialista”.
Conviene observar las circunstancias del final del ciclo: el gobierno se precia, con razón, de que concluye sin la crisis que muchos auguraban, pero eso no impide observar que la producción está largamente estancada, la inflación se ha naturalizado y el país está aislado internacionalmente. Termina sin haber resuelto su relación con los sectores más competitivos de la economía: el sector agroalimentario sigue sufriendo el acoso oficial. El modelo llega a diciembre con la lengua afuera. Se ha vuelto insostenible.
Sus aliados preferidos en la región están virando o hundiéndose: Raúl Castro abrazado con Obama es el símbolo del viraje. Muerto el comandante Chávez, la Meca bolivariana aceleró su crisis y espera que el Papa le facilite una buena salida.
Francisco es, ciertamente, un hecho nuevo que da tono al cambio de ciclo. El kirchnerismo que hostigó al obispo Bergoglio se hinca ante el Papa, que tutela este epílogo para facilitar el paso de la era de la confrontación a la de la unión nacional y del aislacionismo estéril a una participación creativa y activa en el mundo.
Los vecinos ya están avanzando en ese camino: Dilma Rousseff se interna en un proceso de reformas y apertura económica con Europa y también con China y con México.
En el final, por motivos quizás menores (por urgencias financieras o por necesidades electorales), la propia señora de Kirchner debe asimilar cambios. La búsqueda de endeudamiento externo, la gestión de inversiones extranjeras para explotar riquezas energéticas o mineras y los acuerdos con China van en esa dirección (“En un lao pegan los gritos y en otra tienen los güevos”, diría Hernández).
Otro signo del fin de ciclo: el kirchnerismo necesita abrazarse al peronismo en busca de un salvavidas. De hecho, su candidato presidencial cuenta con el apoyo del peronismo territorial mientras es resistido por el kirchnerismo ortodoxo. La Casa Rosada abre con cautela las compuertas de la admisión.
¿Cambio versus continuidad? Más bien, cambio y continuidad. Lo que está en marcha es un ciclo nuevo, no una revolución.
Más allá de la atmósfera de polarización y de las tensiones propias de la competencia y la negociación políticas, el nuevo ciclo se abre con un tono dominante común a los principales candidatos: la búsqueda del diálogo y los acuerdos. Aproximaciones, si se quiere, a la búsqueda de unión y convivencialidad que reclama Francisco desde Roma.
Un nuevo período que se base en la unión nacional, la convivencia política y la reinserción internacional es la vía para una transformación decisiva.
Que ocurre en Argentina, no pueden o no quieren ver el bosque y se concentran en un arbolito?
Scioli es la vibora que va trepando lentamente para llegar a la manzana sagrada, pero para palatear el fruto el necesita el tronco y por esa razon se asocio a la tendencia colectivista masiva en Argentina, fue, es y sera un soldado de Cangallo, de los Kirchner y de quien quiera que le haya enjabonado la pendiente al adversario.
Massa es la arania que teje la fina malla donde muchos quedan pegados y no llegaran a tiempo a las urnas para depositar su voto. En esa misma fina malla el rocio y la llovizna quedara pegada formando una ligera y cristalina pelicula que reflejara su imagen sonriente con el photoshop y al mismo tiempo cubreira el tronco por el que va ascendiendo sigilosamente Scioli.
El estrato natural de masa, su aspiracion dentro de la estructura del poder del Cangallismo, es la Gobernacion de Buenos Aires, pero el recibio la orden de inmolarse para lograr que gane el mas mejor. Scioli en este caso, que no solo se niega a blanquear su inestimable riqueza, sino que ha concretado pactos secretos con el establishment para garantizarles la inmunidad absoluta.
Los dos Alfiles le brindan cobertura a la reina y su sequito; el Rey esta a salvo en el panteon y en el CC; y al final de la historica revolucion de la triple alianza «montoneros, por un lado, erp cubriendo la retaguardia y en las alas: far,fap, fal, eln, pcml, ocpo y los luchadores de taco ralo y todo el chiquitaje; ellols tambien recibiran el preciado tesoro, Scioli el helicoptero y Massa la bonaerense.
Pero, -siempre hay un pero- en Argentina al igual que en cualquier otro mercado del mundo, los que tienen el queso, reparten los agujeros, pero la parte solida esta debidamente protegida contra las salvajes incursiones… se debe votar eso que hay, ese producto que ofrecen en la bandeja de plata y en el plato de madera de algo-rrobo (el arbol predilecto del Monarca Mendez; penado por su vanidad) y de esa forma Argentina queda con una opcion, mas de lo mismo con Scioli o mas de lo mismo con una cubierta de dulce de leche y pizzicatos de colores, Macri.
Pero, Macri esta jugando una estrategia interesante. Lo han tentado de todos lados a que adquiera su propio Boudou cuando quieren que salga en la foto con Massa, pero el sabe que esa foto va a salir movida y se mantiene con Carrio, pero ojo al parche, porque hay muchas cosas que los argentinos ignoran de Carrio y una es su afeccion a los viajes y visitas a paises que descollan en el mundo de la justicia y si la gente de Macri gana un viaje gratis en las limousines y el Tango Patagonia uno y dos, la Carrio se puede colgar el crucifijo y Argentina sera testigo de un empalamiento que avergonzara hasta a los miembros de Estado Islamico para Irak y El Levante.
sr excelente su articulo lo felicito por el articulo .Muy claro pero profetico tambien ..Con esta gente no se puede esperar nada bueno para la ARGENTINA lo felicito nuevamente
Cada vez me convenzo mas que al mundo lo manejaban, desde hace tiempo.No mucho mas que trescienta familias.Ahora se habrán sumado algunas rusas y chinas .Y un mejicano.
Antes la Patagonia eran de los Menendez Bhety y de Patoruzito.
Y ahora algo también, de don Lázaro.
Y la verdad , parece que como nos ensañaba don Alvin T., allá por los 90´.Las elecciones ,sólo sirven para convalidar un estado de cosas preestablecido.
Y si no lo creen ,como una cuestión de Fé, Pregúntele a
Francisquito.
Hablando del Papa Perogruyo, ese pariente cercano de Berogyio, hoy tenia una juntada con Madame Botox.
Me imagino que ambos utilizaran el viejo estilo casi infalible de la stanca, ella llevara la media ostia que le entregara San Tucho y Francis debera cerciorarse que ella no tiene estampado el 666.
Hoy se definira si Francis va a continuar con esa paparruchada de pavonearse con la Francesca Immaculata Chaouqui y por ello tomar de papanatas a Madame Botox.
You apuesto mi salario contra un plato de manies, que Francis le pedira a la Madame Botox que se haga un papanicolau y se deje de papanatear con los paparazzi.
Por mas vueltas que le demos, la impronta de OCTUBRE pasara por la POLARIZACION. PARA QUE EL POPULISMO PERONISTA/COMUNISTOIDE pierda el poder no observo otro escenario. Con estos dos polos: en la Nacional MACRI vs. SCIOLI; en la bonaerense: MASSA vs. el agraciado que sea bendecido por el dedo cristicamporista. En ese formato, por lo menos, HABRA SEGUNDA VUELTA para Presidente.
MACRI ES EL CAMBIO para ocupar el sillón presidencial. MASSA lo es para el provincial. La gestión de Macri en la CABA es suficiente aval (invicto ganador de tres primeras vueltas). La DEFICIENTE GESTION de Scioli como gobernador configura una carta ilógica en aras de ser confirmado mediante el voto para un ASCENSO A LA PRESIDENCIA DE LA NACION. Por otra parte, Massa YA DERROTO AL FPV.-
El Partido Justicialista fue despojado de la Presidencia por el Golpe de Estado del PRN en 1976; transcurrida toda la Dictadura, los antiperonistas temblábamos ante la perspectiva cierta de que el peronismo, con su capacidad de movilización intacta y el aparato sindical como PUNTERO, retomara la Presidencia. Votamos, entonces, a Alfonsin, dentro de un MARCO DE POLARIZACION: Peronismo vs. Radicalismo. Y LUDER, un demócrata (radical en su juventud),
presidente en ejercicio reemplazando a la Sra. de Perón, PERDIO.
Una griila/podio de tres probables favorece al FPV, quien tiene la sartén del FRAUDE por el mango y la BOLSA UBERRIMA para la campaña electoral frente al seleccionado por CFK. No se necesita mucha agudeza analítica para percibir la realidad.
¿CFKILLER CANDIDATA A GOBERNADORA? ME PARECE DE LOS MAS AUTENTICO. QUE ARRIESGUE SU LIDERAZGO y recorra su Provincia natal, si se anima. De Narvaez ya les junto las cabezas para la derrota TUERTO/MANCO/Tigrense. Mazda ya le ganó a Insaurralde. DICEN QUE NO HAY DOS SIN TRES.-
Las «PASONSOS» han sido un invento para beneficiar a medios de publicidad, periodistas, encuestadores, y todo tipo de vividores testigos, no actores. ANTIDEMOCRATICA porque privilegia al que tiene MUCHAS VALIJAS CON DIVISAS MONETARIAS INAGOTABLES PARA GASTAR en dos y hasta tres campañas (si hay segundas vueltas).-
Si pretenden interpretar que el «LIDERAZGO» del KIRCHNOCRISTICAMPORISMO es muy superior al de PERON/EVITA (logotipo caloteado), TIENEN RAZON. A estos los bancan los OLIGOPOLIOS NACIONALES E INTERNACIONALES DEL LATROCINIO, EL JUEGO (escolazo), EL NARCOTRAFICO, LA TRATA DE BLANCAS, EL LAVADO DE DINERO, LA DELINCUENCIA GENERALIZADA PROTEGIDA POR EL GARANTISMO Y LAS PUERTAS ABIERTAS DE LAS FRONTERAS PARA QUE ENTRE LO PEOR QUE SE PROPONGA INVADIRNOS. UN «LIDERAZGO» ABRUMADOR apoyado por CEREBROS LAVADOS Y ÑOKIS PAGOS como es tu caso.-