Por Raúl Mario Ermoli Galluppi.-
Amigos:
En momentos que asistimos azorados a un inusitado festival de ayudas económicas desde lo más alto del poder político, impulsado obviamente desde el ministerio de economía, donde su titular, que además es candidato para las próximas elecciones, se impulsan toda clase de ayudas que se presentan en forma de subsidios, devolución del IVA, eliminación parcial del impuesto a las ganancias para los altos sueldos, bonos para jubilaciones y pensiones, préstamos de ANSES, y en fin, demás beneficios para los argentinos de bajos recursos, desde que se conoce oficialmente que casi la mitad de los argentinos somos pobres, ¡y no pocos rozando la indigencia!… por último, la reciente suspensión de las “retenciones” a las exportaciones del sector lácteo, ¡novedoso por cierto para un gobierno kirchnerista!… Todo muy bien, ¡y muchas gracias, dado el inédito deterioro económico producido en estos años!, evidente en el descenso del nivel de vida, al punto que no son pocos los compatriotas que difícilmente llegan a fin de mes, a causa de un proceso inflacionario que no cede, y en franco aumento, acompañado de un valor cada vez más bajo de nuestra moneda frente al dólar… Como sea, creo que uno lo menos que puede decir es que ya que el gobierno está mostrando tanta disposición para ofrecer toda clase de ayudas, ¡qué pena que no lo haya decidido desde el comienzo mismo de su gestión, cuando la situación económica del país no era “tan” mala como es en la actualidad, y justo ahora, tan de repente, a pocos días de un cambio de gobierno…!
¿Cómo asombrarse, entonces, cuando escuchamos decir que todo esto no es más que un “parche” electoral, conocedores como son de las necesidades de la población? En verdad, todo esto es muy triste, y no habla nada bien de los políticos que nos vienen gobernando, puesto que una cosa es cometer errores, como cualquiera, pero otra es hacerlo de manera intencional, desde el poder para conservarlo cueste lo que cueste, y sin importar las consecuencias a futuro.
Saludos.
Deja una respuesta