Por Luis Américo Illuminati.-

«La mejor política, la más fácil, la más eficaz para conservar la Constitución, es la política de la honradez y la buena fe. La política clara y simple de los hombres de bien, y no la política doble y hábil de los truhanes de categoría.» Juan Bautista Alberdi.

Agárrense de las manos, diría el Puma Rodríguez, los vándalos kirchneristas, la retrógrada izquierda y los peronchotos (denominación de los giles y colaboradores voluntarios). Esto no se aguanta ni un día más. Hay una atmósfera rarificada y espesa de hartazgo, cansancio y bronca acumulada de la gente. Venimos soportando dos décadas de saqueo total de la Argentina, acompañado de un descomunal derroche, descontrol monetario y un brutal desfinanciamiento que nos ha llevado a la ruina total, a la desesperación y a la locura colectiva. Cada día es más feroz la delincuencia y aumenta el narcotráfico; son dos cosas fomentadas por ustedes. Nos tienen de rehenes, ya ni en las casas se puede estar tranquilo, estamos sitiados por la maldad y la furia de criminales que matan por un celular o una mochila.

Todos ustedes son un gobierno de mierda, un gobierno de traidores y mercenarios, un aparato archivenal. Convengamos en que ustedes son una manga de chorros y sinvergüenzas. ¿Está conforme señora? Hizo mierda el país. La muletilla «Ah pero Macri» no funciona más. Sus adeptos y epígonos hablan de guerra civil. Sólo eso le falta a la Argentina. Aguardan su orden. ¿No sería mejor, señora, que se deje de joder y de hacerse la actriz melodramática y con su patético payaso cumple-órdenes juntos renuncien mañana mismo? Ud. lo trajo al borracho (palabra de Berni) y Ud. misma tiene la obligación de llevárselo. Sugiero que Dylan se haga cargo de la presidencia hasta diciembre, él es más sensato, inteligente e inofensivo que ustedes dos. Si lo hacen, tal vez no tendrán necesidad de fugarse del país y quedarse a rendir cuentas de todas las fechorías y tropelías que tienen pendientes. Tengan una pizca de dignidad y mínimo pudor. Se lo agradecerán sus nietos y bisnietos que no tendrán que avergonzarse tanto.

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