Por Giuliano Iezzi.-
Los remedios “gratis” que PAMI entregaba a los jubilados nunca fueron gratis.
Retirar el beneficio de remedios gratis a jubilados no tiene sustento lógico ni mucho menos es justo, desde ningún punto de vista. Para comenzar, si se estableció ese derecho es porque se sabe perfectamente que la jubilación como valor es una mentira. Salvo para privilegiados de los tres poderes políticos e intocables sindicalistas. La falacia de la “gratuidad” le es común no sólo a los gobiernos populistas. Es imposible que algo sea gratis, siempre hay alguien que lo paga. Y si es el estado, aunque sea impersonal, lo pagamos todos. Además la cosa supuestamente gratis, la cuenta de lo gratis, la siguen pagando las generaciones por venir.
Para comenzar, P.A.M.I. es una prestación “no gratuita”, una prestación “adquirida”, porque el beneficiario la ha pagado a lo largo de su vida, y como si esto fuera poco se le continúa descontando de su haber jubilatorio. Entonces, más cobra y más aporta. Es de pleno derecho entonces, si se paga más, ser considerado por lo menos igual. Así que restringirle un beneficio en función de su haber es injusto, y discriminatorio.
En el “condenable” caso de que se posea una prepaga, el tema es peor puesto que seguramente le insumirá a P.A.M.I. menos gastos, ya que sería muy tonto pagar por una clínica decorosa, y en definitiva esperar meses para hacerse atender en un hospital destruido e inoperante. Así que tampoco sería justo quitarle un beneficio a quien demanda menos. También es necesario aclarar que muchos acceden al “estigma” de una prepaga gracias a la ayuda de sus hijos o parientes. A muchos les alcanza apenas y al pagar los remedios lo pone en rojo.
Hasta aquí es claro que no le hacen ningún regalo, puesto que lo ha pagado y lo sigue pagando. Lo contrario es claramente discriminatorio y un robo a manos armadas, perpetrado por el estado todopoderoso.
Ahora bien ¿Por qué el estado necesita esa reducción de costos?
Porque, el P.A.M.I. siempre fue una caja para comprar voluntades al igual que las obras sociales, y por ende se han robado todo. Entonces el gobierno de turno, como no puede o no quiere resolver de cuajo la cosa, para hacer frente a la erogación tiene que recurrir al estado. Ese mismo estado que debería haber defendido los impuestos de los contribuyentes, y cuyos funcionarios se han enriquecido corruptamente. Podría creerles un poco si bajaran sueldos, beneficios y las jubilaciones escandalosas de ellos, a las que acceden en poco tiempo y no en treinta años. Pero de eso ni se habla. Así que no existe intención sana ni justicia en este acto.
Si el estado se ve compelido a aportar, lo hará con los impuestos y los impuestos son pagados por los contribuyentes. Por lo tanto quien más tiene más impuestos paga. Entendámonos, siempre hablando de bienes bien habidos.
Salvedad hecha de políticos sindicalistas y jueces, Dios los guarde. Entonces nuevamente es un robo negarle, a quien paga más que otros y precisamente porque paga más que otros el derecho a un beneficio que otros perciben y que lo perciben precisamente gracias a los aportes que este hace. Parece un juego de palabras pero es tristemente cierto. La igualdad ante la justicia tan cacareada es pisoteada. Pareciera, según los dichos del top banana de turno del P.A.M.I. que como paliativo, algunos podrán tener esos remedios y otros no. Supongo que previo interminables trámites para mendigar por lo propio. Esto será como siempre lo es, irremediablemente fuente de corrupción.
Y nuevamente la capciosamente llamada justicia social se manifiesta simplemente como lo que es, un robo en el que el que reparte se queda con la mejor parte como decía sabiamente la “nonna”.
El concepto, a pesar de no tener ni pies ni cabeza, funciona. Y aquí esta lo más grave. Funciona porque la sociedad de una manera idiota asiente, aprueba y justifica sin pestañar. Porque es presa de la envidia y esto justifica que si tenés más jodete. De esta manera ocho millones de argentinos mantienen a veinte millones de argentinos. ¿Cuánto puede durar esto? ¿Y si un día visto que somos minoría decidiéramos tirarnos a descansar y a pedir nosotros también?
No puede durar mucho, y de hecho somos cada vez menos. Visto la historia de este país poderoso sumido casi en la indigencia. Hace 70 años que se destruyó el porvenir de este país en aras de los pobres. Y el logro mayor es que: ¡Nunca antes hubo tantos pobres! Y los que más robaron son precisamente los “santos” de la justicia social. Es lo mismo que sucede en el área laboral. Tantas son las leyes que pretenden defender al obrero, y que terminan siendo negocio de sindicatos, que la única manera de sobrevivir para las empresas pequeñas es el trabajo en negro, en la mayoría de los casos aceptados por el propio obrero. Es una manera de sobrevivir y de cobrarse lo suyo. Y, entonces son las jubilaciones las que lo resienten, visto que el número de activos no da para pagarlas.
¿Y quién paga las consecuencias? Muy simple, los defendidos que no utilizan el cerebro y creen en el canto de las sirenas, les dan los votos para que políticos y sindicalistas sean ricos y quienes generan los bienes…
¡Sean esclavos de los impuestos! Lo más grave de esta medida de P.A.M.I. no son los remedios, el peligro es que promueve la idea de que quien es exitoso no tiene derechos y es culpable de serlo a tal punto que debe darle casa y sustento a quien no hace nada. Y de paso mantener corruptos en todos los poderes de la república.
Este populismo recalcitrante mezcla de resentimiento, envidia e irreflexivo buenismo simplista se ha constituido en una súper estructura cultural que es superior a la constitución y a la ley de manera que nada puede hacerse que no responda a ella. Constituyendo una herramienta de dominación que todo lo puede. Entonces esta manera de pensar corre como alimento por las arterias del estado y alimenta el cáncer de la burocracia y la corrupción, y más temprano que tarde y no importa lo que esta administración pueda ordenar, y aunque el país arranca volverá en no más de una década otro “kirchnerismo”, con otro nombre, pero seguramente con peronistas mimetizados que nuevamente arrastrarán a la gente idiotizada que sigue con la misma idea que le permite asimilar lo de P.A.M.I. ¡Ser exitoso es pecado!
No soy un vidente simplemente leo la historia de la Argentina y esto sucede irremediablemente cada diez años más o menos.
La Argentina sigue teniendo intactas sus posibilidades innatas de ser un país de primera línea, pero no creo que llegue jamás porque no tiene la convicción y el coraje de hacerlo, es víctima de la envidia de los ineptos y corruptos. El populismo le gusta porque calma los ardores de su envidia y esconde su incapacidad. Hagan limosna, pero que a nadie se le ocurra pretender generar bienes y que cada cual gane lo suyo.
Por este camino solo hay costosísimos paliativos, pero nunca habrá soluciones.
Respetuosa y políticamente incorrecto.
11/01/2018 a las 9:30 AM
Coincido en general con su diagnóstico Giuliano.El tema específico PAMI ,es para leerlo desde varias vertientes.Y le podría contar en carne propia,pues lo padezco en estos momentos.La verdad que el «BANANA TOP FASHION»,está rodeado de una runfla de ineptos(¿soy ingenua?) en el mejor de los casos……analizando con mi médico de cabecera,muy racional y criterioso,me demostró entre otras cosas,el desmanejo conceptual ,de la «cartilla» de remedios que PAMI ofrece con descuentos,y resulta que hay algunos importantísimos para controlar determinada enfermedad,por ejemplo :Resistencia a la Insulina y alteración contínua de valores de referencia ,y NO RECONOCE en ese caso puntual,la provisión de Metformina clorihidrato x mg…..SÍ se lo reconoce a aquellos que ya fueron diagn´osticados con Diabetes y Diabetes melitus………Este medicamento que deberé tomar de por vida,dos tomas diarias sale alrededor de 1.200$……¡de prevenciín al geronte …nada!.El tema es que somos descartables en general,y en un corto plazo desapareceremos y dejaremos de ser problema.PAMI no sabe/no contesta,ó elude el tema…..y así podría contar DE OTROS remedios en mi caso particular.Cada compra de los hipertensivos (tres distintos.),cardíacos,metformina,atorvastatinas,etc,debo abonar alrededor de 2200$ y siguen aumentando……..mes a mes y las «luminarias» que debieran administrar el bienestar general,concluyen en que descontándole al jubilado…..unos pesos van a arreglar la economía del país.Si bien es otro tema el ANSES,no debe despegarse de la macrovisión del tema,es inherente a ello.Los que trabajamos mas de 3o años ,y por razones inverosímiles caímos en la mínima,sin ser reconocidos nuestros aportes( averigÜen que pasó con los servicios no digitalizados de algunas provincias),ahora pertenecemos a otra sub/clase sin 30 años de aportes……..y nos tiran unas muguitas mugrientas,con el cuento de que «no resiste el sistema jubilatorio»….¿y los miembros del Poder Judicial?..¿y el poder legislativo ó Escribanía?…..¿y el Poder Ejecutivo? ¿no había otro lugar donde rasquetear esos mugrientos pesos que a los jubilados nos hac en más que falta?/////Siguen los aumentos de gas,luz,impuestos,remedios,expensas,alimentos …………y quieren que vivamos con 7.000$.NO SEA CARADURA MACRI Y TODOS SUS VOCEROS Y FIGURONES.Son iguales al Kirchnerato,pero más intelectualizados……..PAMI /ANSES una burla atroz.
12/01/2018 a las 9:39 PM
No sorprende que sigan con la política de “UN MUNDO FELÍZ (Brave New World de Aldous Huxley)”.
Igual que los Kirscheristas que crearo un PAMI paralelo dentro del PAMI original (así desarticulabanban el viejo PAMI sin que nadie se enterara), política que continua el Gobierno de Macri, Vidal, Larreta y demases.
Un Argentino Nativo (Clase 1956), Técnico, perteneciente a la Vieja Clase Media, Sobreviviente y ferviente seguidor de la “Consiencia Planetaria” (que nunca fué la globalización); que desea volver a la República Argentina anterior a toda esta basura de negocios (desde 1989 a la fecha actual) que nos está esclavizando en una globalización usurera, explotadora e indeseada y que sólamente favorece a potencias extranjeras y a sus terratenientes.
Pilín Omar Catrasca